Tu cara entre mil sombras

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#QuedateConmigo1

Era una fría noche de final de invierno. Un 14 de marzo para ser exactos. Se preguntaba por qué hacía tanto frío si casi era primavera mientras sacaba del bolsillo derecho de su chaqueta de cuero un gorro verde militar y se lo ponía en la cabeza. Sacó un cigarro y lo encendió. Para calentarme pensó. Miró el móvil, tenía un mensaje del grupo de sus amigos de toda la vida, ellos ya habían llegado a la discoteca, mientras él, que había decidido ir a pie, todavía tenía que andar unos 10 minutos más. Sus amigos se habían puesto pesados en ir de fiesta por su cumpleaños, aunque él preferiría haberse quedado en casa, celebrarlo de una forma más intima y familiar. Sobre todo la que más había insistido había sido Eva. Eva era la chica con la que llevaba cuatro meses "saliendo", siempre le ponía comillas porque todavía no estaba seguro al cien por cien de que esa relación fuera a funcionar. Eva tenía el pelo castaño oscuro, casi negro, era un poco más baja que él, tenía los ojos verdes y un cuerpo perfecto... Ella era perfecta. Pero siempre quería viajar, salir de fiesta... Todo menos sentarse una tarde a escuchar el solo de trombón de él. Y eso le echaba para atrás, él vivía por y para su música y que no lo valoraran era algo que se le clavaba en el alma.

Con tanto pensamiento no se dio cuenta de que una chica venía corriendo hacia él. Ambos se chocaron y ella dándose prisa le pidió disculpas.

-Ay, lo siento, lo siento mucho, ¿estás bien? Perdón, de verdad, iba con prisas porque me acaban de robar el bolso y tengo que encontrarlo, como se entere mi madre me mata. - Aquella chica hablaba muy rápido y se le notaba agobiada.

-Si, tranquila, est... - No le dio tiempo a contestar porque la chica salió corriendo hacia el otro lado.

El se giró, todavía en shock por lo que acababa de pasar, y vio como a lo lejos la chica se encontraba de rodillas en el suelo. Corrió hacia ella y la levanto con cuidado. Llevaba una chaqueta marrón oscuro entre la que se dejaba ver una camiseta blanca de cuello alto, una falda vaquera y unas medias negras que se habían roto por la rodilla y dejaban ver rastro de sangre.

-¿Estás bien? - Le preguntó señalándole la rodilla con una mano y apartándole el pelo de la cara con la otra. Sin querer se quedo embobado mirándola, era preciosa, tenía una cara especial, como diría él. Ella le miro a los ojos y le sonrió. Su sonrisa era aún más bonita, joder, ¿por qué no la había visto antes?

-Oye, ¿me escuchas? - La chica le miraba ya sorprendida. ¿Qué le pasaba a ese chico que no dejaba de mirarla?

-No, digo, sí, perdón, ¿qué me decías?

-Te decía que estoy bien, que muchas gracias, ¡mira! Ya tengo mi bolso y no le falta nada. -Dijo la chica con un tono de voz súper alegre y dulce.

-Me alegro mucho, ¡qué susto! Por cierto... me llamo Alfred, encantado. ¿Y tú, como te llamas?

-Amaia, yo soy Amaia.

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Madre mía espero que os guste. Si es así dadle a la estrellita, me haría muy feliz. Si queréis podéis dejar comentarios sobre qué os parece el primer capítulo, qué pensáis que pasará o que os gustaría que pasase. Nos vemos lo antes posible. Amor ×1016 💚

Por cierto, supongo que cambiaré la portada y no sé si haré algún cambio más, lo hacemos y ya vemos. Si me queréis recomendar algo, estoy encantada de recibir vuestros comentarios.

Quédate conmigo || Almaia Donde viven las historias. Descúbrelo ahora