Hija de Shirohige (Tú, en el mundo de One Piece)

Capítulo 14: Un noble corazón.

Pasaron varios meses, Ace se la pasaba bien con los piratas de Shirohige, principalmente con (t/n), todos en la tripulación notaron que ambos se habían vuelto muy cercanos y no entendían el porqué, pero nadie reclama a nada, pues la joven era feliz, pero sólo había un pirata que no descansaría hasta saber qué pasaba...

-¡Amo tu comida Thatch-san!- exclamaba feliz (t/n), quien se encontraba en la gran cocina de los piratas de Shirohige, después de todo la cuarta flota se encarga de la alimentación y cuidado de suministros*.

-Siempre la hago con gusto... después de todo, siempre están hambrientos...- contestó con una gentil sonrisa. -Por cierto, debes prepararte...- dijo de la nada, lo cual intrigó a la joven.

-¿De qué hablas?- se intrigó por el tono de misterio que uso.

-Escuche que iremos al Shinsekai, existe un pequeño asunto y Marco ira en una misión "diplomática", al parecer será tu primera misión...- aseguró en voz baja.

-¡¡¿En verdad?!!- exclamó con felicidad la joven (t/c), cuyos ojos se iluminaron, incluso se levanto de su asiento.

-¡Sssh!- susurró Thatch llevando su dedo a los labios pidiendo discreción, ella al verlo entendió y lo imito, nunca borro aquella sonrisa de ilusión, posteriormente tomaba asiento. -Felicidades... estoy seguro que lo harás bien...- aseguró.

-¡Ya veras que si!- exclamó con aquella jovialidad que la caracteriza, estaba muy emocionada.

Con felicidad fue a su camarote, quería saber que le deparaba en su primera salida oficial como pirata de Shirohige, en su camino se encontró a Ace, así que no lo pudo evitar y salto hacia su espalda.

-¡¡Ace!!- exclamó ella, al principio él se había asustado, pero al escucharla sonrío por la forma tan brusca de llamar de su atención, la joven se subió de manera de caballito sobre la espalda de su nakama.

-¿(t/n)... por qué estás de buen humor?- cuestionó ya que se escuchaba muy emocionada.

-Tengo algo que contarte...- ambos fueron a la proa, donde en secreto la joven le contó lo que Thatch le dijo.

-¡Sin duda es genial! Ya veras que lo harás bien, eres inteligente y fuerte...- animaba, lo que provocó que la joven se sonrojara.

-Me gustaría que fueras con nosotros...- seguía sonriendo, pero Ace borró por un momento su sonrisa. -¿Qué pasa?- preguntó con incertidumbre.

-Lo siento, pero creo que ya no estaremos juntos...- dijo, lo que sorprendió a la menor.

-¿De qué hablas?- no le gustaba para nada el tono que uso.

-Estaré en la segunda división...- declaró con una leve sonrisa, (t/n) suspiró un poco más tranquila, temía que Ace los dejara o que se integrará a alguna división que requiriera estar lejos del Moby Dick.

-Ya veo... tal vez ya no puedes acompañarme, pero al menos seguirás aquí...- su tono era de alivio, volviendo a sonreír.

En las siguientes semanas Shirohige y su tripulación llegaban al nuevo mundo, Marco algunos de sus hombres y (t/n) partieron hacia una de las islas pertenecientes al Yonkou, donde había un problema con uno de los territorios, una famosa e infame pirata estaba causando estragos y temor en aquel territorio.

Al llegar la mujer había quemado la bandera de Shirohige, clara señal de reto.

-¿Quién es?- cuestionó al verla, una mujer de gran edad, cabello crespo rojo y mirada diabólica, quien con su espada sable causaba sufrimiento a quienes deseaban defender su isla.

-Elmy... una terrible pirata, gusta de saquear, pero no entendiendo porque nos está retando oi...- dijo con mucha intriga el primer comandante.

-Al fin llegan piratas de Shirohige...- dijo al verlos ahí, dejando de atacar. -Creí que nunca aparecerían...- carcajeo. -Y bien... ¿dónde está el viejo? ¡Deseo luchar con él, no con sus mocosos!- buscaba con la mirada al capitán.

-¡No hemos venido a luchar, pero deseamos que se detenga oi!- señaló Marco, la mujer se sintió un poco ofendida, pues al parecer Shirohige no aparecería.

-Tonterías...- señaló al primer comandante con su arma. -Tal vez si los mato al fin aparezca...- tenía una fiera mirada que atemorizaría a cualquiera.

-No es necesario derramara sangre...- dijo Marco tratando de evitar una lucha, esa era la orden de Shirohige.

-¡En eso te equivocas!- lanzó su ataque, el cual fue esquivado por Marco, (t/n) observó atónita, sin duda aquella mujer era fuerte para ser una anciana.

La mujer volvería a atacar, pero su atención se centró en (t/n), ella había escuchado rumores de la "fantasma" de Shirohige, ella llegó a pensar que era un mito, pues nunca pensó que Shirohige tendría a una mujer en sus filas, mucho menos a una niña.

-Así que tú eres la pequeña fantasma...- (t/n) se tensó, no sabia que hacer, pero no se dejaría intimidar.

-¡Mi nombre es (t/n)... y no permitiré que lastimes a los pobladores, si tu objetivo era pelear contra padre, debiste buscarlo!- exclamó molesta, pues llegó a observar a los heridos.

-En esta vida en alta mar un pirata no debería preocuparse por escorias...- se burlo, lo que molestó a la joven pirata.

-¡La escoria eres tú!- gritó, eso sin duda la ofendió.

-Maldita niña...- se abalanzó contra ella, pero Marco atacó antes de que se acercara a la joven, la mujer logró esquivar, por poco era herida, sus subordinados se preocuparon.

-¡Capitán!- exclamaron.

-Tienen agallas mocosos... es verdad que he retado a los piratas de Shirohige, así de debo pelear, ya que no vino el viejo, elegiré a mi oponente, si gano él tendrá que venir aquí... si pierdo, me entregaré a la Marina...- declaró sin perder aquella soberbia sonrisa, lo cual sorprendió a propios y extraños.

-Me perece bien...- dijo Marco dando un paso al frente, pero la mujer negó.

-Yo soy una dama... lo justo es que pelee contra la única mujer de su tripulación...- con su espada señaló a (t/n).

-¡Eso no!- exclamó Marco.

-¿Acaso ella no puede pelear?- cuestionó con sarcasmo.

-¡Claro que puedo!- gritó (t/n). -¡Acepto!- todos se sorprendieron y ella se abalanzó contra la pelirroja.

-¡(t/n)!- exclamó Marco, pero no pudo intervenir, los subordinados de Elmy comenzaron a atacarlos.

Ambas mujeres compartieron ataques con sus respectivas espadas...

-¡Eres bastante hábil... pensé que eras sólo una pobre niña que sigue al viejo Shirohige para no morir!- ambas tomaron distancia.

-¡Padre me acepto en su familia y no pienso decepcionarlo!- otra tanda de ataques se escucharon a través de ambas espadas, el choque de aceros inundaba el ambiente, fueron varios minutos de ataques sin tregua.

-¡Escúchame niña, en este mundo los hombres nunca aceptarán que también podemos ser piratas... estoy segura que si estás ahí es para entretener sus oscuros deseos!- dijo sin ningún tacto, eso enojo a (t/n).

-¡No sabes nada!- retrocedió para esquivar un ataque. -¡Padre nunca me ha dañado... él me acogió cuando nadie me prestaba atención, me dio un hogar y una familia... yo lucho para defender su nombre porque él no es igual a los demás piratas!- gritó mientras lanzaba una técnica.

Emily trató de detenerlo con su su espada, pero ésta cedió ante la fuerza del ataque de la (t/c) e incluso la derribo hiriéndola, sus subordinados al percatarse dejaron sus peleas y fueron con ella.

-¡Capitán!- ella sangraba del hombro, (t/n) tenía unos rasguños y golpes, respiraba agitada, Marco se sorprendió por eso, nunca imaginó que ella había mejorado.

-Perdí...- declaró cuando logró levantarse. -Cumpliré mi palabra...- sus nakamas se horrorizaron por la declaración, (t/n) se dio cuenta que la mujer tenía palabra de honor, debía haber una buena razón para su aptitud.

-No es necesario...- dijo la joven acercándose a la mujer. -Capitana Elmy... sea nuestra aliada...- extendió su mano mientras sonreía con amabilidad, todos se quedaron mudos y boquiabiertos.

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*Dato revelado en la Novela de Ace.