Realmente no sé si en verdad lo quiso alguna vez, pero su rostro oculto me dejó una herida que solo el tiempo supo cerrar.
Y es que podría compararle con la Luna; de la cual veo a distancia y diariamente una parte, una cara, y no la otra. La Luna es el más grande ejemplo de que en este mundo todos, incluyéndome, escondemos algo en algún momento, o siempre.
No sé si todo fue una trampa, o una simple distracción, como el carrusel, del que los niños se suben y se divierten únicamente cuando van dando vueltas y vueltas en él hasta que llega otra mejor distracción y lo dejan.
La Luna es testigo de muchas de mis visitas a ella, visitas a ciegas, o tal vez, yo no observaba bien, por estar en la parte oscura de ella, la que nadie conoce...
La distancia es un problema psicológico de los amores débiles.
Porque siempre se encuentra una o muchas formas de subsistir en el medio y para mí el más grande problema no es la distancia, sino la inseguridad.
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Gritos de la Mente
RastgeleCierra los ojos e imagina que estas cosas las has gritado en silencio.