| AU SHORT FIC
El destino actúa de maneras extrañas así como el amor. Separados por mas de dos años, sin ningún contacto entre ellos después de terminar su relación, un accidente llega a cambiar todo en la vida de ambos. Rebecca Wood solo recuerda...
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❝El destino puede seguir dos caminos para causar nuestra ruina: rehusarnos el cumplimiento de nuestros deseos y cumplirlos plenamente.❞
— Henry F. Amiel
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Existe un dicho que dice "Las noticias malas tienen alas y las buenas andan a penas", muchos creen que lo que los abuelos o las personas mayores dicen no tiene importancia, bueno en estos momentos Louis Weasley hubiera deseado creer todo lo que su abuela le dijo antes de morir.
La ciudad de Nueva York, lugar donde los sueños se cumplen y todos buscan una oportunidad para brillar. Tal cual como el sol brillaba en aquel momento encima de todos los habitantes de aquella concurrida ciudad. Central Park resplandecía de verde gracias a la llegada de la primavera, podías escuchar a los pájaros cantar si te paseabas por los jardines de aquel parque, miles de familias disfrutando de un clima templado.
Cierto rubio que caminaba por aquellos laredos desentonaba un poco con el paisaje, vestido de traje con celular en mano, definitivamente no cuadraba con la imagen de miles de familias y parejas disfrutando un tranquilo sábado de primavera. Pero que se podía esperar de un chico que vivía de las relaciones publicas y que los paparazzi esperaban fotografiar cada cinco minutos.
—Si Elisa, estaré ahí como quedamos. —respondió el rubio a través de su aparato electrónico. —Deberíamos planear algo más tranquilo, solo nosotros dos. —sugirió y segundos después una mueca se formó en sus labios. —Si tienes razón, no tendría sentido.
Después unos cuantos minutos la llamada finalizo, un bufido de cansancio se escapó de los labios de Louis, quien se froto su cara con ambas manos en un gesto de desesperación y tratando de encontrar la calma que hace tiempo había perdido. Tal vez la fama era la culpable de aquello, ser parte de los medios no es algo sencillo, tu privacidad no existe, pero son los gajes del oficio, al menos asi lo vio el rubio cuando empezó con su carrera de modelaje.
Unos pasos más y el rubio llego a su destino, un antiguo puesto de periódicos que aún seguía activo. Un señor de avanzada edad lo saludo cortésmente regalándole una sonrisa que le recordó a su abuelo Arthur, lo cual lo llevo a recordar la ciudad que dejo atrás hace varios años.
—¡Joven Louis!, es bueno verlo por aquí. — saludó como todos los días el Señor Méndez. —Como no vino en toda la semana, creí que estaría fuera de la ciudad.
Louis negó con una leve sonrisa en sus labios ante aquel comentario. —No, pero estuve más ocupado de lo normal, estoy empezando una nueva campaña. —mencionó el rubio tratando de fingir cierta emoción por aquel proyecto.
—Oh, ya veo. —respondió con simpleza el señor al ver los ojos cansados del chico frente a él. —Bueno pues, por si las dudas, le guarde todos los ejemplares de la semana incluyendo el del día de hoy.
—Es usted muy amable Señor Méndez. —agradeció Louis y deposito algo de dinero en las manos del vendedor para después tomar los ejemplares que este le entregaba. —¡Que tenga buen día!
Todo parecía normal, rutina, inclusive un poco monótono, pero asi era la vida del chico rubio con acento francés, una rutina continua que parecía no tener fin. Louis deseaba que aquello cambiara, que algo sucediera de repente y que su vida diera un giro. Los humanos no entienden que no se debe desear solo porque si, que debemos tener cuidado con lo que deseamos porque el destino puede estar aburrido y dártelo de la forma que menos esperas.
El joven modelo se sentó en una banca que afortunadamente encontró libre y se dispuso a leer el periódico, saltándose todas las secciones que no le interesaban y llegando a la sección de "Internacionales", la manera en la que se ponía al tanto de lo que, sucedida en su ciudad natal, aparte de los noticieros, pero el rubio nunca había entendido su amor por sentir el papel periódico contra la palma de su mano.
Los ojos del rubio escanearon con curiosidad la portada que llevaba como titular "Trágico accidente en la ciudad de Londres", la imagen del auto destrozado que se mostraba en el periódico logro transmitirle un escalofrió al chico. Louis comenzó a leer con atención la noticia y su sangre se helo al leer el nombre de la víctima, el pulso de su corazón aumento y un sentimiento de vacío se formó en la boca de su estómago.
"Rebecca Wood Bell se reportagravemente herida, según los informes médicos sufre de un golpe severo en el cráneo, se desconoce las consecuencias que esto pueda traer"
El periódico simplemente se le resbalo de las manos y aquellas palabras comenzaban a rondar por su cabeza, sus ojos se humedecieron y su respiración comenzó a ser entrecortada.
—No ella, no Becca...—fue lo único que sus labios lograron articular para después salir corriendo de aquel lugar.
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| ¡Hola Merodeadores! Bueno aquí tienen el segundo capitulo, espero les guste y cualquier duda pueden dejarla en comentarios.
