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Dolor y odio

— ¿Donde está?— JiMin finalmente llegó a la habitación de SeokJin con la angustia recorriendo su cuerpo. Él realmente tenía miedo de que algo grave le hubiera pasado a su amigo.

— Tranquilo muchacho, ¿Eres amigo de nuestro Jinnie?— Una mujer pelirroja miraba detenidamente a JiMin, esta se veía completamente tranquila a comparación del otro.

— Sí... Soy Park JiMin, SeokJin es un amigo y no tenía idea de que estaba aquí ¿Qué le sucedió exactamente? ¿Ya se encuentra mejor? ¿Es muy grave? ¿Cuando saldrá? ¿Podré venir a visitarlo cuando quiera?— La mujer estaba intentando procesar todas y cada una de las preguntas del rubio. Decir tanto en solo unos segundos aturde.

— Tranquilízate... JiMin, SeokJinnie ya se encuentra muchísimo mejor, saldrá mañana mismo por la tarde. Aún no tengo mucha idea de que sucedió, lo único que tenemos claro mi marido y yo es que alguien lo atropelló y no se hizo cargo de lo sucedido— El aire al fin pudo circular por el cuerpo del más bajito, todas sus preocupaciones se esfumaron y se sintió genuinamente agradecido de que todo esté bien.

— No sabe cuán feliz me hace con escuchar eso Señora Kim, estaba muy preocupado. Respecto a que sucedió, supongo que nos queda esperar y preguntarle al mismo SeokJin si recuerda algo— La pelirroja mujer le sonrió cálidamente y luego de unos segundos se excusó argumentando que ya debía irse porque debía terminar parte de su trabajo, sin descontar que le pidió a JiMin que cuidara de su "SeokJinnie" mientras ella no estuviera.

JiMin se decidió por entrar en la habitación y ver a su amigo rubio conectado a un montón de cables mientras desprendía un aura de calidez y tranquilidad.

— Incluso aquí en este lugar tan frío y seco haces de un ambiente cómodo SeokJin— El rubio río para sus adentros y luego se sentó en uno de los sillones más cercano a la camilla de toda la habitación.

SeokJin comenzó a abrir sus ojos por el ruido que generó JiMin al sentarse, después de todo, esos sillones estaban considerablemente gastados y se hundían con facilidad cuando una persona se sentaba, así causando un sonoro ruido que hacía eco en toda la habitación.

—¿JiMin?— El rubio que se encontraba en la camilla, observó a su amigo con una sonrisa que solo él podía entregar— Pensé que mis amigos se olvidaron de mí—SeokJin ríe levemente, pero sin embargo esto no generó ni una pizca de gracia en el otro.

— Lo siento, estuve intentando saber cual era tu paradero, cuando al fin me enteré me asusté demasiado ¿Que fue lo que sucedió? Tu madre ya se veía tranquila pero eso solo ha de ser porque mañana sales de aquí— JiMin estaba realmente apenado de poder llegar a visitarlo luego de tanto. SeokJin había hecho desaparición desde un poco antes de la fiesta y no lo notó, estaba tan concentrado en sí mismo que no logro darse cuenta del estado de su amigo.

— Tranquilo Mochi, no tienes porque disculparte, lo bueno es que me encontraste y ya estás aquí. Lo que sucedió...— La vista de SeokJin se perdió en algún punto del cuarto y JiMin se quedó expectante a lo que tuviera que decir.

•••

— NaHee, hazme caso ¿Quieres?— NamJoon intentaba que la pelinegra chica le dijera algo. Desde que se dieron cuenta del desastre que armaron, ella se dedicó a culparlo, después de todo solo dejo caer un poco de harina en su brazo, no era necesario causar tanto revuelo por ello.

Mala Memoria|Kookmin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora