Capítulo 20

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─La verdad es que estoy bastante sorprendida ─dijo Lexa mientras ella disponía unos cuantos ingredientes sobre la encimera de la cocina.

─¿De mi belleza natural? Muy mal, pensaba que ya te habrías dado cuenta ─contestó y se fijó en cómo la castaña cerraba los ojos durante unos segundos.

Era uno de esos gestos que solía hacer cuando algo le molestaba. Y es que al parecer el hecho de bromear acerca de su amor propio no era muy de su agrado. Y lo podía confirmar, ya que no era la primera vez que ocurría, pero a ella le gustaba fastidiarla un poquito y ver sus reacciones en primer plano.

─¿Has pensando alguna vez en dejar de ser tan egocéntrica? ─preguntó Lexa.

─¿Soy egocéntrica? No lo creo ─contestó sonriente, provocando una nueva reacción en la castaña, quién esta vez optó por alzar una ceja ligeramente, cuestionando sus palabras con ese simple gesto─. Es solo que me quiero mucho ─aclaró─. Todos deberían quererse un poquito más ─puntualizó.

─Con lo de bastante sorprendida me refería al tema del orden ─dijo Lexa cambiando el rumbo de la conversación.

─¿Qué pasa con el orden? ─preguntó parando todo movimiento y centrándose en la escritora.

─Pasa que eres un maldito desastre durante la gira y aquí no hay nada por medio ─contestó la castaña─. Todo está impoluto.

─La diferencia es que esta es mi casa y en los hoteles cuentan con servicios propios de limpieza. Lo sabías, ¿verdad? ¿No estarás tan jodidamente loca y limpias y haces la cama antes de marcharte de los hoteles? ─soltó para intentar molestarla un poco.

─Te pasas de desastre. Reconócelo ─le pidió la escritora.

─Te pasas de dramática. Asúmelo ─dijo antes de sacar un par de recipientes─. Y ahora, ven aquí ─le ordenó señalando justo a su derecha─. Me lo prometiste, así que mueve el culo.

─No está bien que me hagas chantaje con información de la biografía para que yo haga lo que tú quieras ─le informó Lexa antes de bajarse del taburete.

─No te quejes tanto. Vas a ser la que se lleve el beneficio por completo ─dijo sin dejar de mirarle a los ojos─. Te has llevado información para la biografía y ahora te voy a enseñar a hacer una tarta ─aclaró─. Agradécemelo cuando te quedes sin sitios a los que llamar para comer y tu cuerpo reclame alimento.

Lo dijo acompañado de un reconocimiento visual a su cuerpo de abajo hacia arriba, sin cortarse un pelo, parándose en sus ojos y observando cómo Lexa la miraba con la ceja alzada de nuevo mientras ella dibujaba una pequeña sonrisa.

─¿Qué ha sido eso? ─preguntó la castaña.

─Eso ha sido un reconocimiento ─contestó sin dudar y sin filtro alguno─. Te quedan muy bien los vaqueros, la muy maldita de Raven tenía razón.

Aclaró su respuesta antes de recogerse el pelo y pensando que la escritora muy posiblemente ya no se acordaría de la referencia que había hecho Raven sobre cierta parte de su anatomía durante la gira, concretamente sobre sus piernas. En ese momento optó por no darle importancia y contestar como si no le hubiesen llamado para nada la atención, algo que no era cierto. Había visto a la escritora un par de veces con vestido o falda, y la verdad era que Raven tenía razón, que Lexa tenía unas piernas increíbles y que a ella cada vez le llamaban más la atención.

─Bien. Vamos a empezar por la masa ─dijo acercando los ingredientes─. ¿Sabes? Es eso que luego te comes y está tan rico ─bromeó y la castaña la empujó ligeramente, provocando que un poco de harina cayese al suelo.

Contra el viento (AU) -Español [Clexa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora