Admirer Secret BillDipp

It is real.

Bill se despertó porque alguien lo llamaba era una de las hadas del bosque la que lo estaba removiendo de su tan preciado sueño, soltó un gruñido para escuchar lo que el hada tenía que decir cosas como; Fuego, escapa. Eso es lo que lo puso alerta para hacer que se levantara de golpe.

-¿Qué rayos? –Exclamo, las cosas estaban mal –

1.-Estaba en un acantilado.

2.-Se supone que se había quedado dormido junto con sus hermanos.

3.- ¡el puto bosque se estaba incendiando!

No había tiempo para pensar, miro hacia lo lejos buscando una forma de bajar de allí, desde esa altura podría apreciar que algo extraño estaba ocurriendo en Fight Falls, había una especie de rasgadura en el cielo el cual parecía de un ocaso eterno, una cascada de sangre inversa ¿eso eran monstruos? se froto ambos ojos pensando que tal vez era un engaño visual o incluso de su mente, pero no. Podía ver con sus dos ojitos que eso que parecía apreciar a lo lejos no era para nada una ilusión óptica. ¿Será que se había drogado? No... él no tomaba ningún estupefaciente no era necesario. ¿Planta u hongo del bosque? podría ser, pero ese día no fue al bosque, estuvo paseando todo el día por Fight Falls junto a Dipper y Mabel, quienes compraban recuerdos para su hogar.

Un árbol incendiándose cayó cerca de él lo cual le hizo volver a la realidad, bajar de allí como sea que hubiera llegado y buscar a los demás, el hada se había marchado por quién sabe dónde y además ¿por qué un hada lo había despertado? No es que era malo con las criaturas pertenecientes a ese bosque, bueno con los Gnomos si por querer secuestrar a su hermano menor y volverlo su reina.

Aunque recordándolo bien, cuando fueron a ese prado Will estuvo jugando con las hadas haciendo corona de flores y otras cosas, mientras él estaba desde lejos cuidando a su hermano menor de que no quisieran secuestrarlo para hacerle reinar alguna tierra mágica siendo esposa de quien sabe qué cosa. Comenzó a correr hacia abajo, el fuego era sofocante y aunque llevaba solo los pantalones de su piyama sentía el calor quemarle la piel.

Los arboles caían y comenzaban a rodar colina abajo lo bueno se detenían por otros árboles, lo malo estos se incendiaban más rápidos, si no se apresuraba sería un asado de Cipher y no tenía ganas de serlo. Soltó un gruñido cuando algunas brasas llevadas por el viento comenzaron a caerle cerca, maldecía su suerte y del hecho de haber llegado hasta allí. O como rayos había llegado allí, más criaturas mágicas comenzaron a aparecer huyendo en estampida lejos del fuego, entre desesperado intento por escapar y su intento por esquivar a los seres habitantes del bosque termino chocando con un ¿chico-ciervo?

-Uh –Se quejó por el golpe –

-Ah –El ciervo se levantó para observarle – ¿Estás bien? –pregunto –

-Si –Se colocó de pie con velocidad – Oye, ¿podrías llevarme? –Comentó señalando hacia el fuego –piernas cortas.

-El ciervo hizo una mueca llevar a un humano solo lo retrasaría, pero había chocado con él ¿Y de todas formas que hacía un humano tan adentro del bosque? –Bien –Contestó para darle la espalda, Bill sonrió para subirse –

-¡Arre! –El chico ciervo se le quedo mirando con una cara de ¿es enserio? – O has lo que prefieras.

El ciervo comenzó a correr mientras Bill intentaba sujetarse como podía indicándole los árboles que estaban cerca a caer, aquello hacía algo más sencillo su recorrido, excepto por las llamas que lo estaban sofocando vivo, el sentir su piel ser quemada por el fuego, la cual había tomado una ligera tonalidad de rosado, le costaba para respirar el humo hacia que sus pulmones se sintieran arder.