Bakugou Katsuki (4)

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Como explicar aquella complicada situación. La señora Midoriya se quedó estética de ver a - cabe mencionar antes veinticinco ahora cinco - su pequeña criatura.

— Mamá~ – Midoriya tomó uno de las manos de su mamá con fuerza, al segundo le sonrió y estiró sus brazos hacia arriba en busca de sus brazos.

— Izuku – la señora Midoriya se arrodillo en el suelo tomando a su hijo en brazos. — No me parezco en nada a la persona que fui hace mucho tiempo, Izuku.

— Mamá es mamá. - le sonrió — Aunque ahora eres mas suave.

Katsuki observó de lejos el comportamiento de Midoriya y de su madre. Por un instante pensó que Inko Midoriya se desmayaría al ver a su hijo de veinticinco convertirse en uno de cinco. Pero para su sorpresa no fue así.

— Cuando me informaron que habían desaparecido del hospital imagine lo peor Bakugou – Inko lo regaño — ¿No me llamaste pensando que me asustaría, verdad? – pregunto con una sonrisa melancólica — Ver a mi hijo a esta edad, me trae mucha nostalgia. A esta edad él aun soñaba en ser un héroe.

Escuchaba cada palabra de Inko, pero todo aquello él lo conocía mejor que nadie, al final de todo, Midoriya había sido su amigos desde que se conocieron en preescolar: — Y ahora lo es – claro que eso lo pensó. El pequeño niño de cinco años no portaba esa extraordinaria habilidad, aún.

— ¿Cuidarias de Midoriya, de todas formas? – pregunto Inko con Midoriya aun en brazos.

— ¿Mama se ira? – pregunto con un rostro triste. Inko miro con ternura a su hijo evitando llorar — ¡No quiero!

— Mama tiene que irse, Izuku – sobando su cabeza le entrego amor de una manera afectuosa. — Mama te ama, Izuku. Por eso deja que Bakugou te cuide por unos dias, ¿si?

— Si – Midoriya siempre fue un buen niño a los ojos de toda, claro que era obvio que haría caso a las peticiones de su madre. Bakuguo, aunque intentaba hablar de eso frente a Deku él no queria separarse de su madre — Lo mejor es mantenerlo oculto, si los villanos se dan cuenta que el simbolo de paz no esta se creara un alboroto.

— ¿All Might no esta? – a Midoriya se le llenaron los ojos de lagrimas y su mama lo trato de calmar.

— No es eso, Izuku. All Might justo ahora esta salvando vidas fuera de Japón, pero el regresara pronto.– mintió. Seria un gran shock para él si se daba cuenta que su héroe favorito en realidad se había retirado cuando el estaba en preparatoria, sin contar que seria entrenado por él gracias al gran poder que había recibido del mismo héroe numero uno. — Bakugou es un gran héroe, el cuidara muy bien de ti.

— Kacchan es un gran héroe, ¿verdad, mamá?

— ¿De verdad sabes quien soy? - respondió asombrado Katsuki apuntándose a él mismo.

— Kacchan se ve mayor, - pensó un poco mas - pero sigue teniendo los mismo ojos.

Katsuki sintió algo en lo profundo de su corazón, no quiso demostrar la emoción que sentía por dentro, pero Midoriya era un niño muy listo para su edad, tal vez esa era la razón por la cual siempre le pisaba los talones.

— Bakugou, no seas penoso - Inko llevo un mano a su rostro tratando de esconder la sonrisa que se había asomado a sus labios, sabia que la unión que tenían aquellos dos desde niños era especial, algo que no podía evitar.

— ¡No es eso! - oculto sus ojos con la palma de sus manos sacando un suspiro alto — de todas formas, no le comentes a, ya sabes quien, sobre esto. No quiero ni imaginar que expresión hará si se da cuenta que esta perdido, o peor, que dejo de existir.

Bokugou se dio cuenta de lo que había dicho y creo un gran estrés sobre él mismo.

— ¡Oh, cielos! - Inko cayo en cuenta de eso mismo en ese momento — A Toshi de verdad le dará un infarto si se entera de esto.

— De todas maneras, tratemos de que esto sea secreto-

— ¡Bakugou no sabes lo que paso! - escucho la voz de Kirishima por la entrada — De alguna manera muy curiosa – entrando a la sala miro a la Señora Inko y una sonrisa se estiró por sus labios saludando de manera alegre.

— Bakugou, nosotros... – Al igual que Kirishima saludo de manera cordial a la madre de Midoriya y al verlo no puedo evitar correr a cargarlo en sus brazos.

— Parece que no hijo es muy amado – se asomó una sonrisa por los labios de la sra. Inko.

— ¿Que hacen aquí? – Bakugou trató de evitar malas palabras frente a Deku, pero por dentro estaba maldiciendo como loco por esa interrupción.

— ¡Ah, si! – Kirishima hizo molinos con sus dedos mirando hacia sus zapatos — veras, la cuestión es que mientras distaríamos a los periodistas y camarógrafos...

— Uno de ellos se dio cuenta que era un show... — Momo dio unos pasos atrás, aún sin soltar a Midoriya.

— Lo bueno de todo esto es que iba pasando Uraraka por allí... – sonrió y entrecerré los ojos en amenaza.

— Y como sabes que ella casi nunca está sola por la ciudad... – cada palabra hacía que quisiera estallar.

— Resultó que estaba con algunos de la academia... – una de mis venas estaba palpitando. Me estaban cansando.

— Me está fastidiando que hablen los dos juntos, – amenace — uno a la vez.

Momo miró a Kirishima mientras ella jugaba con Deku en sus brazos.

— En fin, para no hacerlo tan largo – el timbre de la puerta sonó y la sra. Inko fue a abrir — resulta que como Uraraka estaba con algunos de la academia... – rio un poco llevando su mano a su frente — Y es algo divertido, ¡debiste ver sus expresiones cuando se enteraron!

— ¿De que se enteraron? – me hice el loco, podía comprender a donde iba todos esto.

— Bakugou – se escuchó la voz enojada en la entrada — ¿¡Donde demonios está Katsuki!?

Al escuchar aquella voz solo pudo llevar su mano hacia sus ojos cerrándolos en frustración y cansancio. Deku escondió su rostro en el cuello de Momo, al final de cuentas, a él no le gustaba que gritaran.

— Te juro, Katsuki – Uraraka entró por la puerta a la sala, donde todos estaban y tras de ella tres personas más — que te mataré.

— Tenias que ser tu, cara redonda – mirándola con desprecio se dio cuenta de la mala relación que se cargaban.

Uraraka miró con odio a Katsuki, y por supuesto que sabía por qué: y es que él le había robado el amor de Midoriya, o eso creía ella.

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Ustedes saben que Uraraka no me cae del todo, pero esta vez le daré una oportunidad como personaje. Simplemente está enojada porque no le aviso de la situación, pero a Momo si.
Pero bueno, ella sigue enojada de todas formas 🤷🏻‍♀️

y.

Little him | katsudeku Donde viven las historias. Descúbrelo ahora