"Kara Danvers fue un error"... eso creía, ya que le había costado demasiados sacrificios y el que consideraba era el amor de su vida.
Luego de creer que todo estaba en su contra, lo único que deseaba Kara era desaparecer, pero los deseos pueden ser...
Al día siguiente Lena despertó primero, al darse vuelta se encontró con una Kara profundamente dormida a su lado, después de observarla por largo tiempo y pensar lo hermosa que era, decidió levantarse.
Para evitar despertar a Kara, se levantó con mucho cuidado, y se dirigió a terraza que se encontraba saliendo del cuarto de Kara. Ahí se dedicó a observar todo el paisaje que rodeaba la casa.
Lena se encontraba sumergida en sus pensamientos cuando sintió como Kara la tomaba por la cintura y le daba un beso en su cuello.
_¿Qué haces aquí?... Te puedes enfermar -le dijo con preocupación-.
_Ya no pude dormir y opte por venir a ver el hermoso paisaje...
_Entiendo, pero te sientes bien, me hubiera despertado...
_Si estoy bien..., tranquila solo no quería molestarte, pude ver que estabas descansando, a diferencia de otras noches.
_No, pero eso no importa... por favor si te vuelve a pasar me despiertas.
_Está bien lo haré, pero de verdad no te preocupes, nunca he estado mejor.
_¡Lo prometes!...
_Si te lo juro... -le contesto Lena levantando su mano derecha-.
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Después de permanecer un rato más en la terraza optaron por entrar de nuevo a la casa para ir a desayunar. Después de desayunar Kara le insistió a Lena para que se alistara para poder llevarla a la terapia. Lena quiso liberarse de dicha tarea, pero no logro convencer a Kara, así que no le quedó otra opción que seguir sus órdenes.
_Kara ya estoy lista, pero no sé porque insistes en que vayamos a la terapia, podemos ir mañana.
_Lena por favor, primero está tú salud, además se lo prometí a Eliza.
_Pero llevo meses sin faltar a las terapias, sin descanso, por un día que falte no va a pasar nada.
_Lena por favor, no insistas... -le dijo con determinación- no vamos arriesgar lo que has avanzado.
Al escuchar las palabras de Kara con tanta determinación, Lena no hizo más agachar su cabeza y mostrar una profunda tristeza. Kara al ver la tristeza en la expresión de Lena no hizo más que sentirse mal por cómo le había hablado, y opto por acercarse a ella y con la delicadeza que ella merecía la tomo por la cintura, y con su mano levanto su rostro.
_¡Lena, cariño!... disculpa mi intención no era hacerte sentir mal, solo no quiero que por faltar a tus terapia tengas algún problema en tu pierna, mira que ya casi logras poder trasladarte sin ayuda de nada, y eso solo es por seguir el tratamiento al pie de la letra.
_Lo sé, lo lamento, mi intención tampoco es comportarme como una niña mimada, pero solo quiero descansar por un día de tanto hospital, tantos doctores.
