Solo sucedió ©

Capítulo 3

Me despierto sobresaltada por el ruido que hace Mia al entrar.

Veo la hora 10:20 am, que tarde, por lo menos pude dormir algo.

- Toc, toc! Puedo pasar?

Estirandome como gato le contesto - Claro pasa!

- Aún dormida Jess? En que quedamos? -hace un puchero adorable

Trae el cabello liso nuevamente y ropa diferente.

- Lo sé, relajate -levanto el mentón- hoy tengo una cita

Se tapa la boca con una mano
- Oh por Dios! Hoy llueve, que digo llueve, hoy en Miami nevara!

- Ah! ya! que payasa -le riño

- Voy a dormir, espero te vaya muy bien en tu cita - dice mientras se va a su habitación

- Yo también espero que me vaya bien -susurro para mi misma

Me baño y me visto en un tiempo record, llevo un jeans rasgado, tennis blancos y una blusa tubo negra y me doy un repaso en el espejo, me miro en el espejo... estoy pálida como un fantasma, se nota demasiado que no salgo, necesito un bronceado urgente, pero será en otro momento.

Camino hacia afuera, tomo las llaves del Honda de mi amiga y le envío un mensaje al doctor.

Jess: Voy para haya

Me contesta casi de inmediato

Thompson: Te espero cariño

El camino se me hace largo, voy conduciendo demasiado despacio, creo que retrasando lo inevitable.

Por fin llego y aparco, es un edificio bastante grande, blanco con puertas de cristal, hay muchas ventanas, en la puerta de entrada principal esta grabado Dr. Thompson cirujano ginecólogo, oncólogo y obstetra -silbo impresionada, que elegancia la de Francia.

Las puertas se abren automáticamente con mis pasos, se me pone la piel de gallina con el aire acondicionado; me suelto el pelo para que cubra mis hombros y guardar algo de calor.

Veo muchas flores de todos los colores, pero prevalecen las flores azul hielo, no se que clase de flores serán. Huele delicioso como ha desinfectante de canela, paso por varios consultorios siguiendo el pasillo largo de entrada, en las puertas están grabados los nombres de cada médico y especialidad.

Todo es tan blanco pulcro y silencioso, llego a una recepción donde una enfermera me sonríe amablemente.

- Buen día señorita, tiene usted cita?

Me muerdo la uña- Bueno, no la registre yo, es decir no agende con recepción personalmente, pero si tengo cita a esta hora.

Asiente y me regala otra sonrisa radiante, es una señora muy simpática
- Tranquila, deme su nombre porfavor y la hora de su cita

Me aclaro la garganta- Jessica Adams, y a la 1:30 pm es mi cita ginecológica

La mujer busca en su computadora y asiente
- Efectivamente linda, aquí está tu cita, es con el Doctor Thompson, eres amiga de él, cierto?

Niego y luego asiento como boba
- Sí lo somos, si somos amigos
-respondo mientras juego con las llaves del coche.

- Eso pensé, él mismo registró tu cita y él te atenderá. - Oye chica -acomoda sus lentes y me da un repaso- tu sí que eres muy guapa lo sabías? Pareces modelo

Parpadeo y bajo la cabeza nunca he llevado muy bien los alagos
- Así me dicen, se lo agradezco mucho, es usted muy amable. Con respecto al Doctor, Supongo que esta muy ocupado siempre verdad? -pregunto sintiéndome avergonzada por quizás hacerlo perder su tiempo