Casados Por La Mañana [KyuMin] Libro 4

Capitulo 3

-Yo ni siquiera sabía de la existencia de Min hasta que tuve veinte años - dijo Hyukjae Rutledge, estirando las piernas mientras él y Kyuhyun se sentaron en el club del Hotel Rutledge. El lugar, con su tranquilidad, lujo y con sus numerosas ábsides octogonales que proporcionaban un lugar intimo para reunirse, era un lugar popular de reunión en Londres por la nobleza extranjera, los viajeros, los aristócratas y los políticos. Kyuhyun miró a su cuñado con escepticismo apenas disimulado.

De todos los varones con los que se podrían haber casado uno de sus hermanos, Rutledge sin duda no habría encabezado la lista. Kyuhyun no se fiaba de él. Por otra parte, Hyukjae tenía sus puntos buenos, entre ellos su evidente devoción a Doghae.

Hyukjae bebió de una copa de coñac caliente, considerando cuidadosamente sus palabras antes de continuar. Era un hombre apuesto, capaz de gran encanto, pero también era despiadado y manipulador. No se podría esperar menos de un hombre con sus logros, entre los cuales estaba crear el hotel más grande y opulento en Londres.

-No me gusta hablar de Min por varias razones, - dijo Hyukjae, sus ojos brillaban con preocupación. - Entre ellas, está el hecho de que nunca he sido especialmente amable con él, y que yo no lo protegí cuando debería haberlo hecho. Y lo lamento.

-Todos tenemos algunos lamentos, - dijo Kyuhyun, tomando un sorbo de coñac, dejando que el fuego se arrastre por la garganta. - Es por eso que me aferro a mis malos hábitos .Uno no tiene por qué empezar lamentando algo menos, a menos que deje de hacerlo.

Hyukjae sonrió, pero enseguida se puso serio mientras miraba en la llama de una lámpara pequeña vela que se había establecido sobre la mesa. - Antes de decir nada, quiero preguntar ¿cuál es la naturaleza de su interés en mi hermano?

-Yo estoy pidiendo como su empleador, -dijo Kyuhyun. —Estoy preocupado por la influencia que puede tener en Ryeowook

-Nunca se cuestionó su influencia antes, —disparó Hyukjae, irguiendo su espalda. —Y de todas formas ha hecho un excelente trabajo con Ryeowook.

—Él tiene, Sin embargo, esta misteriosa conexión a ti que me ha preocupado. Por lo que sé, ustedes dos de ustedes están complotados.

—No —dijo Hyukjae mirándolo directamente a los ojos. —No hay complot.

— ¿Entonces por qué todos estos secretos?

—No puedo explicártelo sin antes decirte algo de mi propio pasado —hizo una pausa, y Hyukjae añadido oscuramente: —Y Odio hacerlo.

—Lo siento, —dijo Kyuhyun sin rastro de la sinceridad. —Adelante.

HYukjae vaciló de nuevo, como si eligiera cuidadosamente lo que iba a decirle.

—Min y yo tuvimos la misma madre. Su nombre era Taeyeon Wigens. Ella era británica de nacimiento. Su familia se mudó de Inglaterra a Buffalo, Nueva York, cuando todavía era un bebé. Y ya que Taeyeon era su única hija, que el Sr. Wigens había tenido bastante grande, era su deseo de verla casada con un hombre que se hiciera cargo de ella. Mi padre era de más del doble de su edad y bastante prósperos. Sospecho que el Sr. Wigens la obligó a casarse sin amor. Y así Taeyeon se casó con mi padre y yo nací poco después. Tal vez demasiado pronto, en realidad. Hubo especulaciones de que no era mi padre.

— ¿Lo era? —Kyuhyun no pudo dejar de preguntar.

Hyukjae sonrió cínicamente y dijo.

—Uno nunca sabe con certeza. —Él se encogió de hombros. —En cualquier caso, mi madre finalmente huyó a Inglaterra con uno de sus amantes. —Hyukjae tenía la mirada distante. —Hubieron otros hombres después de eso, creo. Mi madre no se limitaba a quedarse con uno. Ella era una perra podrida, autoindulgente, pero muy bonita. Sungmin se parece mucho a ella. —Hizo una pausa reflexiva. —Sólo que más suave. Más refinado. Y a diferencia de nuestra madre, Min tiene una naturaleza solidaria.