Miranda Chapman: ¡Piper, venga, baja a desayunar!
Piper: ¡Voy, voy, ya voy!
Michael: ¿Se te han vuelto a pegar las sábanas?
Piper: No.. no. Anoche me quedé hasta tarde estudiando.
Miranda Chapman: ¿Tienes hoy examen?
Piper: Algo así.
Tomé asiento para poder disfrutar el desayuno, aunque con prisas, debía haberme levantado de la cama hacía media hora e iba algo lenta. Todos parecían tan tranquilos menos yo.
Peter: Oye Pi.
Piper: Dime.
Solían llamarme ''Pi'' o ''Pips'' como mote cariñoso, aunque debo admitir que es un gusto horrible. Aún así, me hacia gracia.
Peter: Hace rato llamó tu amiga Polly, quería saber si pasaba a por ti o irías por tu cuenta a clases.
Piper: Mie.. iré por mi cuenta. Aún no he terminado de desayunar.
Miranda Chapman: Oye Piper, pensándolo bien, ¿No te gustaría retomar tu clases de piano? Hace meses que las dejaste por falta económica, pero ahora que tu padre ha vuelto a trabajar y, bueno, tocabas de maravilla el piano, quería saber si..
Piper: Mamá.. es genial.
Miranda Chapman: ¿Entonces te gustaría retomarlas?
Piper: Claro.
Miranda Chapman: Genial, entonces le diré a Lucía que te busque un buen profesor de clases de piano.
Michael: Yo hoy tengo entrevista de trabajo.
Piper: ¡Genial! ¿En algún empresa importante?
Michael: Si.
Peter: ¿En serio?
Michael: Si.
Piper: Eso es genial, ¿En cuál?
Michael: En McDonalds.
Peter: JAJAJAJAJA no jodas hermano.
Piper: Va a ser mejor que me vaya ya o.. no llego.
La verdad es que estaba reservándome para salir fuera y descojonarme de la risa, pues, tras ver la cara de mi madre, era mejor no hacerlo en la mesa. Ella siempre le habían importado las apariencias, siempre quedar bien, siempre una buena imagen, creo que por eso se hizo diseñadora de modas. Me dispuse a ir a clases y aguantar por horas aquella profesora de Biología química que no caía bien a nadie, aunque regalase chocolate de vez en cuando en clase. Era patético, pero bueno, al menos, no daba chocolate. Al volver a casa, me sorprendió ver lo vacío que estaba todo, había recordado que Michael tenía esa entrevista de McDonalds, Peter estaría en algún bar, o seguramente, dando tiros a latas en mitad del bosque, pero ¿Mi madre? Siempre solía estar antes que yo, pero de seguro se habría entretenido con alguna colonia cara, modelitos nuevos que comprar, o tomando el té con sus amigas mientras cotillean temas ''cuties''. Así me dio tiempo de ponerme cómoda y comer con tranquilidad hasta que Lucía, la amiga de mi madre, llamara al timbre.
Piper: ¿Quién llama?
Lucía: ¿Piper? Soy Lucía Morello, amiga de Miranda. ¿Me recuerdas?
Abrí la puerta, recibiéndola con una grata sonrisa.
Piper: ¡Hey! No sabía que ibas a venir, mi madre no me ha dicho nada.
Lucía: ¡No te preocupes! No la he avisado, venía a traerle unos papeles de unos profesores de piano, lo mejores que he encontrado, aunque como supuse que son para ti, debería dártelo a ti.
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La melodía del corazón.
Fanfiction¡Espero que disfrutéis al igual que disfruto yo escribiendo!