Al llegar a la escuela Kota quería morirse, sentía todas la miradas en él, era espantoso.
Lo peor era ver a su mejor amigo acercarse con esa sonrisa de gato sardonico dispuesto a humillar lo aún más.
Natán lo abrazó y lo llevo así hasta el salón de clases mientas él se moría de la la ver vergüenza al escuchar algunos chismes en el camino.
- tienes que contarme todo y con detalles, sucios detalles - le pidió al llegar al salón.
- cállate - suspiro ocultando su cara entre sus manos sobre su pupitre.
- por favor no me voy a creer eso de que no pasó nada.
- pero no paso nada.
- te juro que no te entiendo nada, dices que No te gusta pero babeas cada que lo vez, dices que No te importa pero vas cada que puedes a su casa, dices que No es nada importante pero te la pasas suspirando al verlo disparar una flecha, te lo juro no te entiendo.
- no.....es.....un.....amigo....si eso, somos amigos - salió de su escondite para parecer sincero.
- si y ayer casi me golpea solo porque le caigo muy mal, aja.
- le grita a medio mundo, obvio que odia a todos - desvió la mirada.
- ajá....yo no me chupo el dedo, sabías, porque no admites tu sexualidad y que te gusta, corrijo, se gustan.
- yo....sabes que nunca he tenido novia y ni tengo tiempo para eso.
- eso y que te gustan los penes - revolvió su cabello.
- no - volvió a esconderse en su pupitre.
- te gusta, al parecer a él también gustas - no había manera de negar eso tras la escena de celos el día anterior - y yo como tú mejor amigo te apoyo, así que no entiendo que te preocupa.
- mi hermano, él.......a él.....si le van las chicas - murmuró muy bajito.
- tu hermano te ama y lo hará aún si te gusta dar, o ser sometido, o meter o que te la metan o ser versátil o.....
- cállate - estaba más que rojo, nunca pensó en eso y no quería hacerlo, por ahora se conformaban con los besos de ese chico de mal genio.
- por favor te lo suplico deja de ser tan, tan, mojigato de una vez di que lo quieres y que deseas darle....
- cállate...
- todo tu amor, mal pensado, pero enserio yo te apoyo y tu hermano lo hará igual, así que lo único que te falta es declárate a ese mal hablado y si te rechaza....
- no me va a rechazar....
- así se habla... - tubo la esperanza de que su amigo tuviera los ánimos de aceptar lo obvio.
- porque no me voy a declara, es decir no me gusta, no me gustan los chicos.
- se levantó y miro al cielo - por favor yo no tengo tanta paciencia, por favor - rogó a alguna divinidad existente, a cualquiera - que mi amigo lo acepte de una buena vez - golpeó ligeramente su cabeza.
- eso duele - se quejó molesto y bajo la mirada aún sentía que algunos de sus compañeros lo miraban y comentaban algo entre susurros mal disimulados.
- tal vez debería darte un par de golpes en la cabeza a ver si así reaccionas y lo aceptas.
- no tengo nada que aceptar.
- voy a cambiar de táctica, si intentar darle celos a tu no-crush para que se anime él, entonces hablaré con tu hermano.
- ¿a él para qué?