Otro día normal, en que Izuku llevo el café para su jefe y espero a que le diera las indicaciones sobre que debía hacer ese día, cada día era hacer algo diferente, algún recado o revisar documentos, enviarlos papeles a otras áreas o simplemente responder llamadas, pero siempre había algo nuevo en su día por eso esperaba paciente a recibir sus órdenes del día.
Pero antes que Katsuki dijera algo entro sin tocar el vicepresidente y mejor amigo autoproclamado, del rubio.
- katsubro, Deku - los saludo - traje la lista que pedías, están todos los inversionistas que asistirán al evento, hize un exelente trabajo - se alabo a sí mismo pues parte de su trabajo eran las relaciones públicas.
- ajá, Deku encárgate de llamar a cada uno en la lista y confirma sus direcciones, les serán enviadas las invitaciones y muchos suelen estar de vacaciones o simplemente mudarse, así que es mejor confirmar - él seguía revisando los archivos en su computador pero despegó la vista cuando ninguno salía de su oficina.
- emmm - Deku esperaba paciente la lista que al parecer Eijiro no quería soltar - Kirichan la lista - le pidió tiernamente.
- claro que sí - le gustaba cuando el peliverde le llamaba así, era mucho mejor que ser llamado...
- pelo de púas lárgate ya o es que vienes a llorar porque Pikachu te voto - trato de ignorar aquel sobrenombre y la molestia de escuchar ese tono tierno.
- no me voto solo es un malentendido - claro que se sentía mal, pero tenía demaciado trabajo como para distraerse llorando.
- si claro, verte desnudo despidiéndote de quién sabe cuál zorra es un malentendido - sarcasmo puro - que casi me cuesta a mi mejor modelo, por tus estupideces, aún recuerdo como decías que ibas en serio...
- si voy en serio con él, solo que es una malentendido, juro que no esperaba que luego de tres años de no verla un día llegará con llaves y me besara justo cuando me levantaba, menos pensé que justo en ese momento llegaría mi Denki - apretó la hoja contra su pecho dolido de que nadie creyera su historia.
- la lista - susurro Deku pero estaba siendo ignorado por ambos.
- por tus tonterías casi se va, sabes perfectamente que Tomura siempre ha competido contra mi empresa y casi lo convence de irse a su compañía, mi mejor modelo en manos de Tomura...debería despedirte, al menos logré combenserle de que se quedará.
- y eso de que ayuda si no puedo acercarmele - parte del trato para que el rubio se quedará es que Eijiro no se le acercara.
- suspiro agotado - no me interesa como lo solucionan, si lo encierras y le obligas a escucharte, si vas a su casa y te lo cojes o si terminan, solo quiero que los dos hagan su trabajo - lo miro amenazante.
- entiendo - sabía que no podía molestarlo con sus asuntos privados, cerca de una reunión importante, ya después seguramente irían a beber a algún lado y le permitiría desahogarse a su antojo, pero no mientras estubiera ocupado.
- emm...Kirichan la lista - le pidió nuevamente, cuando lo vio darse vuelta sin siquiera percatarse de su presencia.
- perdona Isu - le dió el papel arrugado que aún tenía en sus manos y le dió una leve sonrisa de tristeza.
- quizás sólo nesecita tiempo - tomó el papel y también su mano, mientras le dedicaba un linda sonrisa.
Un golpe los hizo exaltarse, un demonio emergiendo, golpeó el escritorio con ambas manos mientras se ponía de pie, esa cercanía no le gustó nada.
- a trabajar ambos - sus celos lo habían dominado por completo.
Eran amigos por tanto tiempo que el pelo de púas sabía a qué se debía esa relación en su amigo, era bastante obvio para quien lo conociera un poco.
