#Cap.18

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Tan sólo Zayn al abrir la puerta, Harry golpeó su cara con un puñetazo y me tomó del brazo corriendo hasta el auto.

Todo fue en un par de segundos,  todavía no reaccionaba a lo que pasaba.

Harry se colocó al volante y aceleró lo más fuerte que pudo, me sujete del vidrio cuando acelero y opté rápidamente ponerme el cinturón de seguridad.

- ¿Como supiste? -le dije sin vueltas.

- Jade... - respondió sin dejar de ver el camino hacia adelante.

-¿Jade te dijo?

- Si, es raro...lo sé.

-¿Pero... pero como? - me quede impactada.

- Su vecino,  es cómplice de Malik. Son como una mafia gigante, y lo peor de todo internacional. -miró por el retrovisor y abrio sus ojos.

-¿Que pasa?

- Zayn, nos sigue. Sujetate -y a los segundos aceleró más fuerte que antes.

Pasó por calles y callejones a toda velocidad y Zayn aún seguía detrás de nosotros. Hasta que Harry optó por pasar por un tipo de callejón muy estrecho y justo ahi el auto de Zayn no cabía.

Harry sonrió victorioso y manejó un poco más allá para asegurarse que Zayn no siguiera la persecución. Cuando estacionó en el lugar X suspire aliviada y solte el cinturón de seguridad. Abri un tipo de cajoncito que tenia Harry en su auto y saqué una pastilla diminuta. 

- Hey!  -me tomó la mano Harry antes que las tomara. - ¿Que haces?

- Me duele la cabeza, necesito una pastilla.

- No, esto no es una pastilla - y me arrebato de las manos.

- Si, si lo es - se la quité y antes que dijiera algo la inserte en mi boca suspire agotada y me apoyé en el vidrio.

- Por dios que acabas de hacer? - choco su mano contra su frente.

- Intento terminar con este maldito dolor de cabeza, ¿Que hay de malo con eso?

- La cabas de cagar, Perrie - rió colocando sus manos detrás de su cabeza alevando sus codos.

*Narrador Normal*

Después de esa conversación y varias horas tras esperar que Zayn se alejara por completo del sector,  Perrie no tuvo conciencia de nada... la pastilla que contenía Harry era nada mas ni nada menos que, extasis. Y él sabía perfectamente lo que se vendria.

- HARRY! NO TU ME LLEVAS A CASA o TE CASTRO! - gritó Perrie colgando del asiento del auto.

- Ok -rió- ¿Entonces a donde vamos?

Se salió de su posición y lo quedó mirando. Se acercó a él y tocó su cara como si fuera el ser más valioso que halla visto en su vida.

- Comeme - dijo casi en un suspiro y besó su cuello provocandole un calor a Harry que recorrió la gran parte de su cuerpo.

Saltó de su asiento,  al asiento de Harry sentandose en sus piernas. Apretó la bocina con su trasero y comenzó a reir.

-¿Pero que rayos es... es.. eso? ¿Ah? -rió y se apoyó en el pecho de Harry.

- Perrie estas muy mal, debo llevarte algún lado.

- Hay por dios Leonardo Dicaprio, pero no me lleves al Titanic porque esa mierda se hundira, lo sé porque sé ver el futuro - y entrecerró sus ojos para luego reir nuevamente.

- Dios.. -dijo encontrando graciosa la situación.

-No, no es Dios soy yo! tampoco soy Hanna Montanna, soy yo!... Perrie Edwards.

Tomó entre sus manos la cara de Harry y lo besó con desesperación. Él paso sus manos por sus hombros para alejarla de él pero no lo pudo hacer a tiempo, porque aunque no quisiera la persona que más lo exitaba era ella, Perrie.

Lo que pasó después ya se podrá deducir, los vidrios se engañaron por completo y una chica bajo el consumo de la extasis y un chico fanáticos del sexo, era una combinación realmente explosiva.

Losing Hope  (Zerrie)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora