Capítulo 19.

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Tao miró a su alrededor viendo una habitación amoblada, cuyos muebles parecían tener sus años ya, en el cuarto, también había una ventana con las cortinas abiertas, había un librero y unas paredes de un azul marino, casi negro.

—¿Dónde estamos?— preguntó Tao, sintiendo en sus manos la textura suave del suelo, percatandose que estaba sobre una alfombra de color granate.

Kris se puso de pie delante de él y se sacudió un poco la ropa.

—En mi casa— dijo y caminó hacia un closet de color café, abrió una de de las puertas del closet y sacó una polera; en el mismo lugar se  sacó la que traía puesta y estaba rasgada para cambiarla por la que había sacado recién, en ese momento Tao se mantuvo callado observando a Kris, percatandose de la anatomía que poseía el demonio.— Quédate aquí, vuelvo enseguida— le dijo Kris, sacándolo del hechizo de su cuerpo, Tao asintió aún sentado en la alfombra lo cual le pareció tierno a Kris

"Tag!. Kris concentrate"

Se regaño a si mismo.

Salió de la habitación y fue por el botiquín de primeros auxilios; Tao tenía un corte en su ceja izquierda, que fue causado por el choque que tuvo cuando estuvo en el trance, no era nada grave y tal vez sanaria sola pero Kris quería ayudarlo, volvió al cuarto  y encontró a Tao aún sentado en el suelo, mirando con extrañeza la habitación.

—Ven, siéntate en la cama— dijo Kris, un tanto tosco, haciendo que su petición sonara más como una orden.

Tao se levantó del suelo y se sentó a los pies de la cama sin apartar la vista de Kris, quién se sentó a su lado con el botiquín, Kris sacó un poco de algodón y le puso un poco de alcohol para luego acercarlo un poco a Tao, pero este se alejó.

—¿Que haces?— preguntó, sospechando de las intenciones de Kris.

—Solo trató de ayudarte con tu herida— dijo con simpleza Kris y volvió a acercar el algodón, sin que está vez Tao se alejara. Tal vez aún estaba en estado de shock por eso su pregunta con una respuesta un tanto obvia.

Cuando el algodón tocó la herida Tao cerró el ojo, como acto reflejo a su dolor, Kris tuvo que llevar su otra mano al área para poder estirar un poco la piel; mientras Kris curaba la herida de Tao, ninguno emitió palabra alguna, por un lado, Tao prefirió mantener sus ojos cerrados en todo el trascurso de curación y Kris solo se concentró en terminar luego con la herida; después de desinfectarla le puso encima un parche, para evitar que se infectara.

—Ya está— dijo Kris al terminar con su labor. Tao abrió los ojos, y movió un poco las cejas, sintiendo la rigidez que provocaba el parche en su ceja herida, mientras Tao comprobaba hasta donde le era posible utilizar su ceja, Kris se quedó prendado de sus oscuros ojos.

—¿Te duele?— preguntó Tao, sacando a Kris de su burbuja.

—¿Qué cosa?— preguntó.

—Tu herida, en el pecho— específico Tao, mirando la polera de Kris con una leve mancha más oscura en el área de la herida.

Kris se llevó una mano a la zona por sobre la polera y la tocó levemente, no le dolía tanto, pero si era molesto.

—No te preocupes. Puedo solucionarlo después— dijo y comenzó a guardar las cosas en el botiquín, pero Tao le detuvo.

—Te ayudaré.— dijo, apartando las manos de Kris del botiquín, sacó los mismos utensilios que Kris había utilizado en el:  algodón y un poco de alcohol.— ¿Puedes subirte la polera?— preguntó, al tener en mano el algodón con el alcohol. Kris hizo caso sin protesta alguna y mantuvo la polera sujeta a la altura de su cuello.

Para curar la herida de Kris, Tao tuvo que acortar un poco la distancia entre ambos y asi poder curarle de forma diligente aquella herida causada por si mismo, que a pesar de no ser profunda era bastante grotesca, le sorprendía el daño que aún en su forma humana podía llegar a causar, Kris era un demonio, un maldito demonio y aún así había dejado aquella herida en su ser, pero por otro lado, tal vez por esa razón la herida no había sido tan grave, de cierta forma agradecía que fuese un demonio, su cuerpo resultaba ser mucho más resistente a los ataques de diversas criaturas; no quería imaginarse que le hubiera ocurrido a un ser humano.

Al terminar puso una gasa en el área con la cinta médica, para que no se moviera del lugar afectado.

— Ya está, y lo siento— se disculpó Tao mientras guardaba las cosas que  utilizó en el botiquín.

—No tiene importancia— dijo Kris, mientras bajaba su polera con cuidado para no sacar por accidente el parche que le puso Tao.—Lo que si tiene importancia y es relevante para mi es lo que viste— Kris miró el perfil de  Tao mientras cerraba la pequeña caja del botiquín.

—Yo...ag!— Tao cerró los ojos y se llevó una mano al tabique, apretandolo levemente — Realmente no quiero hablar de ello, es demasiado para mí— dijo mientras sus dedos masajeaban su taquibe  como una forma en que las imágenes que comenzaban a repetirse en su cabeza desaparecieran.

—No hables. Déjame verlo por mi mismo— le dijo Kris. Tao abrió lo ojos, sacó la mano de su tabique y miró a Kris.

—¿Como?— preguntó un tanto intrigado por lo que escuchaba.

—Con un enlace— contestó Kris.

—No estoy seguro— dijo Tao, sintiéndo la inseguridad correr por su cuerpo, en cualquier otra ocasión su respuesta hubiera sido un si o un no, pero está vez, se encontraba en el limbo. Kris había demostrado real interés en su situación y hasta le había dado un consejo de que hacer aún cuándo el precio fuera que el no podria entrar a la casa de los Kim, pero la reciente presentación de aquellas imágenes le habían dejado de cierta forma vulnerable y dudaba.

—Tao, necesito saber que fue lo que viste para poder ayudarte— le explicó, Tao miró unos segundos a Kris antes de asintir, Kris ya lo había ayudado antes, una parte de el le decía que realmente quería ayudar y no aprovecharse de la situación, pero la otra no quería mostrarle ni un carajo, pero en las imagenes estaban involucrados sus padres, la fibra sensible de su ser.

Kris se acercó un poco más a Tao, invadiendo su espacio personal, llevó sus manos al rostro de Tao y junto sus frentes.

—Tan solo tienes que relajate y dejar que yo haga el resto— le pidió y cerró sus ojos, Tao trató de hacer caso y cerró los ojos al ver que Kris también los tenía cerrados. Las manos de Kris se acomodaron sobre sus mejillas haciendo que el tacto helado le erizara la piel; era la segunda vez que lo tenía tan cerca, pero eran distintas circunstancias.

Kris se deslizó dentro de la cabeza de Tao, viendo sus recuerdos más recientes, la conversa que tuvieron segundos antes, las curaciones de ambos, pero eso no era lo que buscaba por lo cual se introdujo más en sus recuerdos, hasta llegar a los que quería ver... pudo sentir lo frío y lo sobrenatural en el atmósfera mental de Tao, al igual que reconoció al responsable de toda la situación que estaba viviendo Kim, también se percató que el ente había gastado bastante energía al insitar la mente de Tao, por lo cual debía estar exhausto en algún lugar, intrusio más en los recuerdos, llegando a las imágenes en sí, todas tenían que ver con su familia, y aunque para Kris las imágenes no eran nada fuera de lo "común" para él, no podía asegurar lo mismo para Tao y que le hayan causado tal impacto corroboraba que aquello había sido suficiente para causar estragos en el vampiro.

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