Capas de mentiras

Capitulo 3: Ponche

Pronto todos los invitados se sentaron en la mesa, las mujeres hermosas con sus lujosos vestidos y zapatos de tacón, los hombres con traje y corbata su cabello algo despeinado y el aroma a perfume inundaba el gran salón todos los conocidos sentados a la mesa, sonriendo y conversando

-Muy bien ¿Quién quiere hacer el brindis? – Dijo Mikoto ante todos esperando que alguno de los que estaba en el lugar se ofreciera, pero nadie lo hacía - ¿Qué tal usted Minato?

-Yo, este, no soy muy bueno con eso – se excusó Minato

-Vamos no seas cobarde, estamos entre amigos – se quejó Mikoto

-Muy bien – dijo Minato tomando la copa de vino y levantándose de su asiento – Primero que todo debo agradecer el poder contar con aliados tan fuertes como ustedes, brindo porque de ahora en adelante nuestros lazos se vuelvan más fuertes que nunca, por la prosperidad de cada una de nuestras familias, y aun mas agradecer el apoyo de todos en cada momento difícil. Salud – dijo con una gran sonrisa.

-Salud – respondieron los invitados al unísono chocando levemente sus copas

El tintineo de las copas hacía eco en la habitación, la cena había estado llena de halagos hacia los chefs y el postre había sido la gran debilidad de Deidara, a él le fascinaba todo lo que tuviera chocolate y el pastel selva negra había sido el plato estrella de la noche, Naruto sonreía y hablaba animadamente con Gaara; en aquella reunión habían personas tan importantes que era todo un festejo de millonarios, Minato que era el dueño de una gran cadena hotelera, Fugaku que era el jefe de la policía, Rasa que era un empresario mundialmente conocido, Tsunade que era modelo, Jiraiya que era el director del instituto de la ciudad, y más.

Las horas pasaron lentamente y poco a poco Naruto empezó a aburrirse, quería irse y aunque quizás no faltara mucho para que todo se acabara, ya eran las 11pm y Naruto empezaba a tener sueño, de repente sintió un leve rose en su pantalón, volteo inmediatamente para encontrarse con Konohamaru con su teléfono en las manos.

-Konohamaru dame mi teléfono – le exigió

-Claro, ¡Si puedes quitármelo! – grito antes de salir corriendo

Konohamaru empezó a correr por todo el salón y Naruto detrás de él, tratando de esquivar a las personas para no empujarlas, corría como un desesperado, no quería que su teléfono acabase destrozado como ya le había pasado una vez que le confió el teléfono y termino haciendo añicos la pantalla, no quería que le volviera a pasar, estaba a punto de alcanzarlo cuando se dio cuenta que iba a arrojar su teléfono al ponche, estaba tan desesperado que no le prestó atención a una persona cerca de él, a la que empujo hacia el suelo sin importarle, Itachi sintió el empuje de Naruto sin embargo no pudo mantener el equilibrio dejándose caer empujando al mismo tiempo a Deidara al cual se le cayó el teléfono de las manos y una chica lo piso con sus tacones de aguja; Naruto se lanzó sobre Konohamaru el cual soltó inmediatamente el teléfono, sin embargo logro atraparlo pero tuvo que apoyar su mano en la mesa y termino por lanzarse todo el ponche encima, ante aquello las personas lo voltearon a mirar, algunos se reían mas sin embargo Minato solo llevo su mano a su cara y negó con la cabeza "menudo hijo el que tenía".

-Lo salve – dijo aliviado

-¡Naruto! – se escuchó el grito y este volteo a mirar a un Deidara con cara de pocos amigos que iba hacia él, Naruto no lo entendía hasta que miro su teléfono hecho pedazos

-Es tu culpa – dijo mostrándole el teléfono

-Perdón Dei – dijo con carita triste

-Nada de perdón, ahora me debes un teléfono, y además estaba esperando una llamada muy importante Naruto – le regaño Deidara

-Lo lamento, no me fije – se disculpó Naruto

-Como sea, en el hotel arreglamos – dijo dándole la espalda a su hermano

Kushina y Mikoto se le acercaron a Naruto

-Hay que ver contigo Naruto – le dijo Kushina

-Sasuke cariño ¿podrías prestarle algo a Naruto para que se cambie?

-Está bien, sígueme Naruto – dijo mientas empezó a caminar y Naruto tras de él, subieron las escaleras hasta llegar a una de las habitaciones del segundo piso, la cual Sasuke abrió y dejo pasar a Naruto

Wow – fue lo primero que dejo escapar Naruto

-¿Qué?

-Tu habitación es como la de un chico normal, pensé que estaría llena de lujos pero no.

Y aquello era cierto, a Sasuke no le gustaban las cosas ostentosas, prefería algo común, algunos posters en las paredes, un estante lleno de libros, una mesa de escribir, con su cama del lado de la ventana y una pequeña mesa de noche que le acompañaba, Sasuke solo ignoro aquella tontería que acababa de decir Naruto y procedió a abrir el armario.

-Tu cama es muy suave – aquello hizo que una extraña sensación recorriera a Sasuke

-Aléjate de mi cama

-Ok, entonces ¿puedo ducharme?

-Allí – le señalo Sasuke la puerta que conducía al baño

Naruto camino hacia ella y prosiguió a bañarse, después de mirar a Sasuke unos segundos; Sasuke buscaba entre sus cosas, y es que no sabía que le quedaría a ese tonto, bueno solo a él se le ocurría lanzarse así sobre la mesa, y dejar que le cayera el ponche encima, finalmente había encontrado algo que creía le quedaría a Naruto lo saco y lo puso en la cama.

-Te dejo la ropa en la cama, póntela tonto – dijo saliendo de la habitación

Paso un rato luego de que Sasuke había salido de la habitación, mas Naruto no había salido aun, y empezó a preocuparse levemente "¿Qué estará haciendo ese tonto en mi habitación?" debido a aquel pensamiento no pudo evitar dirigirse hacia la habitación, subió las escaleras bajo la atenta mirada de su padre y abrió la puerta para encontrarse con un dormido Naruto en su cama, no lo podía creer se había dormido en su cama, respiro hondo hasta que se acercó hasta al dormilón que yacía en su cama, ahora podía tener una pequeña venganza, levanto su mano derecha estaba listo para despertarlo de un buen puñetazo cuando sintió que el cuerpo de Naruto se volteó haciéndolo caer a la cama y terminar debajo de sus brazos, Naruto le estaba abrazando mientras dormía, Sasuke trato de zafarse de su agarre, mas sin embargo estos eran más fuertes que los de Karin, no podía soltarse.

-Naruto, idiota, suéltame de una vez – dijo con tono amenazante pero este pareció ni siquiera haberle escuchado, aún seguía plácidamente dormido – Naruto – intento llamarle varias veces más este no respondía, en ese instante ya no le había quedado más opción tenía que despertarlo como fuera, acerco su boca al brazo de Naruto y aunque por un momento se paralizo al sentir el aroma de Naruto, termino por morderlo haciendo que este se despertara de golpe y se quejara.

-Eso te ganas por dormirte en mi cama

-Lo siento es que es muy suave, y no pude evitarlo, pero ¿tenías que morderme?

-Pues solo eso podía hacer – dijo algo sonrojado – ahora vete de mi habitación

-Está bien – dijo Naruto serio – pero quiero que sepas, que Sakura será solo mía, me niego a que este con alguien como tu

-No me importa lo que hagas con ella, si está lejos de mi mejor, después de todo es una tonta – dijo Sasuke acentuando la palabra final

-¿Cómo te atreves a llamar a una chica tan guapa tonta? – le reclamo Naruto

-La he rechazado miles de veces y aún sigue detrás de mí, es una tonta, ni siquiera es mi tipo, ahora vete – dijo con el semblante serio

-Está bien – dijo esta vez con una sonrisa - ¿entonces te gusta alguien?

-Eso no te importa así que lárgate de una vez

-Aburrido – dijo saliendo de la habitación