Pasado

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Ocurrió hace cuatro años. Conocí a JJ e Isabella luego de que ellos me ayudarán a superar la situación complicada por la que atravesaba en aquel entonces. Me dieron una nueva oportunidad y me trajeron a Rusia.

—el trabajo de garzón no es tan complicado como parece, además creo que para ti es perfecto pues puedes trabajar en la noche y descansar en el día. En el futuro y cuando tu hijo nazca será de mucha ayuda— Isabella era la dueña del bar que ahora es propiedad de JJ, ella dedicaba su vida a cuidar de ese establecimiento, pues me contó que era la herencia de su abuela, a quien ella quería mucho.

— ¿tú atiendes este lugar sola?

— así es, desde el día que la abuela falleció.

— ¿y él señor JJ?

—JJ está muy ocupado con sus negocios y siempre esta diciéndome que mantener este lugar en pie es un esfuerzo innecesario, pero yo no lo veo así. Fue en este lugar donde lo conocí a él, en este lugar me di cuenta de lo que sentía, en este lugar le confesé mis sentimientos por primera vez y, en este lugar acepté de una buena vez que JJ formaba parte de mi destino. Puede sonar tonto, pero la verdad pienso que este es un sitio mágico.

Isabella era alguien que se mostraba un poco fría ante los demás, pero cuando llegabas a conocerla, te dabas cuenta que en realidad era muy noble, mostraba mucha inocencia en muchos aspectos y era cálida si sabías tratar con ella.  No me sorprendía que JJ la amara tanto, su historia de amor era digna de envidiar, no es muy común ver parejas destinadas estar juntas, pero ellos tenían la suerte de estarlo. 

— ¡Mila,  Minami! ¡Tengo una sorpresa para JJ!...— el día que supuse sería el más feliz de sus vidas, ella se veía realmente contenta.

— ¿de qué se trata? Por tu expresión de felicidad puedo suponer que es algo muy bueno, ¿quizá por fin encontraste el vestido perfecto para tu boda?...— Mila y yo bromeamos, también estábamos felices por ella.

— no, bueno, si la boda no se apresura creo que ya no podré usar ningún vestido jaja

— ¿pero qué dices? No será que...— Mila no estaba más sorprendida que yo.

—así es, sé que aún no estamos casados y que para evitar los malos ojos de la sociedad JJ aún no me ha marcado, pero... es que estamos tan seguros de lo que sentimos que, nuestros instintos de alpha y omega respectivamente no pudieron esperar.

—Entonces, ¿estás diciendo que...?— la afirmación de ella con la cabeza no los confirmó.

Ese día JJ quedó de citarse con Isabella en el bar, ya que por el negocio en el que trabajaba en ese momento no tenía más tiempo que por la noche, y lo que Isabella debía decir no podía esperar. El bar estaba lleno por la función especial de esa tarde, una cantante muy reconocida estaba como invitada especial.

La gente bebía celebrando el 9 de mayo, "el día de la victoria", fecha especial aquí en Rusia. Todo parecía ir sin mayores problemas, hasta que un hombre vestido de militar se indispuso y se puso a hacer arcadas, dando claras señales de que iba a vomitar.

— Por favor señor acompáñeme al baño— Isabella quiso guiarlo hasta el sanitario, esperando que el hombre pudiera reponerse ahí; más este estando ebrio la abrazó sin que ella lo esperara, al parecer la confundió con alguien. JJ llegó en ese momento, y tan pronto como entró, y al ver aquella escena; golpeo a aquel tipo iniciando un escándalo que terminó en una pelea. Isabella intentó frenar a JJ porque estaba fuera de si, pero lo que ocurrió después era algo que nunca hubiera creído de no ser porque lo presencié.

El amor no tiene forma Donde viven las historias. Descúbrelo ahora