No Eres El Indicado.

Capítulo 18 "Ex"

—Iré a la licorera a comprar alcohol y después vuelvo contigo —sonrío —Así baja ese tenedor Marie.

—Te vas a quedar, por vendrá esa gentuza —sigue apuntado con el tenedor.

—Ash sólo viene Denna y Damian... Creo que Danny, aunque creo que no porque la novia es peor que una dictadura.

—Admite que vienes por Azael —ríe.

—La daré la oportunidad, vamos a ver que pasa.

***

Nunca dejen a su amiga sola y menos si es el cumpleaños de su ex. Tony estaba hablando con Marie mientras ella estaba con Andrey, Azael y Blake que estaba un poco alejado; yo los veía desde lejos y ya sentía la tensión, sólo duré una hora ¡UNA! Dejé las botellas con licor en mi casa y corrí hacia donde estaban los demás, cuando llegué Marie se marchó a su casa con Andrey, le pedí a Blake que se fuera con mi hermana y me quedé afuera con Azael con Tony.

—¿Qué pasó aquí? —me crucé de brazos. Azael llevó su brazo por mi hombro.

No era muy amiga de Tony, siempre cuando le tomaba confianza la cagaba y terminé odiándolo. Añadiendo que siempre desde hace cuatro años la hace llorar por sus idioteces.

—Koko, tu sabes que yo amo a Marie.

—Pero ella no a ti —se puso a mi frente, pero lo corrí a mi lado tomándolo de la mano.

—¿Quién eres tú? ¿Y por qué sujetas la mano de Koko? Ella es como mi hermana —alzó la voz.

—Espera, espera ¿qué? Tony... ¿No te cansa joderle la vida a Marie? Ella está mejor sin ti —señalo.

—Soy su novio, mucho gusto gusto —sonríe.

Sin previo aviso, Azael toma mi mano y me lleva a la casa de Marie, quien lloraba sin parar, en un susurro me dijo: “Terminamos por Tony”. Dicen que las chicas enanas son las tiernas, pues no me creo eso, lancé nos cosas e iba salir pero Azael se interpuso en mi camino cerrando las dos puerta con llaves.

—¡Déjame salir de la puta casa! —grité.

—¿Y luego?.

—¡Él no puede llegar de la nada y seguir haciendo sufrir a mi amiga, Azael apartate de mi camino!.

Me abrazó.

—Shh... Dejen que ellos resuelvan su problema.

—Koko.

Apenas entro a su habitación, Andrey se va a la sala con Azael.

—Koko... Estoy embarazada —sigue llorando —Tengo dos semanas de retraso, vomito a cada minuto y siento mareos —me susurra —No le digas a nadie.

—¿¡Qué!? ¿Marie sabes lo que está pasando? Deja de estar pensando en chicos, la vida no es sólo eso... ¿La universidad? ¿El empleo?.

Ya es la tercera vez que que pasa así, ella no se protege al momento del acción, no escucha mis consejos, por eso merece que le hable tan horrible.

—Estoy cansada de repetirlo pero... Sabes que puedes contar conmigo —sonrío.

Escuchamos risas y salimos corriendo, Andrey intentaba salir.

—Ella hablará contigo mañana, vete...

—Koko, mañana... Las espero a ambas —se marchó, al voltearme tenía a Azael muy cerca.

—Besarlo, ya tienen tiempo juntos —Andrey ríe y se va junto con Marie.

Lo besé, sentí el siglo pasar, no me era cómodo besarlo era como besar a mi primo gay. Cuando nos separamos me susurró:

—¿Cual era el miedo? —ríe y me lleva a la cocina.

No sabe besar. Otra más, diosito sé que a veces soy mala persona... Pero envíame alguien que sepa besar.

—Tengo hambre —digo mientras me apoyo del mesón.

—Siempre tienes hambre Koko —bromea.

—Tengo modo On el embarazo —reímos.

—Khloé pero tu eres niña de casa... Todavía —mira a su amigo.

Odiaba ser catalogada como la niña virgen con diecisiete años, ser lo no me molestaba, pero ser el tema lo odiaba. ¿Quién le interesa eso? Es mi vida joder.

—Eso es lo que tu dices —le guiñe un ojo —Soy peor de lo que ustedes creen, esta carita —me señalo —Hace cosas que ustedes ni se lo imaginan, así que calla así supuestamente te ves más bonito.

Marie tomó a Andrey y se lo llevó a la sala. Azael me abrazó por la espalda mientras yo intentaba concentrarme en escribir, comenzó a chocar su miembro con mi trasero.

—Regala otro beso —susurraba.

Dos puntos sensibles que nadie debe tocar: Cuello y oído. Él ya lo hizo, mi concentración se fue para Narnia, no podía pensar en más nada mientras que él seguía besando mi cuello.
Me voltee y lo besé, cuando me separé de él estaba estupefacto. Reí y me fui.