Entré incómoda a su casa, la verdad es que no sé ni si quiera por qué acepté.
-Pasa, tranquila -se le veía indeciso pero me tomó del brazo con la mano y me llevó a la mesa del salón- Siéntate aquí mientras yo preparo la comida.
-Vale -susurré y me sonrió.
Vi como se iba a la cocina y me senté allí. No tuve que esperar más de media hora hasta que llegó Taeyong con una olla de comida, como un restaurante.
-Voy a por los platos -me levanté y fui a la cocina, como le había ayudado a guardar las cosas, sabía dónde estaban, abrí un cajón y cogí un par de platos y dos pares de palillos- Toma -dije dándole lo que había cogido.
-Gracias.
Me volví a sentar y Taeyong me sirvió la comida, le di las gracias y empecé a comer. Ninguno decía nada, estábamos en un completo silencio.
-¿Te gusta?
-Si, está muy rico.
-Gracias -sonrió- Si quieres hay más, puedes servirte, siéntete como en tu casa.
-No es necesario, con lo que me serviste antes es suficiente, gracias.
-De nada.
El silencio volvió.
-Y... ¿estudias algo? -le pregunté.
-Ya te lo dije, estudié dirección de empresas.
-Ah, cierto, yo escribo, aunque estudié para ser profesora, pero tú ya sabías que soy escritora.
-¿Tan corta es tu carrera?
-No, empecé un año antes.
-Ah, ¿quieres que te deje ya en el supermercado?
-Si, por favor.
Nos levantamos y le ayudé a recoger y lavar los platos, después salimos y subimos a su coche.
Había un supermercado grande un poco lejos y fuimos a ese. Los dos bajamos del coche.
-Yo también tengo que comprar.
-Ah.
Me dio unas bolsas porque yo no había traído y cada uno cogió una cesta.
-¡Ustedes dos! -Nos dijo una señora mayor- ¡Vengan! -No pudimos negarnos y nos acercamos. Nos cogió las manos y nos miró a los ojos -Me recuerdan tanto a mi y a mi marido -se le escapó una lágrima- Que en paz descanse -se sacó algo de su bolso- Para vosotros -Nos puso una pulsera a cada uno- Para que siempre seáis felices y duréis mucho tiempo juntos.
-Muchas gracias -dije e hicimos una reverencia y nos alejamos -No podíamos decirle que no somos una pareja, la señora se veía tan feliz que no podía quitarle esa felicidad.
-Ya, yo tampoco.
Terminamos de comprar y fue extraño, porque en ningún momento nos quitamos aquellas pulseras.
[...]
-Gracias por todo -dije mientras bajaba del coche- Nos vemos otro día.
-Adiós Taehee.
-Adiós.
Entré a mi casa y guardé las cosas en su sitio. En eso me llegó un mensaje. Era Hyekyo.
-Mira lo que he encontrado para ti
-Es un amigo mio que te ha visto y
quiere tener una cita contigo-Bueno, yo nunca te dije que quisiese
-No voy a ir
-Por favor, hazlo por mi
-Ademas no tiene por qué salir nada de esto
-Solo dale una oportunidad, ¿si?
-Vale
-Cuando
-Mañana a las seis
-Está bien
-Tienes suerte de que mañana es
domingo-Yay! Voy a avisarle de que si vas
-Cuídate
-Tu tambien
No me creo que haya aceptado, siempre he odiado las citas a ciegas.
ESTÁS LEYENDO
Memories [Lee Taeyong] (HIATUS)
FanfictionLos recuerdos de Taehee se quedaron en eso, recuerdos. •100% mía •No copiar ni adaptar •Actulizaciones cuando pueda Empezada: 18/3/18 Finalizada: ??