"Mejor Amigo"

¡Bésame de verdad!, tonto

Yoongi volvió a su casa en compañía de Hoseok, quien molestó y molestó para acompañarle, pues, según el chico no quería que se fuera solo en su estado; a decir verdad, Yoongi estaba bien, aquellos golpes no le lastimaban nada, en cambio, su pecho se sentía quemar y lo peor, no había nada que pudiera curar aquel dolor por el momento.

Su madre al verlo hizo un gran escándalo, pero al igual que los dos chicos, termino creyéndose la historia de su supuesto robo. Por nada en el mundo él diría que fue Jimin, conocía a su madre y no deseaba preguntas del porqué pelearon; Yoongi podía mentir perfectamente, pero cuando se trataba de hacerlo con aquella mujer, todo salía siempre mal.

La peor parte fue ir a la universidad, los ojos sobre él comenzaban a molestarle, si bien, su madre trato de maquillarle algunos moretones, la inflamación en su mejilla era muy evidente para ser cubierta.

— ¿Qué te paso? —. Yoongi cerro su casillero para enfrentar a la mamá osa mayor en ese momento.

— Hola Rosé, hablas de esto, bueno, me asaltaron, ¿qué decir? —. La chica le mira con preocupación, mientras le acaricia la mejilla. Rosé era su mejor amiga, demasiado dulce, pero excedía la sobreprotección cuando se trataba de él.

— Son unos bárbaros, ¿te duele mucho? —. Le pregunta con preocupación, Yoongi se aleja de aquel tacto un poco, sintiéndose incómodo con la mirada de los demás estudiantes, después de todo llamar la atención no le agrada.

— La verdad nada—. Le responde el pálido y la castaña continúa hablando, pero Yoongi solo puede fijar su mirada en el chico que se encuentra a unos metros de él, con aquel grupo de personas, sus amigos.

— Tengo que ir al taller de música, hablamos después —. Se disculpa. Rosé quiere retenerlo, pero este se marcha con rapidez. No está para inventar historias, y tratar de desviar la conversación de lo sucedido ese día, de porqué y como "lo asaltaron".

— ¿A dónde va? —. Zico, otro de los amigos de Min pregunta mientras se acerca a Rosé y la rodea con su brazo, la castaña se zafa de su agarre con molestia mirándolo con fastidio.

— Me imagino que va al salón de música—. Le responde observando como sus otros amigos se acercan.

Jimin solo lo ve alejarse sintiendo su pecho doler al verlo tan decaído, sonríe un poco tratando de ocultar la incomodidad que siente al tener a esa mujer tan cerca, pues Jimin ha decidió empezar a salir con la chica que le sonríe como si su vida dependiera de ello.

— Hola Yoongi—. El mencionado levanta su rostro viendo al chico castaño en el umbral de la puerta.

— ¿Taehyung? —. Pregunta con duda.

— Sí, te acordaste de mi nombre, eso es bueno—. Le dice mientras se acerca con una rectangular sonrisa.

— Bueno, me dieron ayuda, era lo mínimo que podía hacer—.

— ¿Cómo siguen esos golpes? —. Le pregunta señalando los hematomas mal maquillados.

— Mejor—. Responde sin ganas continuando en acomodar todo el desorden de sus escritos.

— Me alegra—. Dice el chico comenzando a caminar por el aula y es en ese momento que Yoongi nota el saxofón en sus manos.

— ¿Tocas? —. Pregunta, tratando de romper un poco el incómodo silencio que se estaba formando.

— Algo—. Responde este, pero su celular comienza a sonar, cortando la conversación. Taehyung toma su teléfono con apuro y se disculpa con Yoongi.

— ¿Amor? —. Susurra, viéndose un poco cohibido por la presencia de Yoongi, quien lo interpreta fácilmente, y se aleja un poco, leyendo algunas de las partiduras y entreteniendo su mente; pero aun escuchando la conversación a la lejanía.