Hija de Shirohige (Tú, en el mundo de One Piece)

Capítulo 23: Sentimientos claros.

A la mañana siguiente (t/n) no había salido de su camarote, se sentía confundida, pues a su criterio, no entendía qué pasaba, ¿acaso Marco la quería igual que Ace? Estaba en un dilema y no sabía con quien hablarlo.

Por su parte Ace salía a desayunar, le sorprendió no ver a (t/n) en el comedor.

-¿Buscas a alguien?- cuestionaba Thatch con una leve sonrisa.

-Yo… bueno…- el pecoso se apeno. -No veo a (t/n)…- comentó tratando de sonar casual.

-Ella no ha venido, le fui a hablar, pero no me contesto…- dijo un tanto preocupado. -Tal vez esta cansada por la fiesta de ayer…- Ace se preocupo por la joven, ya que si en algo sobresalía la joven era en su energía.

-Iré a verla…- se encamino al camarote la menor.

-¿A dónde va Ace?- en ese momento llegaba Marco.

-Fue a ver a (t/n)-chan…- explicó el cuarto comandante, Marco se sorprendió. -Ya que ella no ha salido de su habitación…- concluyó, percatándose de la preocupación del primer comandante. -¿Sabes algo al respecto?- cuestionó tentativo.

-¿Podemos hablar a solas yoi?- señalo fuera del comedor, Thatch asintió.

Ace había llegado al camarote de (t/n), tocando delicadamente, pero no recibió alguna clase de respuesta, eso aumentaba su preocupación.

-¿(t/n)… estas bien?- la joven del otro lado de la puerta se sorprendió al saber que era Ace, levantándose de su cama. -¿(t/n)?- insistió.

-E… estoy bien… sólo quiero descansar…- trato de usar un tono casual y amable, pero el mayor no le creyó.

-Ambos sabemos que estas mintiendo… ¿acaso no confías en mi?- la joven se pasmo por esas palabras.

Del otro lado de la puerta Ace estaba intrigado, como no recibió respuesta pensaba en irse, pero se alivio un poco al escuchar como la joven comenzaba a abrir la puerta, al verla notó que ella no había dormido en toda la noche, además parecía estar intrigada y preocupada.

-Pasa…- dijo de manera sencilla.

Mientras tanto en uno de los mástiles Marco y Thatch hablaban, el primero se veía afligido.

-Se lo confesaste…- comentó con una leve sonrisa.

-Si… ahora me arrepiento yoi…- Thatch noto la melancolía.

-(t/n)-chan debe estar confundida, después de todo es inocente en esas cosas…- Marco le dio la razón. -Ella es querida por todos nosotros… mucho más de lo que ella se  lo imagina…- confesó el cuarto comandante, sorprendiendo a su nakama.

-Thatch… acaso tu…- él sonrió de lado.

-Tengo una teoría… (t/n)-chan ha despertado en todos nosotros alguna clase de amor… y eso pasa porque a diferencia de otras mujeres, ella nos conoce tal cual, la confianza se convirtió en cariño, después en aprecio… luego en amor… depende de la persona es la clase de amor, algunos pueden ser mera gratitud por su cariño, otros adoraran su sonrisa, otros su belleza, otros pocos desearan su cuerpo, por suerte eso no se ha manifestado, pero para nuestra mala suerte ella es la única que puede escoger… en caso de que ese sea su deseo…- Marco entendió.

-Sin duda soy un idiota… tal vez lo he complicado al besarla yoi…- confesó. -Pero me he dado cuenta de lo cercana que se ha hecho a Ace y temo lo peor…- dijo mirando al cielo. -Sentí celos, yo la conozco desde niña y con él… apenas son unos meses y parecen compartir mucho…- Thatch también se había percatado de ello.

-Eso significaría que Ace seria el elegido, y que (t/n)-chan sólo nos ve como su familia… y si en verdad la amamos, debemos dejarla escoger su felicidad…- dijo mirando hacia el horizonte.

-Odio que tengas razón yoi…- dijo con una leve sonrisa.

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-Ace… si otro me besara… ¿qué harías?- dijo sonrojada y con la mirada baja, ella estaba sentada en su cama, y él estaba de pie frente a ella.

-¿Con ese otro, te refieres a Marco?- cuestiono con rostro serio, ella se sorprendió. -Me doy cuenta de como te mira, eres valiosa para él… pero le verdadera pregunta es ¿qué sientes por él?- cuestionó la joven se pasmo.

-Marco-oniichan… es mi hermano, mi maestro… nunca me imagine que me besaría…- confesó.

-Y que piensas al respecto…- trato de sonar casual. -Yo también te bese… ¿cuál te gusto más?- había curiosidad en aquella pregunta, (t/n) pensaba detenidamente en su respuesta.

-No lo sé…- confeso, eso sorprendió a Ace.

-¿Entonces que sientes por mi?- cuestionó un tanto molesto. -Creí que habia quedado claro lo nuestro…- se exalto un poco.

-¡Ya no se que pensar… yo quiero a Marco-onnichan, pero también te quiero a ti, a Padre a todos!- declaro con un nudo en la garganta, Ace se dio cuenta de ello, tranquilizándose, sentándose a su lado.

-Lo siento… entiendo que es confuso para ti, y tomate tu tiempo para pensarlo, es cierto que quieres a todos, ya que somos tu única familia y como tal debemos apoyarte…- ella miro a los ojos a Ace, quien sonreía levemente. -Te quiero…- la tomo del rostro, robándole un beso sencillo, las mejillas de la menor se tiñeron de rojo.

-Te quiero…- sonrió levemente, ella volvió a besar a Ace, acercando su cuerpo al de él, quien la  abrazo de la cintura, aquel beso se torno más pasional, así que se acomodaron en la cama de la joven, después de unos momentos se separaron jadeando por la falta de aire.

-Debemos detenernos…- declaró con una sonrisa traviesa, apenando a la joven. -Alguien podría venir…- dijo mientras se levantaba.

-Tienes razon…- nada bajaba su sonrojo.

-Te veo en el comedor…- ella asintió.
Ace salió del camarote de (t/n), por suerte nadie estaba cerca, al menos era algo que él pensaba…

Marco y Thatch entraban al comedor y se encontraron a Ace , (t/n) con algunos de sus nakamas almorzando y platicando amenamente, el cuarto comandante se fue a seguir con sus deberes, mientras el primero se acerco a la mesa, mirando al joven comandante de la segunda  división.

-Marco-onnichan… buenos días…- saludó la joven.

-Buenos días…- saludo casual, los demás correspondieron al saludo. -¿Ace, podemos hablar?- cuestionó.

-De acuerdo…- para todos era evidente la tensión entre ambos comandantes.

-Ace…- (t/n) se levantó, pero Marco la señalo con la palma.

-No interfieras…- ordenó, ella se pasmo, sentándose.

Ambos comandantes subieron a la cubierta y fueron a la popa, Marco se sentó en la orilla del barco, Ace se quedo de pie, recargando su espalda en la orilla.

-Supongo que ambos hablaremos de (t/n)…- comento el pecoso.

-No precisamente…- el menor se sorprendió. -Ace promete que nunca la lastimaras…- pidió con cierta tristeza. -Es obvio que nunca sentirá por mi, lo que siente por ti, tal vez ella no se dé cuenta, pero yo si yoi…- comentó con una leve sonrisa.

-Marco…- dijo pasmado.

-Por eso si ella misma te entrega su corazón, cuídalo como un gran tesoro, si la lastimas nadie te perdonara…- dijo un poco amenazante.

-Aunque no me lo dijeras eso hare…- dijo un tanto avergonzado, a lo lejos Thatch sonreía con amabilidad, estaba seguro que algo así pasaría, sólo quedaba saber a quien quería realmente la joven.