Perfectly Wrong [Shawn Mendes]

Chapter II.- Be Quiet.

—❄—

Día 1: Indiferencia.

Jamás en su vida había visto un castillo tan grande, pero lejos de ser hermoso este era negro y obscuro, con estalactitas colgando de las grandes esculturas y nieve tiñendo de blanco las torres; cabe mencionar que nevaba, todo estaba congelado dándole un aspecto triste y solitario, sin descartar la belleza del paisaje.

La joven Bella observó las puertas del enorme castillo abrirse frente a ella, entró escuchando la nieve bajó sus botas de invierno. El calor de la casa enrojeció sus mejillas y nariz aún mas, no sabía que pensar, aún nadie la recibía y eso le desconcertaba puesto que esperaba ver al supuesto hombre. No llegaba a comprender como el "robo" de una rosa pudo sacar de quicio a alguien. 

—Buenos días, mademoiselle... — Bella miró a todos lados sin ver al responsable de la voz — aquí abajo, señorita.

Al bajar la mirada un objeto que debería ser inanimado se encontraba hablándole, soltó un grito al igual que una patada, sin importar le el dolor de golpear metal este salió volando unos cuantos metros de ella.

—¿¡Pero qué ha pasado!? — ahora un mini reloj caminaba lo mas rápido que podía hacia el metal con velas.

—Parece que no le hemos dado una buena impresión a la joven — Bella respiró hondo, no podía escapar aunque estuviera aterrada.

—¿Q-qué son ustedes? — retrocedió.

—No se altere mademoiselle, yo soy Lumiere — hizo una pequeña reverencia.

—Y yo soy Din Don — ambos tenían un acento al hablar dando a entender que su lengua madre era el francés.

—Tal vez este asustada, pero le aseguro que no planeamos hacele daño, solo hacer que su estadía sea agradable, voy a llevarla hasta su habitación, él señor Mendes no bajará hasta la cena.

Tratando de no perder la calma, asintió sin decir nada mas, guardando cierta distancia de aquellos...objetos. Eran las seis y media por lo que aún tendría que esperar para ver aquel hombre. Una enorme foto de él al finales de las escaleras captó su atención, sus rasgos eran finos y su cabello ondulado color chocolate, a simple vista parecía un buen hombre, tal vez solo buscaba compañía y su estadía no sería tan mala.

Entró a su habitación, era de un color mostaza, amueblado con mesas café y una cama de cuatro pilares, su armario estaba lleno de ropa por lo que no tendría problema alguno. Moría de ansias por conocer al hombre, estaba aburrida y sola, quería hablar con alguien y aunque Lumier y Din parecían agradables el hecho de que hablaran siendo objetos le desconcertaba mucho. Tomó una cálida ducha y se vistió con un vestido color azul recogiendo su cabello en una coleta. Ya hacía unos minutos Lumiere le había dicho que la cena estaba servida, se preguntaba porque tendrían esa forma, pero no quería entrometerse.

Bajó las escaleras hasta llegar al comedor guiada por el exquisito aroma de la cena, la mesa estaba repleta de manjares y por un segundo pensó que tal vez vendrían mas personas. Se sentó en una punta de la mesa y esperó pacientemente a que el hombre bajara. Fue a las siete en punto cuando unos pasos se hicieron presentes dejando ver al chico trajeado con un semblante serio.

—Buenas noches — habló Bella, el hombre se giró antes de responder.

—Buenas noches — se sentó en la mesa y comenzó a comer, estaba algo lejos y eso desconsolaba a Bella.

—¿Cuál es tú nombre? — tragó en seco al ver como solo la miraba fijamente.

—Shawn — volvió al plato.

—Yo soy Bella.

—Lo sé — respondió tajante.

—¿Cuantos años tienes? — Shawn gruñó.

—¿Es la cena o un maldito interrogatorio? — la chica solo bajó la mirada para volver a comer.

—Lo siento...

El único sonido era el generado por sus cubiertos contra el plato al momento de comer. Miraba constantemente a Shawn sin despegar su mirada de la mesa, él era lindo, lamentablemente no se podía decir lo mismo de su actitud. Se levantó de la mesa y caminó de nuevo hacia las escaleras, frenó justo cuando pasaba a mi lado.

—¿Quieres acostarte conmigo? — Bella le miró.

—¿A dormir? — Shawn sonrió.

—Tener sexo — la chica se sonrojo inevitablemente.

—N-no...

—Tengo 24 años — siguió caminando — descansa.

Día 1 superado.

—💛—

No puedo empezar tirando vergazos.
Sorry.

Decidí hacer un batidero estilo

Suzzane/Dinsey/Mane.

A pesar se que he incluido a los personajes como las tazas, Lumiere etc, habrá sirvientas normales, ya ustedes verán después.