Una nueva integrante

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Al terminar su turno Lo se dirigió a los establos.

Cuando llegó se dirigió hacia Strider y Esperanza quienes aún no estaban ensillados.

-Hola -saludó a Strider y lo acarició
-¿has visto a Ty? Supongo que no tardará en venir

Seguido de saludar a Strider, saludó a Esperanza

-Hola amiga -la acarició
-¿recuerdas a Ty? -relincho -¿no lo has visto por aquí? Quedamos en vernos para que le enseñe a montar, no es tan malo ¿sabes? Pero quiere aprender más profesionalmente, espero poder lograrlo... con tu ayuda claro, me ayudaras ¿verdad?

De cierta forma Esperanza asintió y Lo sonrió. Lo comenzó a cepillar a ambos caballos y los ensillo.

***

-pero Bummer por favor -suplicó

-lo lamento Tyler, pero no estoy preguntandotelo

-sí Bummer -respondió desanimado

Bummer se fue y Tyler tuvo que aceptarlo sin otra opción.

Nathan llegó a la recepción buscando a Jane.

-oye Ty ¿has visto a Jane?

-no, hoy se va ¿cierto?

-sí, es por eso que la estoy buscando ¿no ha entregado la habitación?

-no aún no

-gracias -se disponía a irse -oye ¿tu turno no debería de haber terminado ya?

-sí -suspiró -debería

-entonces ¿qué haces?

-Bummer duplicó mi turno

-¿qué? -cuestionó sorprendido
-¿por qué?

-un empleado renunció y hasta que encuentren a alguien más todos nuestros turnos se duplicarán

-debo hablar con papá sobre ello, deberíamos tener un sistema para que eso no ocurra

-sería buena idea, solo espero terminar pronto

-bueno yo no te distraigo más, gracias de nuevo

-de nada

Nathan se fue. Tyler vio la hora en su reloj y decidió llamar a Lo

-no, no, por favor -suplicó en cuanto vio que su celular se apagaba por la batería baja

Buscó entre sus cosas el cargador de su celular pero no lo encontró

-debí dejarlo en la cabaña -se dijo a sí mismo mientras se frotaba las sienes
-no pudo pasar en peor momento Nathan acaba de irse, no tengo como comunicarme con Lo y no puedo moverme de aquí. Por favor Lo sólo espero que me perdones

***

-Jane -la llamó y se dirigió a ella
-te estaba buscando -la dijo en cuanto se la encontró en el lobby

-sí dime

-antes de que te vayas quiero preguntarte si puedes quedarte algunos días más

-¿qué...?

-alzó las manos para que lo dejara terminar -sé que tal vez sea demasiado tarde para pedirlo, pero hay un luau el sábado y a todos nos encantaría pasarlo contigo

-sonrió -sabes que faltan tres días para el sábado, mientras más tiempo pase aquí menos tiempo tendré para trabajar -Nathan bajó la mirada y asintió -pero
-Nathan levantó la mirada con ilusión -sabes que haría lo que sea por ustedes

La Surfista Y El Hotel De Los EngañosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora