Salí por la puerta después de mi hermano y me encontré con Axel que me esperaba en recargado en su motocicleta como me había asegurado. Mi hermano desapareció tras subirse al bus, me coloqué el casco y sentí un escalofrío en la espalda, eché una mirada tras mi espalda y note a mamá observándonos a través de la ventana, con las cortinas ligeramente abiertas. No era la mejor espiando, siempre notaba su intensa mirada cuando me escudriñaba, pero estaba completamente segura que no era por el chico que me acompañaba, sino por su imponente motocicleta, mamá era una de las personas más interesantes del mundo antes de convertirse en madre, como una corredora de carreras clandestinas en motocicleta por ejemplo, probablemente esté babeando ahora mismo el cristal al ver tal ejemplar en frente de casa, yo, en cambio, no sabia nada de estos artefactos infernales, pero debía admitir que era bonita.
—Nos está viendo —Axel siguió la dirección de mi mirada y miró a mamá con una sonrisa, elevó la mano y la saludó derrochando autoestima.
—No nos ve a nosotros —reí; mamá había pasado por completo de él—. Ve tu motocicleta —Axel conectó la mirada con la mía y me encojí de hombros—. Le gustan estas cosas del demonio —elevó una de sus cejas al cielo mientras se colocaba recto.
—¿Y a ti no?
—Prefiero mantener mi vida justo así, con vida —sonrió divertido y me pregunté por qué yo le provocaba gracia. Fruncí el ceño y lo observé montarse sobre la motocicleta, esta vez quería intentar treparme a este artefacto yo sola; debía pillarle el truco en algún momento o Axel andaría por la vida haciendo brazo conmigo como pesa. Me sujete de sus hombros con las manos y lance una de mis piernas hasta el otro lado del vehículo, me impulse con los brazos y de un salto ya estaba montada detrás de él, deslice mis manos hasta abarcar su abdomen con mis extremidades superiores e hizo rugir el motor una vez que me encontraba pegada a su espalda.
—Sujétate bien, porque esta cosa del demonio te mostrará el infierno —Axel arrancó, acelerando tanto como pudo y sentí como nos movíamos a una velocidad vertiginosa, la bilis subió por mi tubo digestivo y luego bajó abruptamente antes de llegar a mi cavidad oral, mi corazón latía desbocado y rápidamente noté como mi frecuencia cardiaca se disparaba hasta las nubes junto con mis niveles de adrenalina, «¡Joder! ¡Esto está increíble!».Llegamos a la escuela completamente despeinados, mis mejillas estaban rojas por la adrenalina y me sentía mareada por la forma tan frenética en la que mi corazón latía, definitivamente fue una experiencia insólita. Caminé hasta la entrada de mi instituto seguida de Axel, algo raro a decir verdad.
—¿Qué haces? —me detuve mientras echaba una mirada sobre mi hombro para verlo.
—Voy a la escuela —obvió y puse los ojos en blanco.
—¿Por qué?
—Richard movió algunos hilos para transferirme a esta escuela y cuidar de ti, estoy contigo en todas las clases —me dedicó una sonrisa angelical y mi boca se abrió hasta el piso, «¡¿Qué?!».
—Estamos a mitad del semestre —le miré incrédula.
—Lo sé —él pasó por mi lado, derrochando una vez más su autoestima y me dieron ganas de estrellar mi rostro contra el suelo; adiós a mis dulces días de invisibilidad.Nunca me hubiese imaginado en toda mi vida que un día estaría en medio de Nancy y un chico guapísimo en una sola mesa con dos sillas. El fornido cuerpo de Axel ocupaba casi el mismo espacio que ocupaba el de Nancy y el mío juntos, por esa razón termine en medio de ambos... y porque era evidentemente incómodo para Nancy estar cerca de este chico que, según ella, me miraba demasiado. Axel terminó sentándose con nosotras después de notar la falta de lugares disponibles, había tomado la decisión por sí solo y con una sonrisa me empujó contra Nancy con la fuerza de sus caderas, metiendose en mi lugar como un parásito. Ahora estaba sentada sobre una porción de mi asiento y una del de Nancy, afortunadamente nuestras sillas estaban muy juntas, sino mi trasero se hubiese quedado flotando en el aire.
—Quiero un ensayo para la próxima semana sobre la importancia de cuidar el planeta y una propuesta de mejora. Será en parejas con quienes comparten asiento —la vista de la profesora de ecología recayó sobre nosotros—. Parece que habrá un equipo de tres después de todo —una sonrisa cómplice se deslizó por sus labios y un dolor se instaló en mis costillas; Nancy me había dado un condazo, la miré de soslayo y con un ligero movimiento de cabeza me indicó que mirara hacia el otro lado, por el rabillo del ojo atrape a Axel sonriendo contento mientras se recargaba contra mi brazo, completamente desgarbado, como si nos conocieramos de toda la vida. Nunca habia sentido estas ganas de borrarle la sonrisa de la cara a alguien, creo que me estoy volviendo una salvaje.La hora del descanso comenzó tras el sonido de la campana, Nancy y yo nos levantamos de nuestros lugares y caminamos hacia la cafetería seguidas del parásito. Los demás ya estaban sentados en una mesa esperándonos, cuando llegamos a ellos todos se levantaron y elevaron sus manos en un puño.
—Muy bien, hagamos esto rápido, me estoy muriendo de hambre —Sam sacudió su cabello rubio con su mano libre mientras yo le dedicaba una mirada a Axel—. Él también cuenta, si tu novio quiere entrar en nuestro circulo más le vale acoplarse, no lo dejaré ir sólo por salir contigo —el calor subió hasta mis mejillas, ¿cómo rayos se enteraron ellos de él? Iba a aclarar el hecho de que Axel no era mi novio, pero la voz de Stacy flotó a través del aire.
—Nancy no se calló durante toda la mañana, estuvo mensajeando por el grupo sin parar —Stacy le dedicó una mirada mortífera a la acusada y después me guiñó un ojo—. Estamos enterados de la situación —fruncí el ceño y saqué el móvil de mi bolsillo, una exclamación de sorpresa salió a través de mis labios al ver los seiscientos cuarenta y cinco mensajes en el grupo "El que lo huele es porque debajo lo tiene", cabe aclarar que fue Nancy quien renombró nuestro chat esta mañana y no nos ha permitido cambiarlo.
—No te preocupes, no atribuyen nada importante para la humanidad —la mirada cargada de veneno que Nancy le dedica a Derek por su comentario me hace estallar en una carcajada.
—Niño bonito, levanta tu puño, jugaremos piedra, papel o tijeras —Axel eleva su mano obedientemente tras escuchar la voz de Sam, pero está claro que se ha perdido durante la conversación y su cerebro está intentando ordenar la información, aun así comienza a sacudir su mano cuando Sam habla—. Piedra... Papel... ¡o tijeras! —todos nos detenemos y realizamos el juego dos veces más debido a resultados confusos. Al final nos toca a Axel, Derek y a mí ir por el almuerzo.
—¿Por qué siempre tenemos tan mala suerte? —la voz de Derek nace tras mi espalda y suspiro.
—No lo sé —nos detenemos tras formarnos en la fila y me cruzo de brazos—. Tal vez que deberíamos admitir que somos sus esclavos —Derek y yo intercambiamos miradas para después negar de una forma casi sincronizada y bajar nuestra vista al piso—. Prefiero morir —decimos al unísono y no puedo evitar soltar una pequeña risa, Derek y yo somos muy parecidos en algunas cosas. Un escalofrío asciende por mi columna vertebral y cuando giro mi rostro me encuentro con la intensa y curiosa mirada de Axel.
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LOST (Borrador)
FantasySinopsis. Los Oscuros habían dominado este planeta desde hace muchos años, infundiendo miedo en los corazones de la gente, creando estragos en las calles... y robando almas de inocentes. Afortunadamente, han pasado bastantes años desde aquella época...