Entre dudas y sospechas

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Los chicos seguían con los preparativos para el concurso de surf femenino y después de tanto trabajo todo comenzaba a tomar forma.

-¿cómo se ve? -le preguntó Lo a Tyler mientras estaba sentada en el suelo de la habitación terminando una de las decoraciones

-se arrodilló junto a ella -se ve hermoso -le colocó un mechón de cabello detrás de la oreja

Lo sonrió y bajo la mirada sonrojada.

Mientras tanto en la playa

-Hola -saludó August

-Hola -saludó Reed sorprendido levantándose de la silla

-he venido a clases de surf y no has estado

-sí, bueno me han cambiado turnos -dijo nervioso

-¿en serio? Cuando tienes turno ahora

-la verdad es que son variados, podría decirse que casi no trabajo -murmuró

-debe ser por tu invento, reconocieron tu idea

-sí, supongo

Reed vio sobre el hombro de August y se percató que Bummer se aproximaba.

-vio sobre el hombro de August
-y-yo debo irme -vio a August -te veré luego

Reed comenzó a caminar en dirección opuesta de donde estaba Bummer pero sin apartar su mirada de él.

-de... acuerdo -dudó ante la reacción de Reed

Reed se fue y August volteó hacia donde estaba Bummer y luego vio de nuevo a Reed mientras se alejaba preguntándose que estaba pasando.

Reed suspiro aliviado cuando vio que se había logrado alejar sin ser visto.

-Reed -le habló Nathan mientras estaba distraído

-¿qué? ¿qué? -volteó sorprendido

-calmante, soy yo

-suspiro aliviado -Nathan

-¿qué te pasa?

-es que vi a Bummer en la playa

-pero él no te vio ¿verdad?

-no, no, me fui antes de que pudiera verme, por eso me sorprendiste

-asintió -tiene sentido, venía a decirte que las chicas preguntan si podrías ir a ayudarlas con la decoración

-sí, ahora voy

Reed fue a la habitación del hotel acompañado de Nathan.

-Hola -saludó Reed -Nathan me dijo si podía venir a ayudarlas ¿qué necesitan?

-Emma tiene que irse entonces nos harán falta un par de manos
-respondió Lo

-por supuesto, con gusto -se arrodilló junto a Emma

Emma le dio instrucciones a Reed de lo que debía hacer y ella salió de la habitación.

-Emma -salió de la habitación tras ella

-volteó en dirección a Nathan
-¿sí?

-iba a preguntarte si quieres que te cubra en tu turno

-pero no crees que tendríamos que habérselo dicho antes a Kelly
-supongo que eso no sería problema, ha estado muy comprensiva conmigo últimamente

-será porque sabe que prácticamente eres su jefe

-espero que no, sabes que no me gusta que la gente cambie y actúa diferente conmigo por ser quien soy

-lo sé -le dedicó una sonrisa -pero de todos modos no sería justo decirle hasta ahora, además ya me hace falta un cambio de ambiente -rió

-rió -esta bien, nos veremos luego
-le dio un beso en la mejilla -nos vemos

Nathan entró a la habitación para ayudar con la decoración.

Mientras tanto August entró a la recepción del hotel en busca de Bummer.

-Hola, disculpa ¿sabes donde está Bummer?

-sí -le respondió Tyler -para que lo necesita, tal vez yo pueda ayudarlo

-sólo es para una pregunta

-muy bien, déjeme ver si puedo contactarlo -llamó por el teléfono de la recepción pero no hubo respuesta -lo lamento pero no contesta, si quiere puedo ir a buscarlo

-no, no se preocupe, muchas gracias -se dispuso a irse

-fue un placer

August se retiró al lobby, se sentó en un sofá cerca de la venta y comenzó a leer un libro. Llevaba ya un tiempo leyendo cuando vio que Bummer pasaba por allí, se levantó rápidamente llevándose el libro con él y se acercó a Bummer.

-Hola disculpe, Bummer

-dígame ¿en qué puedo servirle?

-verá tengo una pregunta sobre las clases de surf

-sí dígame

-antes había un chico de instructor ¿cierto?

-sí, pero como verá debido a la nueva implementación de la tecnología ya no es requerido

-oh claro, comprendo. Muchas gracias por su tiempo

-cuando guste estoy para servirle

August se retiró de nuevo al sofá, ahora sabía porque Reed actuaba diferente al hablar con él y porque se puso nervioso y dispuesto a salir corriendo en cualquier momento en cuanto vio a Bummer ¿pero por qué no le dijo nada? Suponía que era porque le daba pena o debía de haber otra razón que él ignoraba.

La Surfista Y El Hotel De Los EngañosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora