Fantasy

Capítulo 17: Elementos de la Naturaleza

Era día 2 de Mayo a las 7:00 de la mañana en Fantasy cuando el sol primaveral asomaba por el mar de Lanis. Todos los seres del reino luminoso querían presenciar el acto que se realizaba ese día en un balcón-terraza del palacio. Como todos los habitantes de Lanis no cabían en el jardín se habían dispuesto unas pantallas en directo mediante magia.

Romen, un empleado de Palacio, llevaba una hora buscando a Natura, recorría los pasillos rápido pero sin llegar a correr. Abrió las puertas de las habitaciones donde dormían los preelementos y empezó a despertarlos a voces.

-Señores, señores ¿han visto a la princesa? Llevo una hora buscándola y no la he encontrado.

Tair fue al último que despertó así que respondió medio dormido.

-Yo se donde puede estar, iré a buscarla.

Tair se cambió de ropa, salió del palacio, se transformó y fue corriendo hasta el bosque de Fantasy.
El bosque estaba situado cerca del Reino de la Vida, donde antes había habido un poblado Vetting.
Llegó a un claro por donde pasaba el río de la Vida, cerca de este había un sauce, el único que se podía ver en todo el bosque. Entre las largas ramas, que se mecían suavemente por la brisa, se podía ver un alicornio blanco. Tair se convirtió en humano y se acercó.

-Princesa, llevan una hora buscándote.

-¿Como sabías que estaría aquí,  Tair?

Natura se volvió humana y salió de debajo del sauce.

-Mis "padres" trabajaban en palacio, me contaban anécdotas y una de ellas era que siempre venias aquí cuando tenias un acto importante.

Natura miró el sauce con añoranza y admiración.

-Si, es verdad, este sauce es mi árbol favorito, además, es un Edos perdido.

-¿Un Edos?

-Si, un Edos es como se le llama a un ser que está mentalmente conectado con otro ser, aunque no sean de la misma especie. Este es un Edos perdido, no se sabe con quien está conectado.

Natura se quedó mirando el río donde el agua se separaba para poder pasar una roca.

-Hermes también tuvo su Edos, era un pegaso, un anciano que nació el mismo día. Cuando yo recuperé mis poderes él murió, y su Edos también.

Después de un silencio Natura habló más animada.

-Bueno ahora tenemos un acto importante.

Ella quería ir corriendo hasta el palacio pero Tair no la dejó, por si se torcía una pata o se manchaba el pelaje. Después de insistir mucho Natura accedió ha ir montada encima del unicornio marrón.

Tras unos minutos de galope, antes de salir del bosque, Tair le habló telepáticamente, preocupado.

-«¿Y si no puedo controlarme?»

-¿De que hablas?

-« Todo esto de ser Elemento de la Naturaleza me ha hecho pensar. Cualquier día podría traicionaros o me comporto mal, o mucho peor, os hago daño. Soy una creación de Serpient, soy un alma sin corazón, no soy natural, no se como soy en realidad...»

El unicornio siguió corriendo y Natura notó su preocupación, el chico tenía razón. Ella se quedó pensando, no sabía como enfrentarse a esa situación, no sabía como reaccionaria Tair. Había que ir con cautela, Natura acarició la crin del unicornio.
Entonces notó que las patas de Tair se volvían mas rígidas, y sus ojos se volvían mas oscuros.
La princesa estiró de las crines del unicornio. Este paró en seco, ella desmontó de un salto y puso su frente encima de la frente del caballo. El unicornio relinchó y cayó al suelo transformado en humano e inconsciente.