Hija de Shirohige (Tú, en el mundo de One Piece)

Capítulo 24: Thatch.

En los siguiente días la tranquilidad regresaba a la vida de (t/n), tanto Ace como Marco decidieron no tocar el tema y dejar que su joven nakama tomara su decisión cuando lo deseara, cierta tarde, la joven estaba en su camarote, descansando pues al día siguiente saldría en una misión con Marco, y no sabía que clase de misión, pero le emocionaba mucho.

Después de medio día salió a comer, Ace no se encontraba, así que no había mucho que hacer, entro al comedor y como siempre todos la saludaron, hasta que uno de sus nakamas pertenecientes a la cuarta flota se acerco a ella.

-¡(t/n)-chan!- llamo su atención.

-¿Qué pasa?- cuestiono con una amable sonrisa.

-El capitán Thatch quiere verte…- señalo la cocina, eso le pareció extraño a la joven, usualmente el mayor solía buscarla para hablar con ella, así que podría tratarse de algún asunto delicado.

-Gracias…- se encamino a la concina, dónde sólo estaba él, mientras picaba algunas verduras.

-¿Pasa algo Thatch-san?- cuestiono.

-Sé que mañana iras a una misión con Marco…- la joven asintio un poco dudosa.

-¿Qué pasa con eso?- cuestiono con curiosidad.

-¿No te gustaría venir conmigo?- la joven se extraño por la petición.

-¿A dónde?- su nakama sonreía con simpatía.

-Debo ir por unos suministros, pero es en una isla peligrosa, normalmente llevo a alguien de la segunda flota, pero te has vuelto tan fuerte que quiero que tu me protejas…- explico.

-¡Oh! Si necesitas mi ayuda, esta bien… pero…- dijo un poco nerviosa.

-Yo hablare con Marco…- aseguro.

-De acuerdo…- sonrió más confiada.

Esa noche ambos capitanes hablaban, Ace quien se dirigía a su camarote, escucho sus voces y no pudo evitar quedarse para averiguar qué pasaba.

-¿Por qué lo haces?- cuestiono Marco de brazos cruzados.

-(t/n)-chan debe tomar una decisión, pero si esta todo el tiempo contigo, Ace tiene desventaja…- dijo sonriente.

-¿eh?- cuestiono un tanto ofendido.

-Sólo quiero la felicidad para nuestra hermanita…- aseguro sin dejar de sonreír.

Ace se pasmo por la revelación, y no sabía si sentirse aliviado o preocupado, acaso ¿(t/n) podría olvidarlo fácilmente?

(T/n) partió con Thatch, quien también era acompañado por algunos nakamas pertenecientes a la cuarta flota, quienes estaban felices de tener a la joven cerca de ellos, sin duda su joven nakama era la luz de sus vidas.

-(t/n)-chan… ¿estas bien?- el mayor se acerco a ella, quien miraba el horizonte, mientras una pequeña embarcación perteneciente a Shirohige los transportaba.

-Creo que sí… es sólo que… tengo muchas dudas…- declaro sin dejar de mirar el basto mar.

-¿Dudas?- cuestiono con una fingida sorpresa.

-¿Recuerdas el libro de cuentos que me compraste?- cuestiono la joven, mirando al cuarto comandante.

-Por supuesto…- dijo con una leve sonrisa.

-Bueno en ese libro había historias en las que un príncipe y una princesa se enamoran y viven juntos para siempre…- comento dudosa, Thatch noto la curiosidad de la joven. -No entiendo muy bien… ¿por qué se quedan juntos para siempre?- sentía un poco de vergüenza al preguntar eso.

-En tu antigua familia, solían ser tu madre, padre y tú…- comenzó con la explicación, la joven prestaba atención. -Antes de que tú vinieras al mundo, tus padres se conocieron, algo de tu mamá le gusto a tu papá y algo de tu papá le gusto a tu mamá, por lo tanto decidieron hacer una vida juntos… a eso se le llama amor, formándose la pareja…- la joven asintio. -Cuando vamos a islas, puedes ver familias, conformada por la pareja e hijos, a muchos les gusta ese tipo de vida… todo depende de qué deseas…- concluyo.

-Entonces ¿si yo me enamorada… no tendría que dejar de ser pirata?- cuestiono con nervios.

-Exacto… a menos que tú lo desees nada ni nadie debe impedirte hacer algo que amas…- señalo seriamente aquello, sin borrar su sonrisa amable.

-Ya veo…- dijo más tranquila.

-¿Tienes algún “príncipe”?- cuestiono con curiosidad, la joven se sonrojo por el comentario.

-Dime Thatch-san… crees que padre se enojaría si uno de los que considero hermano, ¿me gustara?- bajo la mirada por un momento, el mayor suspiro pensativo, ya que no había pensado en esa posibilidad, al parecer ni Marco o Ace lo habían pensado.

-Es una buena pregunta…- declaro pensativo. -Estoy seguro que Padre desearía tu felicidad, aunque tal vez se sienta un poco traicionado…- decía dudoso, eso no tranquilizaba a la joven. -Pero no te preocupes, estoy seguro que al final aceptaremos tu decisión, porque eres importante para nosotros…- aseguro el mayor.

-¡Gracias Thatch-san!- dijo mientras lo abrazaba, él correspondió a la sonrisa.

El viaje hacia aquella isla fue tranquilo, al igual que parte del regreso, sin embargo a mitad de camino, (t/n) noto que una embarcación comenzaba a seguirlos, viendo en lo alto de la misma, una bandera pirata.

-Nos siguen…- advirtió la joven. -¡Todos en posición de defensa!- exclamo, sin embargo el sonido del viento silbante la hizo voltear, observando más cerca de ellos otro barco con la misma insignia. -¡Yo me encargo!- exclamo mientras subía al mástil.

De manera pulcra logro cortar las balas, gracias a Vista había aprendido a manejar la espada.
-Eso fue impresionante (t/n)-chan!- exclamarón los presentes, la joven sonrio levemente, aunque no era el momento de celebrar, se había confiado y se encontraba  rodeados por dos grandes embarcaciones, no seria fácil librarse, ya que con ella, eran 10.

-(t/n)-chan…- le hablo Thatch, quien se mostraba preocupado, la joven bajo.

-Lo siento Thatch-san… me confié…- dijo un tanto avergonzada.

-No te es tu culpa… todos nos confiamos, ya que estamos cerca…- aseguro el mayor.

-¡Llamen refuerzos… yo los distraeré!- declaro, las embarcaciones ya estaban a escasos metros de ellos.

-Nosotros te ayudaremos…- aseguro el cuarto comandante, la joven asintio.

-¡Oh! Qué suerte la nuestra, aquí se encuentra la “Emperatriz blanca”…- carcajeo, dando la señal para el ataque; mientras la joven y el cuarto comandante se preparaban para luchar, debían esperar hasta la llegada de la segunda flota.