Hija de Shirohige (Tú, en el mundo de One Piece)

Capítulo 20: Confesiones.

La mañana llegó, (t/n) despertaba, sintiendo un dolor agudo en la cabeza, nunca había sufrido resaca, parecía la primera vez, se desconcertó un poco, comenzó a sentir a su alrededor, hasta que sus manos se encontraron con la calidez de alguien, ella tenía los ojos cerrados, así que los abrió de golpe, pues estaba segura que había dormido sola, se levantó y observó que Ace dormía a su lado, eso la asusto, por instinto se miró a si misma y aún conservaba su ropa interior, con lo que había dormido.

-¡Ace!- movió a su nakama, quería respuestas. -¡Ace!- insistía, pues él no despertaba. -¡¡Despierta Ace!!- lo movió y grito más fuerte, asustándolo, se levantó de golpe.

-¿Qué pasa...?- bostezo, pero de inmediato recordó. -¿(t/n), cómo te sientes?- cuestionó un poco más tranquilo, pues ella parecía estar bien.

-Eso quiero saber, ¿por qué estoy aquí?- parecía confundida.

-¿No lo recuerdas?- cuestionó el pecoso.

-¿Qué debo recordar?- lo ultimo que recordaba era acostarse para dormir.

-Bueno... ayer entraste a la habitación y te quedaste en la cama...- explicó un tanto nervioso, pues omitió la escena en la que ella quería desnudarlo.

-Entonces si me hizo efecto ese sake...- se volvió a acostar en la cama. -Lo siento mucho Ace, siempre te causo molestias...- dijo un tanto apenada.

-No te preocupes... entonces ¿no recuerdas nada?- cuestionó y ella trató de recordar algo, pero como no había nada en su mente, sólo negó. -Ya veo...- dijo un poco desanimado.

-¿Pasó algo?- cuestionó al escuchar cómo lo dijo.

-No...- la miró con una leve sonrisa, aunque era mentira...

Flash back...

-Vamos Ace...- ella insistía, él se sorprendió porque estaba seguro que ella no sabía sobre las relaciones entre hombres y mujeres, o acaso estando ebria saca a flote sus instintos.

-Quiero que te calmes (t/n)...- contrabajos se sentó, pero la joven seguía sobre su regazo.

-Pero estoy calmada... te deseo Ace...- ella colocó sus brazos en los hombros de su nakama.

-(t/n)... no está bien, eres aún una niña...- comentó sonrojado, sentía como su corazón latía con fuerza, observaba la mirada de la joven, la cual estaba adormilada y con una leve sonrisa, sin duda no estaba consciente de sus actos.

-¡Yo no soy una niña!- se quejó traviesamente. -Y te lo demostraré...- antes de Ace hiciera algo, ella estampó sus labios contra los de él, dando un sencillo beso.

Ace al principio no sabía qué hacer, mentiría si dijera que ese es su primer beso entre (t/n) y él, pero ahora lo más prudente era detener aquella situación, pero ¿cuándo tendría otra oportunidad así?

El beso se tornó más intenso, él la tomo de la cintura y de manera delicada la acostó en la cama, colocándose sobre ella, se separaron por la falta de oxígeno, ambos jadeaban, estaban sonrojados y se miraban con profundidad, la sonrisa de la más joven se amplió.

-¿Serás sólo mío?- cuestionó pero al verla, Ace volvió a ser atacado por la lógica, no era correcto, no podía aprovecharse de esa manera de (t/n), podrían ocurrir muchas cosas, pero lo que más sobresalía en sus pensamientos era la traición, había prometido cuidarla.

-No puedo...- declaró, ella se sorprendió.

-¿Por que?- cuestionó. -¿Acaso no soy atractiva?- Ace sonrió levemente desconcertándola.

-Eres bella... y siento algo por ti... pero... no podemos dar un paso tan importante en este estado, tu semidormida y yo muy confundido...- explicó.

-Pero...- él le dio un suave beso en los labios, separándose a la brevedad.

-Si recuerdas esto mañana, seré tuyo...- dijo en tono gentil, lo que sonrojo a la joven, quien sólo atinó a asentir.

Fin del flash back.

Después de eso la joven se quedo inmediatamente dormida, Ace la miró dormir un rato y después se acostó a su lado, abrazándola de manera cálida, tal vez había sido un error, tal vez no, pero él nunca se atrevería a hacerle algún daño a la joven, al saber que ella no recordaba nada, sabia que había tomado la decisión correcta.

-Debemos volver al Moby Dick...- dijo Ace con una sonrisa de simpatía.

-Si... tienes razón...- contestó ella, al perecer seguía buscando en sus pensamientos lo ocurrido en la noche anterior, por alguna razón sentía algo en los labios y pasó sus dedos una y otra vez, qué había pasado en realidad, pero no era la primera vez que se sentía así.

-¿Pasa algo?- preguntó Ace al verla tan pensativa, ¿acaso ella comenzaba a recordar?

-Dime Ace... en nuestra última aventura... tengo un recuerdo vago...- explicó, Ace no pudo evitar tensarse.

-¿Qué clase de recuerdo?- cuestionó de manera natural, escondiendo los nervios.

-Que tú me besabas...- dijo mirándolo fijamente, ella notó como él se sobresaltó con la declaración. -Había llegado a pensar que era un sueño... pero quiero saber si pasó en realidad...- exigió en tono tranquilo. -¡Quiero la verdad!- Ace tragó grueso, no dejaba de mirar aquellas orbes (c/o).

-No fue un sueño... en aquella ocasión te bese... te veías linda, no pude evitarlo...- susurró.

-¿Entonces ayer pasó lo mismo?- preguntó y Ace asintió, en verdad su nakama era muy astuta, ella parecía haberse molestado.

-¡Discúlpame!- dijo de inmediato. -No era mi intención molestarte con esto...- ella había bajado su mirada, pero volvió a mirarle tras la declaración.

-¡Estoy molesta porque no lo recuerdo bien... tú si lo recuerdas con detalle y yo no, no es justo!- se quejó y Ace se sorprendió.

-Entonces... déjame recordártelo...- la tomó de la muñeca y con un sutil jalón la atrajo hacia él, besándola en los labios, era un beso simple, pero cargado de sentimientos, ella estaba atónita, pero sólo se dejó llevar por el momento, se abrazó a Ace tomándolo del cuello, acostándose en la cama y atrayéndolo hacia ella, él poso unas de sus manos en la delicada cintura y la otra se apoyó en la cama.

Se separaron a la brevedad, él sonreía, ella estaba sorprendida y sonrojada.

-Gracias por ayudarme a recordar...- declaró ella. -Volvamos a casa...- él asintió, era obvio que no recordaba la promesa de la noche anterior, pero sin querer había dado el primer paso.