Parte sin título 2

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Después de la aburrida reunión con el patriarca y el resto de los caballeros dorados, Camus por fin recibió autorización para su empresa, iria a Sibera para ser mentor de uno o dos aprendices que tendrían que competir para ganar la armadura de brince del Cisne. Estaba contento, el ser mentor de otros caballeros incrementaba su estatus.

Esas lejanas tierras siberianas no le eran para nada etrañas, el mismo había entrenado ahí para conseguir el manto de la vasija preciosa, asi que estaría como pez en el agua. asi que tras una rápida pero emotiva despedida con su ejor amigo se embaco hacia las heladas tierras de los hielos eternos.

Tras un largo y viaje su tarea seria ubicar donde seria conveniente entrenar a sus discípulos, Pronto encontró una pequeña población donde se surtio de provisiones, compro un buen trineo con perros, una enerme casa de campaña y también pidió al dependiente un Mapa actualizado de la región.

-Vendedor- Bienvenido, señor, no es muy común que tengamos turistas

-Camus- En realidad no soy turista, digamos que he vuelto después de un largo tiempo y solo deseo actualizarme

El Vendedor Miraba curioso la ruta que trazaba camus en su nuevo mapa.

-Vendedor- ¿en verdad piensa acampar en la región de los hielos eternos? ¿vaya que es valiente o es muy tonto!

Camus giro el rostro mirando fija y penetrantemente al entrometido dependiente del comercio.

-Vendedor- No lo digo porque no parezca usted un explorador experimentado, señor, es por lo que dicen... ya sabe las supersticiones de los locales

-Camus- me gusta el folklor local.

Dijo recargándose en el mostrador invitando al encargado de las ventas a contarle lo que sabia de esas leyendas.

-Vendedor- Cuenta la gente que por la región de los hielos eternos han visto espiritus de la nieve

Camus sonrio divertido, pues durante los muchos años que el mismo entrenò en la región de los hielos eternos jamas había escuchado semejante ridiculez, de verdad que el aislamiento de las personas los hacia inventar cosas muy tontas.

-Camus-¿ Espiritus de nieve?

-Vendedor- Si extrañas criaturas tan blancas como la nieve que presagian tormentas de nieve, derrumbes y toda clase de calamidades, otros dicen que son una especie de entes demoniacos que devoran a los hombres y principalmente a los niños pequeños.

-Camus- ¿Si me llego a encontrar uno que? ¿debo dispararle una bala de plata?, o acaso una estaca en el corazón servirá...

-Vendedor- Tal vez le parezca una tontería, pero yo no menospreciaría las leyendas de los lugareños.

Camus pagò sus compras y se fue hacia un pequeño hotel donde descansaría antes de lanzarse en la búsqueda del perfecto lugar para entrenar a sus alumnos. después de Asearse y dejar sus cosas decidio ir a alimentar sus nuevos 6 perros de trineo: Altair, Vega,Maia, Orion,Sirio y en honor a su mejor amigo, Antares, así que acudió a las perreras dispuestas para los animales de los huéspedes. mientras alimentaa a sus hermosos Huskies un par de niños jugaban cerca de deonde èl se encontraba, Una niña de unos 6 años lloraba desconsoladamente llamando a su hermano mayor para que la defendiera de otro quien aparentaba unos dos años mayoral ella, quien no paraba de asustarla.

-¿Alexei! Alexei!, ¡dile a Ivan que me deje en paz!

suplicaba la pequeña a su hermano mayor de unos 14 años de edad

-Soy un espíritu de nieve! y vengo por ti!

Decia el niño que la perseguia con cun enorme abrigo de piel blanca y una cabeza de lobo siberiano blanco completando el disfraz, elrostro de la niña dibujaba autentico terror ante el cruel juego del otro infante, hasta que el mayor, Alexei apareció para proteger a su hermanita.

La luz de tus ojosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora