Hija de Shirohige (Tú, en el mundo de One Piece)

Capítulo 26: La calma antes de la tormenta.

Casi dos años desde que Ace había llegado a la tripulación de Shirohige, había muchas aventuras, momentos de alegría, peleas, nuevos conocidos, viajes entre Shinsekai y Paraiso, de los cuales (t/n) había aprendido mucho, con 18 años la recompensa de la joven habia aumentado otros 100 millones, siendo un total de 250 millones de berries, siendo su mayor orgullo.
En una tranquila tarde, la joven leía el periódico, a ella le gustaba informarse día a día, cuando lo abrió cayo de inmediato un hoja de recompensa, lo levanto y con un poco de intriga observo el cartel, era de un muchacho sonriente.

-Es extraño para un cartel pirata…- dijo con una leve sonrisa.

-¡Hola (t/n)!- Ace se acercaba a ella.

-¡Oh! ¡Ace!- saludo con una amplia sonrisa. -¿Cómo fue tu misión?- cuestiono.

-Tranquila, de hecho me aburrí y me dormí…- explico bromista.

-Eso no es nuevo…- declaro siguiendo con la broma, Ace se sonrojo levemente, pero de inmediato noto el papel en la mano de la joven.

-¿Y eso?- lo señalo.

-Un nuevo cartel de recompesa…- explico. -Al parecer un novato esta comenzando sus andanzas, ya tiene una recompensa y ni siquiera ha entrando a Paraiso…- le entrego el cartel, Ace lo observó y al verlo claramente, una amplia sonrisa se poso en su rostro. -¿Lo conoces?- pregunto al notar la alegría del mayor, debía admitir que no había leído el nombre.

-¡Es Luffy!- exclamo con jubilo, sorprendiendo a la joven.

-¿Tu hermano menor?- cuestiono sin salir de la sorpresa, Ace asintio, mostrándole de nuevo el cartel, ahí se leía el nombre “Monkey D. Luffy” de una recompensa de 30 millones de berries.

-No puedo creerlo, al fin ha salido al mar…- miro el cartel.

-Se ve que se la esta pasando bien…- dijo la joven con una amable sonrisa. -Espero conocerlo, debe ser tan fuerte como tú…- Ace sonrió de igual manera.

-Es un tanto problemático, pero si… si quiere cumplir su sueño debe ser fuerte…- la joven se intrigo.

-¿Su sueño?- cuestiono.

-Desde que lo conozco siempre ha dicho que quiere ser el Rey de los piratas…- (t/n) se sorprendió por saber aquello, y una duda la invadió pero al ver tan feliz a Ace decidió no decirlo.

-Le mostrare a Padre el cartel de mi hermano… ¿no te molesta?- el pecoso estaba tan feliz que no noto la incertidumbre de su joven nakama.

-No… adelante, puedes llevártelo…- sonrió levemente y Ace se fue a buscar a Shirohige.

En transcurso de la semana, Ace le mostraba a todo el mundo el cartel de Luffy, se sentia orgulloso de él y deseaba que ingresara pronto a Paraiso, así seria más fácil encontrarse con él.

-¡(t/n)!- cierta tarde Ace se acercaba a ella, quien seguía un tanto seria.

-Hola Ace…- ella trato de corresponder a la sonrisa, pero él noto lo seria que se encontraba.

-¿Pasa algo?- cuestionó preocupado.

-S… sí…- contesto, parecía distraída. -Sólo que me llego una duda desde que salió el cartel de tu hermano…- se animo a decir, aumentando la intriga de su nakama.

-¿Qué duda?- pidió saber.

-Si tu hermano quiere ser el Rey de los Piratas, ¿qué harás si un día reta a Padre?- cuestiono, temía que Ace los dejara por algo así.

El pecoso se pasmo por la pregunta, estaba tan emocionado por la recompensa de Lufffy que no tomo en cuenta aquella situación, aunque conocía su hermano, sabía que él no retaría a Shirohige si no había una  buena razon, pero si se daba el caso, ¿qué haría?

-¿Ace?- la (t/n) insistió en una respuesta.

-Bueno yo hice un juramento… haría a Padre el rey…- aseguro de manera tranquila, la joven suspiro aliviada. -Pero dado que es mi hermano menor, seria genial si él y su banda se unieran con nosotros…- sugirió.

-Eso suena genial…- apoyo la joven.

-Pero en su momento lo veremos…- concluyo.

-Tienes razón… espero que acepte, porque sino, yo misma lo golpeare…- amenazo con una amplia sonrisa y Ace carcajeo.

-Seria interesante ver una pelea entre ustedes dos…- aseguro el pecoso, pues se cuestionaba qué tan fuerte se había vuelto Luffy en esos dos años.

Las siguientes semanas transcurrieron de manera normal, cierta noche mientras cenaban (t/n) hablaba de manera animada con varios de sus nakamas, en eso el comandante de la cuarta flota llegaba ante ellos, con lo que parecía ser un pastel sorprendiendo a todos.

-Acaso…- susurro uno, (t/n) se sonrojo, pero su sonrisa era amplia.

-¿Es hoy?- dijo la joven.

-Así es… a mi nunca se me olvida… hace 10 años, llegaste a nuestras vidas…- declaro Thatch con una amigable sonrisa.

-¡10 años!- exclamo uno de sus nakamas, en el comedor estaba Ace quien se acerco para ser parte de la escena, Marco estaba cerca de aquella mesa, sonreía de manera amable y nostálgica, pues recordaba que él la había encontrado.

-Woo 10 años…- dijo Ace, en ese momento entraba Shirohige.

-¡Padre!- ella se acerco al mayor, quien había tomado asiento y le llevaban un sake.

-10 años ya…- dijo nostálgico y con una ligera sonrisa.

-10 maravillosos años…- aseguro la joven.

-¡¡Hijos míos celebremos!!- exclamo Shirohige, todos exclamaron la afirmación con alegría, comenzando así con la fiesta.

El ambiente era ameno, después de algunas horas Marco salió a tomar aire, suspiro mirando el basto mar, a los pocos minutos Shirohige aparecía detrás de él.

-Padre… ¿pasa algo?- cuestiono al verlo un tanto serio.

-Creen que nunca me iba a dar cuenta…- expreso, sorprendiendo al primer comandante. -Pero me alegra que tu y Ace se hayan portado a la altura, si se equivocaban… tendrían un correctivo…- amenazo.

-No quería preocuparte…- declaro más tranquilo. -Al final (t/n) tomo su decisión, y parece muy feliz por ello yoi…-  Shirohige carcajeo.

-Sin duda (t/n) se ha convertido en toda una pirata…- celebro el mayor, Marco correspondió el comentario con una leve sonrisa.

Aquella celebración duro hasta altas horas de la mañana, sin duda (t/n) se la paso genial, siempre feliz con toda su familia, tal vez lo habría disfrutado más si supiera lo que pasaría en los próximos días…

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Unos días después, Thatch y (t/n) salía en búsqueda de algunas cosas…

-¿A dónde vamos?- cuestiono la joven.

-Hace mucho que he querido visitar la isla Cefran… dice que es una isla donde se pueden conseguir buenas especias…- explico el cuarto comandante.

-Suena interesante…- aseguro la joven con una amplia sonrisa, sin duda eso era lo que Thatch amaba de la joven, su sencillez y la confianza que ella emanaba, comenzando así su travesía.