Clarke
Hoy cuando ví a Lexa con esa chica no se que me pasó, por un momento sentí que dieron ganas de sacarla a rastras de la sala de juntas cuando ví como le sonreía a Lexa. Luego está el hecho de que cuando hable con ella la sentí extraña, como si de alguna manera Lexa quisiera poner distancia, cosa que confirme al conversar. Ahora estoy aquí hablando con mi reflejo en el espejo del baño de la oficina que se supone ocuparé yo, nerviosa, primero porque no sé cómo decirle a Jake... Mi padre que voy a tener una cita con su nueva socia Alexandra Woods... Y es que después de todo ¿ésto es una cita? No sé, no dijimos que fuera exactamente. Dios cuando nerviosa estoy.
- ¿Te sucede algo hija?
- Ummm... No, no... es solo que estoy un poco abrumada con todo... Eh Jake ¿Te importaría si voy con Lexa por un café más tarde?
- Claro que no hija, ustedes se hicieron muy cercanas y esa chica me parece una persona excepcional, te vendría bien tenerla como amiga.
- Si... Eso pienso yo... Entonces ¿Está bien que vaya con ella?
- Si Clarke, ¿Ella te llevará a casa? O si quieres le digo a...
- Si, ella me llevará.
- Bueno hija... ¿Que te parecido tú primer día en la agencia?
- Bien, ya me gustaría recordar todo para comenzar a trabajar en lo que me dedicaría
- A mí también me gustaría, aunque eso de ser buena en los negocios lo llevas en las venas, amor.
- Eso espero.
- ¿A qué hora dijiste que saldrías con Lexa?
- En media hora
- Bien, entonces te parece si la esperamos en la planta baja.
Yo asentí en confirmación, mientras Jake caminaba a mi lado seguía indicándome hasta lo mínimo. Durante el trayecto en ascensor, este se detuvo en una planta que me trajo recuerdos como si de una bofetada se tratase, tanto así que me dió un poco de náuseas.
- ¿Estás bien cariño?
- Si, es no se... Este piso me trajo muchos recuerdos.
- ¿De verdad?
- Sí, fue muy extraño... Sentí mucha tristeza y recordé a alguien, a un niño...
- Recordaste a Michael.
- ¿Quién es Michael?
- Tu hermano.
- Pensé... ¿Tu no habías dicho que yo era hija única?
- Y en efecto, así es... Él... Él murió.
- Mi... Murió, ¿Como? ¿Como murió mi hermano?
- A tu hermano le gustaba venir contigo a la oficina de tu madre... Un día yo estaba ocupado trabajando y tú madre me había encargado cuidarlos, Michael y tú querían que los llevará a comprar un helado... Yo le dije que fueran con alguien más, él se enojó porque quería que yo lo llevará y salió corriendo...
No hizo falta que Jake terminara de contar la historia porque se formó nítido ese recuerdo... Vi a mí hermano tirado en el piso, un coche lo había atropellado, yo lo tome en mis brazos mientras Michael agonizaba, no pude hacer nada. Sabia que mi padre no tenía la culpa, pero en ese momento tenía tanta rabia que le culpe por su muerte...
- Lo recuer... do... Rec... Recuerdo lo que sucedió. - no podía formar palabras u oraciones estaba a punto de llorar... Las lágrimas comenzaron a salir, mientras mi padre me conducía hacia un sofá una vez el ascensor se detuvo, me arrullo contra su pecho y me decía que me tranquilizara, pidió a una secretaria que trajera un poco de té y en menos de lo que pude darme cuenta lo tenía en mis manos.
- No, yo no debí... Esa fue una razón por la que decidiste ir a estudiar a Oxford, estar aquí esos años te hizo mucho daño y decidiste terminar tus estudios de preparatoria y pregrado en Inglaterra... No debí recordarte.
- Está bien... Es solo que fue como estar nuevamente allí y... Todos los... Esos sentimientos de ese momento me llenaron por completo.
- No hay día Clarke en que yo no me arrepienta de lo que sucedió, no hay día que yo no me culpe... Sí yo... Sí hubiese ido... Sí tal solo hubiese ido Michael estaría vivo.
- No tienes que culparte de nada... Eso es algo que si sucedería nadie lo hubiese podido evitar.
Yo me acerque a mi padre y le seque las lágrimas que bajaban por sus pómulos y lo abrase con fuerza como él lo había hecho momentos atrás, lo solté y le digo un beso en la frente. Me puse en pie y me dirigí a donde estaba la chica que me había traído el té.
- ¿Me podría indicar dónde queda un baño?
- Claro, mano derecha al fondo.
- Gracias señorita...
- Scott, Maddy Scott.
- Gracias señorita Maddy. - me acerque a Jake. - ¿Aviso a el señor Fitzgerald para que te lleve a casa?
- Ya me encargo yo, hija... Siento que te hayas tenido que acordar de ese momento tan duro de tu vida.
- Gracias... Eso quiere decir que me estoy recuperando.
- Pero a qué precio, eso fue algo con lo que ya habías aprendiendo a vivir.
- Seguramente volveré a aprender... Voy al baño, Lexa está por llegar.
- Está bien mi amor espero que te vaya bien.
Jake se acercó a mí y me abrazo, luego me dió un beso lleno de mucha ternura y cariño y se despidió con el amago de sonrisa en la cara pero con un dolor y tristeza profundo que revelaba de alguna manera el dolor que yo sentía en ese momento dentro de mí. Para desaparecer todo rastro de llanto me dirigí al banco y me arregle lo más que pude, ocultando de muy buena manera cualquier signo de haber llorado, al salir del baño me encontré a Lexa al pie del ascensor esperando a que las puertas se abrirán. Se veía en exceso nerviosa y muy hermosa, una vez me vio me sonrió y camino en mi dirección mientras yo también iba en su encuentro.
Antes de que siquiera dijera algo la abrace con toda mi fuerza y no pude evitar que se me escaparan unas pocas lágrimas.
- ¿Sucede algo linda?. - asentí y me separé un poco para ver cómo se reflejaba una creciente preocupación en sus ojos.
- Recordé un episodio de vida muy doloroso... Lexa tuve un hermano que murió en mis brazos.
Ella me abrazo otra vez mientras yo recargaba mi cabeza en su hombro y ella acariciaba mi espalda de manera rítmica hasta que sintió que me tranquilizaba, poco a poco me soltó.
- ¿Quieres hablar de ello?
- Podríamos ir a otra parte.
Lexa asintió
- ¿Tienes hambre, quieres que te lleve al lugar a donde íbamos o prefieres ir a otra parte más tranquila?
- Me gustaría ir a otra parte más tranquila.
- Bien entonces te llevaré a un lugar donde me gustaba ir cuando venía a New York.
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Lexa
- ¿Tienes una reserva de este tipo de lugares?
Durante todo el trayecto en coche hasta el lago donde ahora me encuentro con Clarke ella no dijo palabra alguna hasta este momento,e da gusto que lo haya hecho con este tipo de broma.
- Si, la verdad es que si. Me gustan los lugares donde se puede estar en soledad y completo silencio.
- Es decir, buscas los lugares en mapas o algo así y los tomas como tus... "Zonas de reflexión"
- No, no de ese modo. Muchos de los lugares que tengo como, ¡¿Cómo les dices tú?!... "Lugares de reflexión" lo he encontrado mientras hago ejercicio en las mañanas, este en particular lo encontré hace un par de días.
- Bien tendré que salir a trotar seguido para ver si yo también consigo un lugar como este. - dijo Clarke con suma tristeza.
- ¿Como te sientes con lo de tú... Con lo de tú hermano?
- Sabes Lexa, desde que regrese a mi casa me eh exigido para poder recordar todo lo que se supone es mi vida y... Y cuando pasa esto... Lexa yo tengo tanto miedo de encontrar más... Dolor, se que suena cobarde, pero cuando se vinieron a mi memoria esos momentos en que veía a mi hermano tendido en mis brazos agonizando yo sentí rabia y desesperación, quería hacer algo y no... No pude y él... El se murió. - Clarke se rompió a llorar mientras yo la sostuve fuertemente entre mis brazos, la he visto muchas veces triste, pero ahora además de triste estaba vulnerable y sentía el desesperó en su voz, quería tanto hacer algo para quitar todo ese dolor que estaba sintiendo en ese momento. Ella seguía llorando y yo la arrullaba en mis brazos mientras nos dejaba caer al pasto frente al lago sin romper en ningún momento el contacto con ella, luego de un rato sentí como su respiración dejaba de ser solloza y se volvía en una más tranquila y acompazada, tanto que llegue a creer que se había dormido, pero cuando me acerque un poco para ver su cara, pude ver que simplemente estaba perdida en la vista del lago como en estado de ausencia. Cuando intenté decir algo para ver si estaba bien fue ella quién rompió el silencio.
- Gracia por estar conmigo, no sé cómo hubiese podido manejar esta situación.
- Sabes que siempre, sin importar que pase con nosotras, yo siempre voy a estar para tí.
- ¿Es una promesa?. - yo asentí
- Yo Alexandra Woods te prometo a ti Clarke Griffin que pase lo que pase, estemos donde estemos y sienta o no lo que siento en este momento por tí, siempre... siempre y sin excepción alguna, contarás con mi apoyo de la forma en que tú lo desees... Como una amiga, como pareja, como lo que te haga sentir más cómoda. - una vez hice mi promesa como era debido con su mano en mi corazón, ella se acercó a mí y me dió un beso como nunca antes me lo había dado, sentí tanta dulzura, tanto amor, tristeza, tantos sentimientos que me dejaron tan abrumada que tarde más de tres segundos en corresponder al besó. Después de lo que para mí fue ir al paraíso, ella se alejó un poco de mi con sus manos sujetando mis mejillas y me dijo.
- Si ahora mismo lo que tú sientes por mí es amor, entonces ten por seguro que tus sentimientos son en sobremanera correspondidos. - yo no sabía cómo reaccionar, lo único que se me ocurrió en el momento fue abrazarla y besarle la frente, las mejillas, cada rinconcito de su hermosa cara y ella termino fundiendonos en un beso que declaraba todos los sentimientos que con palabras no se alcanzaban a explicar.
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¡He resucitado! Disculpen el haber estado desaparecida por mucho tiempo... Se me han presentado muchos inconvenientes, entre ellos mi portátil se dañó y bueno entrar a actualizar se me hizo complicado porque no me acordaba de la contraseña de mi perfil, fue todo un enredo hacerme de nuevo de la cuenta, por otro lado he tenido mucho trabajo en la Universidad, pero contra cualquier pronóstico aquí estoy, nuevamente les reitero que me disculpen... Sí más les dejo este nuevo cap del fic, ojalá les guste y perdonen cualquier error ortográfico... ¡Feliz semana mayor para todos y todas!
