One More Chance [JRen]

Adiós "mejor amigo"

—¿Puedes creer que este sábado seremos unos muy felices graduados de secundaria?

¿Que si podía creerlo?
No, no podía. Simplemente esa información no entraba en mi casi no desarrollado cerebro.
3 años habían pasado como 3 días con 3 horas y 3 minutos.

Sentía unos nervios inmensos que hacían doler mi estómago. Si la secundaria fue difícil, ¿que me espera en la escuela media superior?
Simplemente era un reto que aún no quería averiguar. Y mucho menos, lejos de MinKi quien, en esos momentos estaba sonriendo con su cabeza en mis piernas en nuestros típicos viernes. Como los iba a extrañar.

—¿Ya invitaste a alguien al baile? — me miro ladeando la cabeza tan adorablemente que hizo crecer una sonrisa ladina en mi rostro.

—¿Baile? Uh, yo no lo se... —suspire— no creó quedarme mucho rato.

Y era verdad. Desde siempre había odiado las fiestas, jamas fueron mi fuerte, no pensaba quedarme al baile por varias razones pero la primera: no tenia pareja.
Tampoco sabia si MinKi la tenía y si la tenía, no quería saberlo. Ese simple pensamiento hizo que dejara de jugar con sus cabellos rubios.

—¿Que dices? ¿Por que no?

—Uh... No tengo con quien ir — aparte la mirada e inconcientemente comencé a temblar.

—¿Qué? —escuche su suave risa, esa que día con día me encantaba cada vez más — Jong... Tu, mi queridisimo amigo, vendrás conmigo. Me siento lastimado por el hecho de que no lo hayas pensando, acaso... ¿No quieres que vaya contigo?

—¡Pero claro que quiero ir contigo! Es solo que pensé que... Pues tu ya tenias a alguien...

Una nueva risa fue captada por el viento — Yo solo te tengo a ti.

Y como si mi corazón ya estuviera acostumbrado a ese tipo de palabras; latía y lo hacia con tanta intensidad qué de verdad temía que el fuera a escucharlo. Pase saliva y le Sonreí, aunque no tan hermoso como el lo hacía.

—Entonces — se incorporó y me tendió su dedo meñique — Es una cita.

—Es una cita.

Su sonrisa y el beso en mi mejilla jamas lo podre olvidar.

~∆~

—¡Mira ese, es tan lindo y apuesto que te veras guapísimo!

Bufé viendo los trajes que a mi madre le causaban tanta ilusión. Todos eran iguales, solo que de diferente color. Puse los ojos en blanco y la seguí sin tanta emoción, lo único que alegraba mi corazón era que dentro de un día tendría una cita con "mi mejor amigo" ¿Podria seguir llamándolo así? No estaba seguro.

En fin, seguí a mi madre por horas y horas de tienda en tienda, probando trajes con el mismo diseño o el mismo color, solo que diferente predio y marca. Estaba cansado y ella pareció notarlo.

—Oh, vamos, mi rey — acaricio mi mejilla — ¿acaso no quieres lucir precioso para esa chica que te gusta?

Mis ojos se abrieron con sorpresa, ¿chica, decía?
Reí en mi interior. No, no era una chica. Era un hermosisimo rubio con ojos color caramelo y perfecta sonrisa, y ni siquiera estaba seguro si me gustaba, pero al ver a mamá tan ilusionada con eso, solo pude asentir y seguir en busca del traje perfecto.
Volví a bufar.

Traje perfecto, zapatos brillantes, peinado estético y nervios al cien por ciento. Sip, ese era yo en esos momentos. Mire por milésima vez mi reflejo y sonreí.
Solo esperaba que a mi MinKi le gustara, suspire y salí al salón en donde se encontraban mi madre y mi hermana. Las miré y ellas con lágrimas en los ojos que no dejaron salir para no arruinar su maquillaje, me abrazaron. Los tres nos fuimos al baile.