Enamorarte

Capítulo 13: Cambio de planes

Después de correr y caminar durante horas y luego de que la rabia se convirtiera en miedo por andar a las 3 de la mañana sola, volví a mi casa.

Estaban todas las luces apagadas, vaya compañerismo "y si me hubiesen secuestrado y tirado al río? Nadie se hubiese enterado hasta al otro día." Entre al baño y preparé la bañera, los ojos de Jazmín, no podía quitarlos de mi mente.

Preparé música y me metí en la bañera. Cerré los ojos tratando de que la música hiciera su trabajo y me llevará a mil kilómetros de ahí.

Me encorve asustada cuando sentí una mano tocar mi rodilla. Jazmín estaba sentada en el borde, mirándome fijo a los ojos.

- ¿Que haces aquí? - dije mientras con una mano quitaba los auriculares y con la otra cubría mi pecho.

- Quería asegurarme que estabas bien.

- Awwww que dulce! - dije con una irónica sonrisa - estoy muy bien Jazmín... ahora vete!!

- Flor... escúchame.

- ¿Te vas a casar con esa idiota? - me puse de pie y me cubrí con la bata.

- Me tomo por sorpresa... ¿qué se suponía que hiciera?

- No se.... tal vez decirle ¡¡NO!! hubiese sido una buena opción!!

- Flopy yo te quiero a ti.

- Vamos a tener que analizar y trabajar en esa forma que tienes de quererme.

Estábamos las dos de pie mirándonos y yo sentía la rabia en el centro de mi estómago. Y aunque mi primer pensamiento era sacarla de la habitación a empujones hice todo lo opuesto, la tome de la blusa y la acerque a mi y sin decir ni una palabra la bese... la bese como si fuera la ultima vez.

La fui llevando sin dejar de besarla hasta la cama, ella se separo de mi y se sentó en la misma.

- ¿Qué estamos haciendo? - pregunto acariciando su nuca.

- Terminar lo que empezamos en el bar - respondí y apague la luz

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El sonido del despertador me saco del profundo sueño en el que estaba, habíamos pasado toda la noche entre besos y sexo, tanto que mis piernas aún estaban flojas.

Apague la alarma y me gire a ver a Jazmín quien seguía dormida, se veía realmente angelical, tan calma... tan dulce.

Me puse encima de ella y le fui dando pequeños besos por toda la cara hasta que vi como entre sonrisas sus ojos se iban abriendo.

- ¿Podrías despertarme así siempre?

- No suena mal.

Me tomo de la espalda y me dio vuelta quedando arriba y ahora era ella quien me besaba por todos lados, la cosa se iba poniendo cada vez mas caliente, tanto así que no fuimos capaces de oír la puerta abrirse.

- Flor, Hay ¡¡DIOS MIO!! - grito Miranda tapándose los ojos, Jazmín cayo al suelo y se levanto al instante cubriéndose con la manta.

- Creo que nos ah visto - le dije a Jazmín entre carcajadas cuando Miranda cerro la puerta.

- Sera mejor hablar con ella - me contesto con una sonrisa pícara.

Salió de la habitación y yo me di una ducha rápida, cuando fui a la sala, Miranda le susurraba algo al oído a Lucía y esta me miraba asombrada.

- Florcita querida, ¿hay algo que quieras decirnos? - interrogó Lucía al darme una taza con café.

- Sí, dormí con Jazmín.

- ¡¡Te lo dije, las vi con mis, AHORA, traumados ojitos!! - exclamó Miranda señalándose con su mano.

Lucía iba a decir algo pero Jazmín se sumo a nosotras.

- Buenos días - dijo sentándose a mi lado y yo sentí mi corazón dar latidos cada vez mas rápidos.

- Buenos días Jazmín - se quedaron las dos en silencio mirándonos y yo me reí.

- Antes de que digan algo... si, estoy comprometida pero no va a ser por mucho, hablaré con Elena. Y si, Flor y yo pasamos la noche juntas. Y la amo.

El sorbo que había tomado se quedo en mi garganta provocando que comenzará a toser, "¡¡dijo que me ama!!.. Me ama a mi y no a Elena, a mi.... te están mirando reacciona Florencia!!" 

- Amas Elena no... - "porque me haces esto cerebro? Se supone que somos un equipo!!" cerré los ojos y respire profundo - ¿me amas? - pregunté cuando fui capaz de hablar "normalmente." Jazmín asintió con una sonrisa.

- Vaya, Estrella debes de ser buena en la cama.

- ¡¡Miranda!! - grito Lucía mientras yo sentía la sangre en mis mejillas.

- ¿Qué? Una noche con ella y quiere dejar a su novia de la Universidad!!

- Te esperamos afuera, adiós Jazmín - la rubia tomó del brazo a Miranda arrastrándola consigo.

Cuando nos quedamos solas volví a besar a Jazmín en los labios, no podía salir de ese estado idílico en el que sus palabras me habían llevado.

- Cariño, llegarás tarde - dijo rompiendo el beso.

Me levante y tome mi bolso para irme cuando llegue a la acera me percaté de que no había respondido.

Corrí hasta la casa nuevamente y me abalance sobre Jazmín que seguía desayunando.

- ¡¡Yo también te amo!! - dije y le di un beso más... ahora si estaba lista para ir a trabajar.