Servidor. / KookJin

• X •

Mis ojos se abrieron con lágrimas mojando mis mejillas, suspiré y me senté mirando hacía la puerta.

Brinque hacia atrás con la mano en el pecho, avergonzado. JungKook me miraba desde la puerta.

- ¿Qué haces aquí?.

- Escuché ruidos raros aquí, así que vine.

- ¿Cuánto tiempo llevas ahí?.

- No mucho.

Entrecerre los ojos mirándolo, al darse cuenta levantó las manos en señal de paz. Rió acercándose a mi cama, una vez a mi lado se sentó y me miró serio.

- Estás llorando.

- ¿Qué? No.

Negó con la cabeza y me abrazó, mis ojos se abrieron y un puchero se formó en mis labios.
Deje salir el aire que estaba conteniendo y cerré los ojos.

Reconfortante.

Cálido.

Cómo él.

Lo alejé y me miró confundido, las lágrimas comenzaron a salir de nuevo.
Temble y el miedo me invadió.

- Vete.

- SeokJin, espera.

- JungKook, vámonos.

Miré hacia la puerta y TaeYong estaba mirando a JungKook, pero enseguida su mirada paso a mí, dándome confianza.

- TaeYong, espera.

- Deja al príncipe.

- No te metas, TaeYong.

- JungKook ¿No lo comprendes?, vete.- Dije.

Me miró, su mirada se notaba triste y enfadada. Se levantó y paso alado de TaeYong, empujándolo. Él sólo lo siguió, no sin antes cerrar mi puerta. Suspiré.

Me levanté con rapidez y me acerque al mueble cerca de la ventana sacando de ahí una llave, me dirigí a mi cama sacando una caja de debajo de esta.

Abrí la caja con cuidado, mirando la corona dentro de esta... fue el último regalo de madre antes de su muerte, la miré con los ojos lagrimosos.

Flashback.

- ¿Dónde está mi madre?.

- Señorito, su madre falleció.

Lo miré confundido, luego fruncí el entrecejo y mis ojos se llenaron de lágrimas.

"SeokJin, debes ser fuerte ante cualquier cosa, ¿Vale?.

Nunca debes llorar por nosotros, te aseguro que yo y tu padre estaremos bien.

Deberás tener una gran responsabilidad.

Olvídate de aquel chico, él te hará vulnerable, nunca debes amar, los demás utilizarán eso para dañarte."