Little him | katsudeku

Bakugou Katsuki (8)

— Ese es un gran problema – Kirishima se cruzó de brazos.

— Eso ya lo sabemos, idiota – Kaminari, quien por Eijiro que no pudo resistir en no decirle lo que había sucedido con Midoriya, respondió de manera sarcástica.

— Deja de decir maldiciones frente a Deku, ¿quieres? – Uraraka los miró de mala manera e Ilda la sostuvo de su hombros antes de que asesinara a aquellos dos.

— ¿Desde cuando su actitud dulce cambió a domadora de leones? – preguntó Kaminari algo desorientado.

— Ese es un tema que jamás se toca – Eijiro tomo el hombro de su amigo y asintió hacia la respuesta que Todoroki había dado.

— ¿Que no ven lo serio que es esto? – Momo era quien lideraba todo — El hecho de que Midoriya sea un niño fue el principio, pero nuestro objetivo es protegerlo sin importar que.

— Kacchan, realmente tengo muchos amigos, ¿no es así? – Midoriya lo miró con ojos brillantes.

— Los tienes – confirmó con una sonrisa.

— La pregunta aquí es, ¿como la liga de villanos sabía de la situación? – la sala quedó en completo silencio esperando que alguien pudiera contestar la pregunta de Todoroki.

— Ponte a pensar, ¿que sería lo que haría al héroe número uno convertirse en un niño si no fuera la liga de villanos? – era una pregunta lógica, Todoroki se quedó pensando por un instante a la respuesta que había dado Denki.

— Eso podría ser, pero en todo caso no tendría sentido que hayan venido y actuado como Yao-momo si conocen la situación actual de Midoriya.

— Se puede decir que fuera de todo, cabe la posibilidad de que los culpables sea una organización independiente de la liga de los villanos – Uraraka miró a todo buscando alguna duda en sus rostros.

— Eso puede ser posible – Eijiro trato de relajarse, pero su amigo de bachillerato solo estaba allí sentado acariciando el cabello verdoso de su prometido — en todo caso deberíamos mantener a Deku protegido.

— En eso creo que todos estamos de acuerdo – hablo por primera vez Ilda — Bakugou, sería bueno que alguno de nosotros te ayude a cuidarlo.

— ¿Creen que dejare que alguno de ustedes lo cuide por mi? – preguntó a la defensiva — No es que desconfíe de sus capacidades, pero no.

— No era una pregunta, Bakugou – Uraraka lo miro encendiendo una chispa de coraje en él.

— Me vale una mierda si era o no pregunta – mirándola aún más amenazante, apartó las manos de la cabeza del menor — mi respuesta final es un no, y se pueden joder.

— ¿Pueden dejar de hablar así frente a Deku? – Yao-momo llevó su mano a su frente, sosteniéndola con fastidio — No hagas las cosas más complicadas, somos sus amigos y queremos ayudarlo. Si el tuviera nuestra edad... – Momo guardó silencio — no, incluso si la tuviera, nuestro deber como amigos es mirar por él, y el tuyo apoyarlo.

— No tienes que decirme que hacer – levantándose del sofá, tomo a Izuku de los brazos recargarlo en su pecho. — Puedo cuidarme solo, y se que él también.

Eso último lo dijo en un suspiro. Dándose la vuelta, camino directo a las escaleras — Dejaré que solo dos de ustedes se queden por noche, no más – sin mirar a nadie, comenzó a subir las escaleras — si hacen demasiado escándalo los sacare a patadas pedazos de mierda.

"Ese es Bakugou", pensaron. Y era así de simple, todo el tiempo pensando que podía solucionarlo por su cuenta, y no era una idea tan errónea, en sus años de bachillerato pocas veces necesito que alguien le diera una mano, o la extendiera para él, en cambio, en ocasiones (y más cuando comenzó a salir con Izuku) el era quien decidía ayudar a sus compañeros de clase, pero incluso eso, era extraño.

— Bien, ahora que tenemos la aprobación de Bakugou – mencionó Denki — ¿quieren que esto sea aleatorio?

Todos se miraron algo incomodos, y aunque sabían cómo funcionaría esto, ellos querían permanecer como los pares que se habían asignado hacía tiempo.

*

Recostándose en la cama, los pequeños y delgados brazos del pequeño se sujetaron con fuerza a los grandes y voluptuosos brazos de Bakugou.

— Kacchan – su voz apenas era audible, era como el susurro de un ave a lo lejos. Con un sonido de su garganta, algo similar a un "uhm" el pequeño prosiguió — ¿puedo preguntar algo?

Abriendo los ojos, miró al niño: — Dime.

— Si vuelvo a ser un adulto, ¿seguirás amándome? – su pregunta lo sorprendió.

— ¿Por qué crees que puede cambiar?

— Es solo que... – su rostro cambió a uno más triste — no creo ser lo suficiente como para quedarme en tu casa... solo soy un quirkless, solo seré un estorbo en tu vida.

Pasando una de mis manos por su cabello, lo revolotee: — Con o sin Quirk, eres mi amigo de la infancia, no serias ninguna molestia para mi nunca.

— ¿Kacchan de verdad no cree que sea una molestia? – sus ojos brillaron con esperanza.

— Así es – viendo como una sonrisa se formaba en sus labios, lo resistí.

— Es hora de dormir, cierra los ojos.

Mi corazón bombeaba sangre de manera acelerada en todo momento, y era algo que pasaba desde hace mucho tiempo, y es que los ojos brillantes de aquel chico, a cualquier edad y en cualquier época, hacía que su corazón latiera a mil por hora.

— Kacchan es muy ruidoso.

Solté aire ante su comentario y reí a lo bajo. Me había atrapado.

*

— Denki, Kirishima – Uraraka los miró con reproche — será mejor que den lo mejor y no terminen molestando – cruzándose de brazos, los dos se asustaron a la mirada de la castaña — y será mejor que se comporten como dos adultos en casa ajena.

— Si, señora.

Pero por supuesto que esa noche serían serios como adultos.

O eso creyeron.

—————————————————
*indirectas muy directas*

Las cosas como son 🤷🏻‍♀️

y.