Serie Inocente # 0: Obsesionado con tu Inocencia

Capítulo: 48

Me puse de pie inmediatamente. No, no, no.

Salí con cuidado de la tina y me puse una bata. ¡Maldita Victoria!

Salí de la habitación justo a tiempo para escuchar sus gritos. Estaba furioso.

-¡Isabella! - gritaba. Mis ojos se anegaron de lágrimas. Traté de respirar profundamente, no me hacía bien.

Me anudé bien la bata y lo esperé. Escuchaba los gritos de sus padres y de Anthony. Le pedían que se calmara.

La puerta se abrió y él entró a la habitación.

Estaba tan furioso.

Sus padres también entraron y Anthony.

-¿Qué mierda pasó?- ladró. Cerré los ojos con fuerza y él llegó hasta mí. Me tomó del brazo con fuerza y lo miré.

-¡Calmate! - pidió su padre acercándose. Lo miré fijamente a los ojos. Se notaba furioso y dolido.

-No te metas, Carlisle - ordenó. Sus ojos estaban anegados de lágrimas.

-Lo siento, yo quería evitarse preocupaciones. Había pasado lo de Naty y tú ya estabas estresado, sé que estos temas te ponen mal y yo...- negó con la cabeza.

-¡Eres mi mujer! - gritó.

-Yo le pedí a papá que se hiciera cargo... Lo hizo - llevé mi mano a su agarre en mi brazo. Me estaba lastimando.

-¿Tu padre? ¿Tu padre? ¡¿Y dónde carajos quedo yo?! - volvió a preguntar.

-Edward, hijo calma - pidió Esme.

-No quería preocuparte... - volví a repetir.

-Te dije que no fueras a trabajar con ellos, pero no. Tú querías llevarme la contraria y ese maldito intentó violarte - negué con la cabeza. Yo no pensé que todo esto fuera a pasar.

-No creí que él se sintiera así. Yo me defendí... - Me siguió apretando el brazo hasta que chillé. Me soltó de inmediato.

-Te defendiste... ¿Eso no fue cualquier cosa la que te hizo verdad? Si hubiera sido cualquier cosa no te hubieras tenido que cambiar de ropa y no hubieras tenido ese golpe en el costado... ¡Me mentiste! - gritó.

-Yo no quería que...

-¡Cállate! ¡No sigas repitiendo que no querías preocuparme! - sollocé.

Llevé mi mano dónde él me había agarrado. Se estaba poniendo morado.

-Edward - se acercó Carlisle y tomó su hombro. Él se sacudió.

-¡Váyanse! - ordenó.

-Edward... sé que debí decírtelo, pero me pareció que tenías muchos problemas y preocupaciones y pensé que mi padre podía solucionarlo. No sé cómo se filtró a la prensa o sí sé... fue Victoria - él se echó a reír. Reía mientras lloraba-. Lo siento.

-¿Qué fotos y qué vídeo? - preguntó tomando asiento en el borde de la cama y tomando su cabeza con ambas manos.

Me abracé a mí misma. Me sentía tan mal. No me atrevía a tocarlo. Lo veía tan angustiado y frustrado.

-Edward...

-¡¿Qué malditas fotos?!- gritó poniéndose de pie.

-Yo... Yo tengo un correo de hace mucho tiempo... Leah quería hablar conmigo de algo privado y no quería... No quería que nadie se enterara. Empezamos a chatear por ese correo y cuando pasó lo de Riley yo fui a mi puesto a calmarme cuando me percaté de un mensaje de una dirección desconocida... Yo... - cubrí mi rostro con ambas manos. No vi cómo se acercó, pero sí sentí cuando me tomó las manos y las alejó de mi rostro.