Juliet llevo la parte trasera de la tapa de su lapicera hacia sus labios, mientras dibujaba un pequeño recorrido desde arriba y abajo. La joven, desvió su mirada hacia la derecha, observando como uno de los amigos de su hermano le guiñaba el ojo con cierto descaro, lo que provoco que está le enseñará su dedo de en medio, a medida de qué, en su rostro se plasmaba una sonrisa absolutamente sarcástica.
Una vez qué concreto aquello, la chica, observó en dirección a Noah, encontrándose con su mirada, la cual despedía en ese momento nada más ni nada menos qué aprobación. Ciertamente, que su hermana menor se defendiera de esa forma por su cuenta, lo libraba de tener que intimidar a cualquier chico que se acercara a ella, no obstante, si bien sabía qué la mayoría –por no decir todos– los chicos de la escuela estaban locos por su hermana, también, se hallaba al tanto que ninguno lo expresaría frente a él, la última vez que alguien lo hizo, había terminado muy mal.
—Psst —musitó una voz masculina extrañamente conocida para ella, era la de Kieran—.
Ambos jóvenes eran enemigos desde qué tenían uso de razón, aquel chico, era «despreciable» y todo su desagrado hacia él se debía a qué, una vez golpeó a Lee, durante uno de sus cumpleaños, obviamente, desde ese día, Kieran se ganó su devoto y absoluto odio.
—¿Sí? —cuestionó ella, con una expresión irónica dibujaba en su rostro—.
El joven le hizo una señal a su celular, provocando que esta rodará sus ojos pero, lo encendiera, observando rápidamente que tenía un mensaje de Kieran. Ni siquiera sabía el por qué tenía su número, sin embargo, centrándose nuevamente en aquel mensaje, no pudo evitar alzar sus cejas al descifrar lo qué este expresaba: «Si logró hacer qué Tuppen invite salir a Elle, deberás aceptar una cita conmigo».
—¿Qué diablos? —exclamó Juliet en voz alta, recibiendo la atención de toda la sala de detención, incluido el profesor qué parecía estar, hasta hacía unos momentos, plácidamente dormido—.
—¡Juliet Flynn! ¡El vocabulario! —la regaño este, provocando que ella asintiera con pesadez—.
Sin embargo, aún no podía creer aquel descaro por parte de Kieran, obviamente, aceptó, no creía capaz a Elle de aceptar qué Tuppen saliera con ella. Pero, como era de esperarse, se había equivocado.
De un momento a otro, Tuppen se adentró al salón de detención, este llevaba una falda, lo que provocó que toda la clase riera, incluida Elle, qué por su parte, pareció aceptar de alguna manera salir con él.
Entonces, Juliet, con gran furia, dirigió su mirada hacia Kieran, el cual enarcó ambas cejas, en signo de absoluta satisfacción. Si bien ella creía que nada peor qué tener detención el primer día le podía suceder, ahora, tenía que añadir el echo de salir con aquel joven que tanto detestaba: Kieran Damers.
[...]
—¿¡Ki-Kieran Damers?! ¿Ese Kieran Damers? ¿El mismo Kieran Damers que me golpeó en nuestro cumpleaños número doce? —cuestionó Lee frenético, dando vueltas por su habitación, mientras su hermana lo observaba un tanto cansada—.
—Sí, Lee, ya te lo he dicho como...No sé...¿Unas diez veces? —se quejó la joven, llevando ambas palmas de sus manos hacia su rostro—. ¿A caso crees que deseo salir con él? ¡Claro que no! ¡Todo fue una estúpida apuesta! Ni siquiera sabía que Elle aceptaría salir con Tuppen.
—Oh claro, vamos Ju, te conozco lo suficiente como para saber qué aquello no es un sacrificio para ti —admitió su hermano, incorporándose a su lado—.
—Como sea, seguramente, Noah lo espantará o algo así, es decir, conoces a nuestro hermano, nadie se mete con él y mucho menos con su sexy hermanita Juliet —fanfarroneo la chica, haciendo un ademán hacia sí misma—.
Acabada aquella oración, Juliet recibió un aventón por parte de Lee, el cual le había arrojado un almohadón sobre el rostro.
—¿Sexy? ¡Pero sí eres una niña! —la regaño su hermano señalándola con el dedo índice, amenazante—.
—¿Sabes que tenemos la misma edad, no es así? —interrogó ella, riendo—.
—Sí, pero sigues siendo una niña, una cosa no cambia la otra —se excusó Lee, encogiéndose de hombros—.
La joven se mordió sus labios, mientras alzaba ambas cejas y movía su cabeza hacia los lados en signo de que aquello que su hermano había dicho, sonó como una absoluta idiotez.
—Sea o no sea una niña, tendré que aceptar el echo de que saldré con Kieran...El chico que más odio en el mundo entero —suspiró la joven, con pesadez, recostándose en la cama de Lee—.
Su hermano, imito su acción, sin poder evitar soltar una pequeña risa.
—Llámame si esa "cita" se pone muy...Fea —le sugirió el chico, tornándose un tanto más serio—.
—Gracias Lee, pero...Puedo manejar a ese idiota yo sola —le aclaró la joven, señalando su puño derecho—. Nunca me ha fallado.
Ambos hermanos estallaron en carcajadas, mientras se ponían a hablar de cualquier tema que se les cruzaba por la mente, sin embargo, durante aquella noche, Juliet no había dejado de pensar por un solo segundo el echo de qué, tarde o temprano, tendría que enfrentar aquella desastrosa cita.
*
¡Hola! Bueno el próximo capítulo, quiero hacerlo dedicado, así qué, si quieren, comenten aquí quién desea una dedicación y con gusto lo haré en el próximo capítulo. ¡Nos vemos!
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⇶ Kiss me, fast [The kissing booth 1]
Hayran KurguJuliet Flynn y Derek Evans, son mejores amigos desde que tienen uso de razón. Sin embargo, su amistad se verá afectada cuando ambos comiencen a sentirse atraídos el uno con el otro. ¿A caso el amor será capaz de separarlos? Aclaración: fanfic basa...