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Caminaba deprisa por la solitaria calle, cada determinados segundos volteaba a ver sin detenerse, a pesar de que la noche era fría él había comenzado a sudar demasiado, estaba nervioso y desesperado, quería llegar a la seguridad de su hogar y respirar con tranquilidad.

Maldijo por lo bajo cuando se tropezó ligeramente, no tocó el suelo pero aquello le hizo detenerse y era lo que menos quería. Escucho la grava crujir detrás de él, su pulso se disparó y su respiración se detuvo, se enderezó y sin dudarlo salió corriendo lo más rápido que podía, en estos momentos se arrepentía de no haber entrado a las clases de atletismo.

Entre su desesperación y ajetreo busco en su bolso una pequeña lámpara de descarga eléctrica que siempre llevaba con el, era mejor tener aquel objeto a la mano por si llegaba a necesitarlo, aunque rezó con todo su ser para que no fuera así.

Dobló repentinamente por una calle, volviendo a girar por otra, quería despistar al sujeto que lo estaba persiguiendo, a pesar de que desde hace varios metros no escuchaba sus pasos sentía esa pesada presencia, rebuscó dentro del bolso su teléfono celular, tomó un Segundo ver la pantalla y presionar sobre el nombre del contacto para llamar.

- Dios! Responde!!!- gruño corriendo más rápido cuando escucho nuevamente los pasos presurosos detrás de él

El maldito número lo enviaba a buzón de voz, lo intento otras dos veces y al final opto por hablarle a la contestadora.

- Hae!!- dijo desesperado- Alguien me está siguiendo! Tengo la ubicación activada!! Por favor.... si algo pasa...y no regreso - suspiró nervioso- Búscame!! Te quiero Hyung....

Guardo el móvil y por puro instinto volteo hacia atrás, casi se desmaya cuando vio a un tipo enorme y redondo caminando rápido tras él, pero lo que más le asustó fue el hecho de ver los ojos amarillos del tipo.

- Oh Dios!! - pensó- Que es peor que te persiga un humano!! Un fantasma!!!- soltó un chillido cuando el tipo o lo que fuera sonrío escalofriante y aumento la velocidad.

Y entonces supo que era su fin, iba a alcanzarlo, podía haberlo hecho desde hace metros atrás, pero no lo hizo, estaba jugando con el, lo estaba cazando, era una presa débil y ligera para semejante tipo, fantasma o lo que fuera.

El tipo lo sujeto del brazo deteniéndolo abruptamente, asustado gritó tomando la lámpara entre sus manos dándole varias o muchas descargas eléctricas que para su suerte hicieron que el tipo quedara en el suelo medio inconsciente.

Se alejó del cuerpo caminando hacia atrás, apunto de echarse a correr para alejarse del lugar, cuando alguien le cubrió la nariz con un pañuelo, intento inútilmente luchar pero fue en vano, cayó casi inmediatamente en los brazos del sujeto.

- Sabia que eres un inútil y no podrías completar la misión- dijo con fastidio mirando al sujeto sobre el suelo, mientras cargaba delicadamente al joven inconsciente- Despierta inútil!!- golpeó al más grande logrando moverlo

- Qué...- preguntó volviendo en sus sentidos- Qué rayos haces aquí Kibun?- gruño sacudiendose el polvo - Está misión me fue encomendada a mi!!!- disgustado miro al chico pálido que sostenía- Porque estás aquí!!!

- Porque sabía que no serías capaz de hacerlo! inútil!!!- afirmó molesto- Y el Amo también lo sospechaba! Así que por precaución me envío, por si necesitabas ayuda!! Y fue lo mejor- lo miro con desprecio- Hubieras echado todo a peder!! Tonto incompetente!!!

- Estupido!!- respondió ofendido ante sus palabras- Yo debía de encargarme del chico!!!

- Deja de hacer rabietas ShinDong!!! Nuestro Amo no podía confiarte esta misión tan importante!! Hemos esperado miles de años por esto!!!- Miró al joven inconsciente- Ahora debemos de llevarlo ante nuestro Amo!! Esta noche al fin podremos liberarnos!!!- exclamó satisfecho antes de mirar a ShinDong y hacerle una seña para que ambos desaparecieran con su víctima en brazos.





















La Leyenda De Lì TèDonde viven las historias. Descúbrelo ahora