El dios del final - Suplicio -

Capitulo 21

- El amo Dios del Final...

- Despójate de todo miedo. Cuéntame.- Exigió el Dios con una seductora suavidad.

- Siempre fue... buen amo... Temo ya no lo es  mas.

Era inesperado; la presencia del dios de la Sabiduría. "¿Qué significado entregar a ese hecho?" Aquellas palabras pasaron momentáneamente por el saber de dios del Final. Los sentidos de Suplicio se crispaban en cada parte de su ser, mientras ataba su atemorizarte mascara nuevamente. Se acercó cauteloso a lo que parecía un Dios envuelto en oscuridad.

-Suplicio, Dios del Final, ¿qué derecho se posa en tu guadaña para barnizar mas de lo que se supone sea sangre de una sola especie?

La incertidumbre se invitaba sola en el saber de Suplicio. ¿Era ofensa lo que el Dios de la Sabiduría alojaba en el corazón o era indignación? ¿cómo empatizar con algo que ya no podía tomar lugar en el Dios del Final? Solo las palabras callarían lo incierto.

- Usualmente está en nuestra educación saludar en casa ajena. - Suplicio se mostró como siempre debió mostrarse ante todo ser cuya vista lo tuviera de objetivo: Imponente. Para el dios de la Sabiduría fue verdad suficiente. Hubo un cambio.

- Has tomado sangre elfica en en tus uñas y guadaña. 

- Tus palabras se observan aseguradas con hechos, permanecen como siempre. Deseas mi respuesta cuando has allanado mis aposentos y pisado mis jardines sin consentimiento o saber míos. ¿Has compartido o permutado opiniones con el Dios de la Generosidad? 

- Una respuesta por la otra. - Clamó el Dios.

-No, no he tocado sangre elfica con objetivo del pecado de asesinato.

"Mentira" palabra que se alojó en el interior de Ciriaco. "Si un su saber está el allanamiento de sus jardines su deber era conservar decencia con la veracidad de tal hecho. Tal descaro... No existe perdón."

- Mi respuesta no contempla semejante relación del Dios de la Generosidad con los hechos albergados en tus aposentos o en mi saber. Esta en mi la duda de tu pensar relacionando tales circunstancias.

La guadaña del Dios del Final comenzaba a centellar anunciando un nuevo objetivo humano quien será 'atendido' por el Dios.

- Siendo así, consciente tu saber y corazón con el hecho de que mi guadaña solo ha sido barnizada por humanos. - Dijo Suplicio antes de perderse en el éter frente a la vista de Ciriaco.

El corazón del Dios de la Sabiduría se retorcía y era estrujado por su mente. Los tenebrosos pensamientos, impacientes y feroces, colocaban agujas en los sentimientos del Dios. ¿Qué era este sentir tan impropio de él? ¿Qué era eso que se escuchaba a lo lejos?

- Usted confunde mi saber. Le pido clame claramente lo que sus palabras intentan decir. - Marleh, temblorosa de manos, sospechaba un aura turbia en todo aquello. No se sentía realmente en peligro pero tampoco se sentía a salvo.

- Simple, nadie ha de emplear a un vagabundo como este viejo hombre. Las cosas se están agitando y la vida del sol y la luna esta opacandose. Ya no quedará misericordia para humanos o dioses.

El corazón de Marleh se estrujó. ¿En que clase de circunstancias alguien común podría tener semejante saber? ¿Cuál es la identidad de ese individuo? ¿Cuál es la razón de su presencia en el templo de... Suplicio?

-Señorita, he de pedir su consentimiento para una pregunta... factible.

Marleh solo asintió con la cabeza. 

- De todos los Dioses que fueron otorgados a este mundo... ¿Cuál piensas que traerá caos y dolor?

Sus propias palabras tenían miedo de salir.

-Señorita, que las serpientes no le coman la lengua.

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Hola, se que había descuidado esta historia. Lo siento. He estado pensando en reescribirla desde el inicio y tal vez lo haga pero eso sera a mitades de mayo. Ya que tengo que entregar avances de mi tesis y otros proyectos finales.

Zoila: Deja de dar excusas y ponte a escribir!!! Hace mucho que no aparezco en la historia!! Soy la que más olvidada tienes!!

Sixto: ¿Qué?!! Crees que tu estas cansada??? Yo tengo desmayado quien sabe cuando tiempo!!!

Melitón: No se quejen de eso! Mejor Quéjense de que a este ritmo solo seremos recordados por este papel!! Mi carrera de actor ya se  fue a la basura!!

Suplicio: Melitón, ni siquiera somos actores, tampoco existimos. La autora no creó.

Melitón: ¡Otra vez tu con tus dudas existenciales!

Zoila: ... Tal vez mi hermano tiene razón.

Autora: CHICOS ya despidanse, podrán seguir con esto en el siguiente capitulo

*Todos los personajes se van*

Autora: No se despidieron... ¿Los eduque mal? T.T