POV Bia
Caminé con la mirada de todos en mí. Llegué con Guillermo y él me miraba con una sonrisa.Bia: Muchas gracias —miré a todos—. Aunque ahora se están preguntando con quién bailé.
Guillermo: Siempre hay un intruso en el baile, las únicas que están verdaderamente intrigadas son tus amigas.
Bia: ¿Qué les diré?
Guillermo: ¿Qué les podés decir? —reí.
Bia: Me dijo que me esperaba allá atrás.
Guillermo: ¡Bien! Vamos.
Comenzamos a caminar pero antes de salir de toda esa gente mis amigas junto a Carmín nos detuvieron.
Chiara: ¿Quién era él?
Celeste: Nosotras solamente vimos cómo te tomó y comenzó a bailar con vos.
Carmín: Al parecer no te importa tener novio —miré a Guillermo.
Guillermo: Fui yo quien la mandó con mi hermano para que bailara con él así que ella no tiene la culpa de nada. No sabemos quién pueda ser y justamente íbamos a buscarlo pero ahora no creo que lo podamos encontrar.
Carmín: ¿Y por qué hiciste eso? —se acercó a él. ¿Qué planea Carmín?
Celeste: Ya basta, Carmín.
Alex: Guillermo necesito tu ayuda.
Guillermo: Después te llevó —me susurró y asentí—. Adiós chicas —se fue junto a su hermano.
Carmín: Voy a demostrar que no sos tan santa como aparentas —se fue y me dejó con mis amigas.
Celeste: ¿No nos vas a decir a nosotras?
Chiara: ¿Quién era?
Bia: No lo sé, ni siquiera conozco su nombre.
Chiara: Volvé a decirlo —me miró fijamente.
Bia: Ni siquiera conozco su nombre.
Chiara: Dice la verdad, no conoce el nombre del chico. Soy buena descubriendo cuando ella miente.
Celeste: Está bien. ¿Vamos por algo de tomar?
Bia: En un momento voy.
Celeste: Está bien.
Las dos se fueron y solté el aire que tenía retenido. Estuvimos muy cerca.
Bia: Ahora entiendo la importancia de no saber tu nombre.
La Cobra: ¿Ya ves? Siempre tengo razón —dijo cerca de mi oído y salté del susto— Perdón —dijo riendo.
Bia: ¿Qué hacés acá?
La Cobra: Vine por vos —tomó mi mano—. Vámonos antes de que alguien nos vea.
Asentí y dejé que me guiara entre los arbustos. Llegamos y había un columpio sujetado de un árbol. En el piso había una manta y la vista del cielo nocturno era hermosa.
Bia: Es hermoso...
La Cobra: Sabía que te gustaría —me abrazó—. ¿Querés columpiarte un poco?
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Bia: El Comienzo De Todo
Fiksi Penggemar¿Quiénes son mis padres? ¿De dónde provengo? ¿Por qué me abandonaron? ¿Qué fue lo que hice mal para estar aquí sola? Esas son las preguntas que Bia se hace cada día desde que llegó a la casa hogar.