Rolling Stone no se enreda a la hora de describirse: sarcástica, realista, de mala suerte y descomplicada. Y fabulosa, por supuesto ella no deja pasar "fabulosa" o cualquiera de sus sinónimos a la hora de describirse.
De hecho, Lyn no se enreda co...
¿Cómo es eso? ¿Dos partes para un extra? Pues sí, así soy yo xD
Háganse a la idea porque habrán más extras de cómo se conocieron mis bebés :3 Confieso que al principio los escribí sin intención de subirlos, no obstante, me encantan las amistades en mi historia y creo que estos extras son muy importantes para entender las relaciones y a los personajes <3
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Recuerdo exacto el día que conocí a Nataly Danielle Sweet.
Juls y yo íbamos por final del segundo semestre cuando Edith Ferguson decidió que aunque todos mascaran chicle, en mí era particularmente inadmisible y una ofensa imperdonable. Entonces decidió que para enseñarme "amor y respeto por las artes" (o sea, para fastidiarme), yo debía limpiar el taller de la facultad de arte a ver si así lograba <<apreciar y comprender lo mucho que se esfuerzan los artistas y lo ofensivo de mi acto>>. O alguna mierda parecida inventó, ya ni recuerdo bien.
El punto es que pase dos semanas súper pesadas limpiando el taller, pues estaban entregando proyectos finales; por todos lados habían papeles, manchas, utensilios y materiales regados. Llegué a quedarme horas organizando todo.
Ferguson se aseguró de que Julieth y Martina no se quedaran a hacerme compañía, mucho menos a ayudarme. La primera semana fue dura, pero la segunda fue digno de Misiónimposible: me quedé dormida en dos clases, apenas entregaba trabajos, dormía como dos horas y mis amigas me regañaron porque prácticamente no comía. Si eso fue difícil, fue toda una odisea encargarme de que papá no se enterara y no viera lo cansada que estaba, habría peleado, perdiendo tiempo y quizá metiéndome en más problemas, además de darle la satisfacción a Tronchatoro, no lo permitiría.
Como maravilloso plus, tuve que entregarle un detallado informe a Ferguson sobre los artistas más relevantes y su impacto e influencia en la sociedad desde el siglo XV a la actualidad. No sé cómo no me enfermé por agotamiento.
El último día del castigo estaba tan rendida que me quedé dormida en el suelo mientras intentaba limpiar un montón de escarcha derramada; me desperté debido a un estruendoso ruido justo a mi lado, el cual provino del golpe de una caja llena de materiales al estamparse contra el suelo. Caja que por un par de centímetros hubiese caído sobre mi cabeza. Aun atontada por el sueño e intentando recordar en qué momento fue tan idiota como para dormirme, busqué por el salón qué había pasado y enfoqué a una morena que me sonreía como disculpándose.
Resulta que cuando aquella chica regresó a recoger una pintura que había olvidado me vio tirada en el suelo (siendo patética) y se puso a organizar por mí. Al despertar estaba abrigada con su chaqueta y cubierta de escarcha. Gracias a eso ella me apodó Brillantina, a todos los que preguntan por qué el mote les decimos que es porque soy "una chica brillante". Y no es que sea estúpida, pero más que por conocimientos nos referimos a cómo, para mi vergüenza, nos conocimos; y también como referencia a nuestro amor por Grease.
