La fiesta para la pareja Líder se había alargado más de la cuenta, pero logro su objetivo, por lo que a Yoongi no le molestaba el pequeño malestar en todos sus músculos, resentidos por una mala noche, su felicidad era capaz de opacar cualquier consecuencia de su arrebatada escapada –Yoongi ¿Ahora dormiremos juntos, me dirás cosas bonitas, me darás mimos y cederás a mis ideas?- Le pregunto un muy ilusionado Omega, poniéndolo en una situación difícil, porque por mucho tiempo él fue el único que decía no a los planes locos de Jin.
-Tendré que ser la voz de la razón en algunas ocasiones- Fue firme ante la mirada inconforme del Lobo –Pero a lo demás si- Se acercó para envolver a su pareja, volviendo a juntar sus labios como antes, en un beso húmedo y placentero. Era delicioso sentir la suavidad de los carnosos belfos, la sutil caricia de sus narices.
De forma natural ambos buscaron algo más, entreabriendo sus bocas, dejando rozar sus lenguas, en un juego de lamidas y enredos, probando todo lo que se les ocurriera, convirtiendo el inocente beso en el preámbulo de una situación más caliente. Las consecuencias de tantos placenteros roces no se hicieron esperar, Jin podía sentir que su cuerpo por lo menos había ganado dos grados más en su temperatura, notando lo demandante que se estaba volviendo el Alfa, acariciando con firmeza su cabeza, clavando los dedos de la otra mano sobre su cadera. El Omega no pudo evitar soltar un par de exhalaciones de placer, teniendo que interrumpir por unos segundos el contacto de sus bocas. Retomándolo demandante en cuanto se recomponía.
Su primera experiencia en ese tipo de situaciones con su pareja lo tenía embriagado. Con una de sus manos acariciaba sobre la ropa, la fuerte espalda del Felino, deslizándose hacia adelante para buscar donde se cerraba la bata que utilizaba para cubrir su desnudez. Cuando logró colarse en ella, pudo sentir la suave tela de una camisa, junto al elevado calor en el interior de las ropas. Las telas no eran del todo finas, pero tan suaves que podía notar perfectamente la forma de aquel cuerpo, delgado pero firme y bien torneado. Como varias veces le había sucedido antes, se dio cuenta de que a comparación de Yoongi, él tenía menos musculatura, cosa rara viendo que era un can, un ser más grande y corpulento.
El impulso de buscar más contacto llevo al Felino a levantar la camisa de Jin, desechando la idea de ir despacio con su relación. Acarició el contorno de las caderas y la espalda, subiendo hasta que llego a levantarla por completo, por lo que dé un impulso se la saco. Esto hizo que el Omega exhalara con fuerza, rompiendo el beso. El Alfa quería continuar, pero la falta de aire de su pareja se lo impedía, por lo que decidió besar junto a la esponjosa boca, delineando lo anguloso de su rostro hasta llegar al cuello, donde le apeteció dar una mordida y luego comenzar a desparramar besos por doquier.
Las exhalaciones se convirtieron en gemidos apagados, ambos sumergidos en lo que hacían, en sus sensaciones y emociones. Yoongi mordía a su paso, presionando a un ritmo, en el cual a veces disminuía, para luego dar una seguidilla de ataques, haciendo estremecer el cuerpo del pelinegro. Jin temblaba, cada vez que los dientes o la lengua de su Alfa chocaba contra algún tendón, los escalofríos y corrientes eléctricas eran imparables. No sabía hasta donde podría llegar esa situación y sinceramente no le importaba a ninguno. A pesar de que el Guepardo estaba en un punto sin retorno, si el Omega se arrepentía o quería detenerse, aguantaría sin quejarse, porque en ese momento solo estaba disfrutando de lo que se le ofreciera.
El Felino dejo su labor de besar laboriosamente el abdomen ajeno, para observar la hermosa expresión de su Omega, con las mejillas prendidas, los labios húmedos entreabiertos, que lo tentaron de volver a probarlos. Volvió a retomar un beso frenético sin detener las caricias, aunque esta vez fue el pelinegro el que busco más contacto por debajo de la bata de su pareja. Fue el turno del Alfa de gruñir ronco al sentir el calor de las caricias sobre su propio pecho.
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¿Quién es más caprichoso? /SuJin (Omegaverse)
Hayran KurguSeokjin el hijo único del Líder Alfa de la Manada interespecie Min, aun siendo un Omega, cuenta con el apoyo de toda su gente, quienes creen que es el indicado para guiarlos. No obstante, la tradición de sus ancestros eligió con quien debía empareja...