No Eres El Indicado.

Capítulo 59 "Me joroba "

Como persona madura que soy, decido escribirle por sms de texto a Silas por su cumpleaños aunque haya pasado. No existe rencores aunque todavía me joroba su actitud, vaya abogado tendrá el futuro...

Feliz cumpleaños, lamento no hacerlo personalmente y tarde.

Tal vez no responda, no me daría la impresión pero aun así me equivoqué cuando mi celular pitó a los segundos.

Gracias cariño:* no te preocupes. ¿Cómo estás?.

Ole ole pero mira quien me ha respondido rápido y con cariño. Sonrío con la esperanzas que Silas haya madurado y pensado lo cabezón que puede llegar ser.

Súper, periodismo es lo siempre soñé.

Iniciamos la conversación de manera que cualquier se sorprendería, Silas es una persona agradable y me gusta conversar con él aunque en ocasiones se vuelve pesadito.

¿Ya tienes novio?.

La puta que parió... ¿En serio? ¿No podía hacer otra pregunta? Ya comenzó a jorobarme; seré como Shakira: ciega, sorda y muda.

Sigo reciente en New Orleans. No ando en busca de novios donde sea que vaya.

Acabo de iniciar la pelea de nuevo y cabe destacar que vine para tener una conversación normal y sin pelear pero es lo que le gusta. Se ve miserable suplicando que volvamos tener nuestros encuentros casuales pero recuerda algo que se llama dignidad y me reprime que no volverá buscarme. ¿Acaso le estoy pidiendo que se rastre por algo que no volverá pasar? Se lo he dejado tan claro como las aguas de Los Roques. Suspire cuando leí el último sms:

Si te digo para intentarlo una vez mas pero de diferente manera?

No, no estoy dispuesta a repetir algo que no llega a nada, algo no me favorece ni me satisface de alguna manera. Y se lo hago saber nuevamente.

“Estaba en una cena con toda mi familia sin saber la razón, miré a mis lados pero todos actuaban de modo automáticos. Unos dedos se deslizaron desde mi hombro hasta mi mano para luego entrelanzar nuestras manos y besar mis nudillos; levanté la mirada y mis ojos chocaron con los de un chico de ojos color miel, no se quien era o de quien se trataba pero me transmitía una paz inexplicable.
Me levanté de la pesada silla y comencé a caminar pero noté que el chico no me siguió que ahora me mira intrigado, le hice señas para que me siguiera pero no quería.

—Tenemos una cena con tu familia —su voz era carrasposa pero no se le borraba su sonrisa.

—No se darán cuenta que fuimos a dar una caminata, tranquilo no les molestará —reí divertida.

Él se levanta y camina tratando de no llamar la atención de mi familia, me abrazó y yo rodee mis brazos en su cuello sonriendo siseo:

—¿Tan difícil fue eso? —escanee su cara, tez morena acompañado de una barba, algunas ondas caían en su frente y mandíbula perfilada.

Él negó con la cabeza, me inclinó y me besó. Tan cálido, el beso era lenta disfrutando el momento; se separó y me miró con un destello.

—Agradece que estamos debajo del muérdago —ríe.

Miré y cuando fui a responderle, él ya no se encontraba, en realidad, nada".

Desperté gracias a que caí de la cama, miré el reloj 06:30a.m y sonrío que hoy tengo libre en la universidad. Me levanté e hice mi rutina y volví encerrar en la habitación pues no me gusta andar caminando por la espaciosa casa. Cuando el reloj marcó 10:20am caminé a la empresa de mi tía en busca de café e internet, choque con el hijo del padrino de mi primo, el chico no es feo y tiene unos increíbles ojos verdes pero nació con un problema en la mandíbula en la parte de abajo con encaja ya que está sobresalido y eso requiere operación. Le sonrío amablemente y él responde para luego cada uno seguir con mi camino, cuando llego a la oficina de mi tía no se encuentra y maldigo mentalmente, doblo mi talones y me conseguí mi tío favorito sonriente como siempre, a pesar que tuvo ese accidente automovilístico que desfiguró parte de su cara sigue siendo guapo.

—¡Hola tío! —lo abrazo —¿Sabe donde se encuentra mi tía?.

—Acaba de salir con Rogger —toma una taza con café —¿Gusta?.

Asiento con la cabeza y me lo entrega, me senté en el gran sillón de cuero de mi tía detrás del escritorio. Mientras esperaba texteaba con Ronni la mejor mujer que pude amistarme; la puerta de la oficina se abrió de golpe y apareció mi panzón papá oso de mi primo Rogger con mi tía.

—Te tengo cerca y aún no te veo nunca querida sobrina —me abraza fuerte. Recuerdo cuando tenía como seis año, ella era mi tía favorita y me emocionada cada vez que mi familia volaba a New Orleans, ella era todo para mí pero las cosas cambian claro aún la sigo queriendo.

—¡Tía! —reí ante su comentario —Cada vez que vengo andas ocupada o no estás, como hoy.

—Bueno tienes que venir más seguido, para que no te sientas sola —me da un apretón de manos —¿Vienes al almuerzo con nosotros?.

Me encanta almorzar con ellos, ya que así no me siento sola. Vivo con mi tío pero siempre almuerzo o ceno sola ya que nunca coincidimos en la hora de comer. Así con una sonrisa acepto la petición y camino junto a Rogger.