Capítulo 67 "Rubio"

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Miraba a Bella con Denna, se les veía felices, del otro lado Dina y Gea que a pesar de sus peleas cuando están juntas todo se esfuma. Mientras yo sigo en la soltería; estábamos en el club esperando para entrar, había muchísima personas, Bella le susurra algo a Denna y ésta se va a saludar a un chico catire.
No era la última Coca-Cola del desierto, pero tiene su toque, su rubio cabello y sus claros ojos, debe ser un coqueto e infiel.

—Gabriel no sabía que yo era bisexual —dice con las mejillas coloradas.

Por mi parte no miré mucho al chico, ya que estaba conversando con Fernando ex de Santiago. Pagamos y le pasé un lado al rubio, el cual este me lanzó una mirada matadora. Hoy será mi noche.

***

Me desperté sin saber que había pasado la otra noche, miré a mi lado y pude reconocer la cama, miré mi ropa y estaba manchada con vómito —que me mato y me matan —. En resumen vomité a Bella, Gea y a mi misma pero igual el caso de Dina aunque lo de ella fue fracaso total. Quise ligarme al rubio y bueno me torci el tobillo; lo más triste de la historia mañana me toca viajar a New Orleans para mí última clase y vale nota, moriré.

Luego de tres semanas toda bebida me daba miedo y las salidas al club también, pero esta vez se las debía a las muchachas así que no bebería nada. Cuando entramos volvimos entrar y estaba el rubio, sonrió y llamó a Bella nuevamente.

—Bueno chicas, hoy son libres de cuidarme. Porque este cuerpo no va a beber ni una gota de alcohol —sonrío y las sigo hasta la barra.

—Así espero —ríe —Hoy vas hacer la mamá del grupo.

—Obviamente Gea.

Ya eran las tres de la mañana, el tobillo mi pedía auxilio y apenas ví unas sillas, corrí a sentarme. Escape de la lesbiana que por por muy guapa que era, yo soy hetero así que Gea corrió con suerte; de reojo pude ver al rubio discutiendo con un pelinegro que al minuto lo empujó hacia a mí.

—¿Estás bebiendo? —me mira con la ceja arqueada. Mi respuesta fue reírme, pues él fue quien me ayudó a llegar al taxi.

—Sólo agua, gracias —lo miré —Hoy no haré de nuevo el show, así que conmigo te puedes relajar.

—¿Y tú novio no se molesta que estés aquí sola?.

—El que no tengo —reí —Estoy soltera.

—¿Te molestaría si te pudiera el número de teléfono?.

Se le notaba el nerviosismo y sonreí, ¿Que puede pasar si le doy mi número de teléfono?.

No Eres El Indicado.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora