Don de líder

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-¿y? ¿qué les dijo? -les preguntó Nathan

-que era comprensible -respondió Finn

-y que no tenemos que pagarlo
-siguió Lo

-pero que trataramos de nunca sobrepasar un presupuesto para ser buenos administradores
-terminó Emma

-sonrió -me alegra oírlo, se ve que le agradan

Todos sonrieron.

-oigan todo el equipo que necesitamos está listo si quieren puedo ayudarles con la decoración

-por supuesto -dijo Lo

-sería un placer -sonrió Emma

-sonrió -¿qué hacemos entonces?

Lo comenzó a darles instrucciones a Reed, Lance, Nathan, Finn y Emma mientras que Tyler y Johnny fueron a hablar con Richard para que aprobara los anuncios y les diera toda la información sobre el concurso.

-¿qué le parecen? -le preguntó Johnny

-se ven muy bien, tienen mi aprobación

-sí -festejaron

-los felicito chicos

-gracias -dijeron ambos

***

-voy a imprimirles la información que necesitan

-gracias

Imprimió todos los papeles.

-estos son los papeles de las fechas de inscripción, los requisitos y todo lo que necesitan

Ambos y recibieron los papeles y le agradecieron. Los tres fueron a la habitación contigua.

-todos están haciendo un trabajo admirable, pero se hace tarde, vayan a descansar que mañana deben ir a trabajar

Todos asintieron.

-pueden dejar todo en esta habitación

-¿seguro que no hay problema?
-le preguntó Lo

-no, no, descuida. Por ahora esta es como su propia oficina -sonrió

-gracias

Todos agradecieron, se despidieron y salieron de la habitación a excepción de Nathan.

-gracias por dejarlos ayudar papá
-de nada, sé que son tus amigos, además son agradables y trabajan muy bien

-sonrió -lo sé, me alegra que los conocieras

-a mi también

-oye los acompañare a la cabaña, regreso pronto

-de acuerdo

Nathan se despidió de su padre y acompañó a los chicos a la cabaña de empleados.

Narra Emma

-oye no te pregunté como te fue con los preparativos -recordé

-bien, terminé de llamar a todos y dijeron que nos veríamos el 19 de agosto

-un día antes ¿cierto?

-asintió -sí, dijeron que pueden venir un día antes para arreglar todo además así se ha hecho otros años

Sabía que tal vez mi siguiente pregunta lo dejaría pensando, tal vez en su respuesta o tal vez incluso en preguntas que se hacía el mismo.

-y no preguntaron por qué eras tú quien los llamaba y no tu padre -le pregunte sutilmente y a la vez expectante ante su respuesta

-sí, de hecho a todos los que llamé papá los llama para cada concurso así que todos preguntaron

-¿y no fue tan malo?

Quería saber como se sentía respecto a aquello y quería ayudarle, al menos que supiera que lo escuchaba y que contaba con mi apoyo.

-creo que no, la verdad... no lo sé, no sé si tiene sentido

-sí lo tiene

-¿sabes? Ultimamente he pensado mucho si quiero ser el dueño de toda una cadena hotelera

Solamente lo miré sin saber que decir, pero al verlo a los ojos me di cuenta que él no necesitaba que dijera nada el solo hecho de que lo escuchara y estuviera ahí a su lado era suficiente. La forma en que con su mirada decía más que mis palabras era increíble.

-me refiero a que con ustedes me agrada realizar todo eso, pero temo que cuando ustedes se vayan no quiera saber nada de los hoteles

-sin importar dónde estemos siempre estaremos contigo -me coloqué frente a él y tome su mano acariciandola dulcemente

Nathan sonrió y se acercó a mí acabando con el espacio entre ambos y me dio un beso dulce para despedirse.

-te veré mañana -dijo

-nos vemos -subí las escaleras de la cabaña y me gire hacia Nathan
-buenas noches

-descansa

Nathan se despidió y regresó al hotel junto a Reed.

Fin de la Narración

Reed y Nathan llegaron al hotel,  subieron al ascensor y entraron a la habitación de Nathan.

-supongo que tendremos que mover de nuevo el sofá ¿cierto?
-habló Reed

-sí -rió al recordar lo caótico que fue la noche anterior -vamos -se colocó de un lado del sofá para que Reed fuera al otro

-¿listo?

-asintió -levantalo ¿de acuerdo?

-sí, a la de tres

-uno

-dos

-tres

Ambos levantaron el sofá. Reed iba de espaldas y debido a esto tropezó con la alfombra y cayó  sentado en el suelo.

-¿estás bien? -le preguntó Nathan asomando su cabeza por el lado del sofá para ver a Reed

-sí -dijo sujetándose en el apoya brazos del sofá para levantarse
-querías vengarte ¿cierto? -se arrodilló recostado en el apoya brazos

-rió -no, no, lo lamento

-descuida bromeo -rió y se puso de pie

Ambos terminaron de mover el sofá y colocaron los sleeping bags.

-oye no te dí las gracias por el trabajo

-no fue nada, harías lo mismo por mi

-no lo dudes, pero no he tenido la oportunidad de hacerlo

-claro que sí, me ayudaste con Emma

-bueno eso es cierto

-lo ves, eso es algo además de que es importante para mi

-bueno, pero si alguna vez puedo hacer algo por ti solo dime

-lo haré sin dudar

Ambos sonrieron.

-buenas noches

-descansa -terminó Nathan

La Surfista Y El Hotel De Los EngañosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora