Dan vs Rizz
Ambos estaban listos sobre la arena de combate. Rizz no parecía ser el tipo de mujer intimidante y ruda. Tenía la mirada tranquila fijada en Dan. No lo miraba con enojo, ni rencor, simplemente lo veía preguntándose como vencerlo sin complicar las cosas.
— Lamento que las cosas hayan empezado así — dijo Rizz. Si me lo permites, tomemos esto solamente por lo que es. «Un simple entrenamiento».
— No tengo ningún problema — contestó Dan. Pero escuché a alguien decir que eres una especie de Diosa de las artes marciales. Una muy bella por cierto, eso tengo que admitirlo.
— ¡No esperaba menos de ti! — exclamó Rizz —. Pero si de verdad quieres impresionarme tendrás que hacerlo en la arena.
Rizz estaba lista, sonría ligeramente. Los labios apenas se le retorcian, intentaba de alguna manera no parecer demasiado confiada.
El silbato digital sonó y empezó lo que era así su primer entrenamiento.
Rizz permitió que Dan tomara la iniciativa.
— Las mujeres primero — dijo Dan.
— Bien. Te concedo los honores. Cuando quieras — respondió Rizz.
— ¡Qué luego no digan que no fui un caballero! — exclamó Dan mientras daba un par de pasos hacia Rizz.
Intentaba de alguna manera llegar a ella para someterla y así hacer que se rindiera. No tenía intenciones de pegarle ante la vista de todos los que observaban.
Pero Rizz era ágil, podía mover rápidamente las piernas hacía atrás y hacia adelante con un movimiento limpio y perfecto. Dan estiraba el brazo para intentar llegar a ella, pero ésta sólo se hacía para un lado para quedar lejos del alcance de Dan. Los movimientos de Rizz hacían ver torpe a Dan que no podía alcanzarla.
— ¡Velocidad! — dijo Rizz. Tendrás que hacer mucho más que eso.
Dan rió ligeramente tratando de no perder la concentración. Intento de todas formas llegar a ella pero ésta siempre estuvo un pasó más hacia adelante.
Hicieron contacto solo hasta que ella quizo. Ambos se toparon de frente sujetandose de ambas manos como un par de luchadores buscando como derribar a su oponente. Rizz rápidamente se safo de las manos de Dan poniendo velozmente sus manos sobre los de éste. Ahora ella lo apretaba fuertemente de las muñecas, dejando sus manos imposibilitadas.
— Tu problema es que subestimas muy rápido a tu rival — alcanzó a decir Rizz mientras le pegaba una fuerte patada a Dan sobre el estómago.
— Y el tuyo es pensar que la experiencia te otorga toda la ventaja — respondió Dan mientras le sujetaba la pierna y la hacía volar por los aires lanzándola fuera de la arena.
El movimiento fue rápido. Rizz volaba por los aires ante la vista de todos que estában sorprendidos por la maniobra de Dan. Rizz pensaba en el aquel movimiento, quizás tomó las cosas con demasiada prisa. Pero no se iba a dejar vencer tan fácil, apenas estaba empezando la pelea. Estaba todavía en el aire cuando da la vuelta ligeramente para caer sobre sus dos pies sin ningún problema.
Dan estaba que no lo creía. La maniobra era casi imposible. Pero por más asombroso que parezca Rizz estaba de pie. Rápidamente se abalanzó tras él deslizándose bajo sus piernas. Dan alcanzó a dar un salto para que ésta pasara justo de bajo de él. Rizz rápidamente se puso de pie con una extraordinaria combinación de giros sobre su propio eje. Se fue sobre Dan con una rápida combinación de golpes que Dan a duras penas podía esquivar. De tantos golpes, algunos pegaron en el pecho y otros en el rostro de éste. Hasta que porfin pudo detenerla sujetandola del brazo derecho. Dan ejercía presión sobre éste único brazo tratando de doblarselo para someterla. A pesar de las posibilidades Dan lo estaba logrando, el brazo de Rizz cada vez estaba más neutralizado por toda la fuerza que Dan ejercía sobre ella.
— ¡Eso fue todo para la hermosa chica! — comentó Dan al mismo tiempo que se le dibujaba una leve sonrisa en la cara.
— ¡No es nada para alguien de nivel 7.2!. — dijo Rizz mientras sometía y apretaba el brazo de Dan con todavía más fuerza de la que él ejercía. Los ojos de Dan quedaron asombrados por la escena. Apenas Rizz recuperó la postura, le pegó tremenda patada a una de sus rodillas para que éste callera incado. Dan pudo sentir la verdadera fuerza de Rizz, comprendió en ese mismo instante que sólo estaba jugando con él. Le hubiera ganado desde el primer minuto si ella así lo hubiese querido.
Rizz se dio la media vuelta alejándose mientras pronunciaba algunas palabras:
— Tienes potencial, con buenas indicaciones y un riguroso entrenamiento llegarás a ser de los mejores. Será un placer entrenar contigo. Eso sólo si puedes con la idea de que tendrás que hacer exactamente lo que te diga.
— ¡Lo siento pero hoy las chicas ganan! — continuó Rizz mientras desaparecía del lugar.
Dan todavía seguía ligeramente incado sobre una de sus rodillas. No estaba para nada agotado. Pudo haber continuado. Pero comprendió que era más lo que podía aprender de Rizz si la dejaba partir en ese momento. Sin importar la manera, había logrado que ésta lo considerara para entrenar juntos. El plan de Dan ahora era entrenar lo suficientemente duro para estar a la altura. Lo veía todo como el amargo comienzo de algo grande. Tenía un asunto pendiente con Rizz y no descansara hasta estar a su nivel.
ESTÁS LEYENDO
Andrógino - La profecía del origen #PGP2018
Science FictionCorre el año 2035, desde hace miles de años nuestro planeta esconde un oscuro pasado y ahora los humanos están desapareciendo sin dejar rastro. En un escenario donde el tema principal será sobrevivir, la capacidad para adaptarse será fundamental en...