El magnate estaba entrando en su lujosa mansión cuando vio la figura de su madre asomarse por la sala.
- Hijo mío, ¡al fin regresas! - exclamo la mujer mientras lo abrazaba como si se tratase de un niño pequeño.
- Por favor madre sólo he estado en las empresas, nada más - dijo acomodandose el traje.
- Sé que te molesta que lo mencione, pero hay una mujer que me gustaría que conocieras, he organizado mañana una cena para que puedan verse- Las palabras de su madre iriritarón a Orhan. Ya había conseguido una nueva candidata.
- ¿Acaso se trata de una mujer para que se convierta en mi esposa? - pregunto su hijo mientras subía rumbo a su habitación.
- Sabes que eres el hijo mayor, deberías empezar a forma una familia como tus hermanos - el turco paso sus manos por sus cabellos y le dio un gesto de negación, sus hermanos habían sido unos tontos que se dejaban manipular como marionetas de su madre, incluso uno de ellos, Erkan, había dejado ir al amor de su vida por casarce con la mujer que su madre habia escogido para él, su vida era miserable, no amaba a su mujer y tenía que vivir bajo las apariencias de una familia feliz. No quería eso para él.
- Ya te he dicho lo que pienso al respecto, no me gusta formalizar.
- Eso es de adolescentes - dijo furiosa su madre-. Estas próximo a cumplir los treinta y ni siquiera consideras el tener una novia decente a tu lado.
- A mi nadie me va a forzar a un matrimonio.Lo lamento pero yo decido sobre mi vida - siguió su camino sin prestar la mínima atención a la voz de la mujer.
- La reunión se hará gustete o no - la señora Deniz había sido clara con él, y cuando ella daba una orden ni siquiera su marido era capaz contradecirle.
Nina se encontraba terminando de arreglar sus cosas después de una tarde agotadora en su nuevo trabajo. Decidió tomar una ducha para relajarse, pero cuando intento abrir la llave de la regadera, no salía ni una gota de agua.
- ¿Qué demonios? - se dijo mientras intentaba una y otra vez moverla.
Sin pensarlo dos veces la latina salió de su apartamento en toalla, dispuesta a reclamarle a la dueña del lugar sobre el servicio de agua.
Una de sus vecinas estaba a punto de entrar en su apartamento cuando se tropezó con esta.
- Vaya mujer tan vulgar - reclamo una de las mujeres que vivía allí en cuanto la vio-. Que vergüenza.
Nina rodo los ojos,no era para tanto, sólo estaba en toalla, ignoro la reacción de esta y tocó dos veces la puerta de la dueña del edificio quien salió a atenderla.
- Buenas noches señorita - dijo la mujer en cuanto la vio parada en su puerta.
Lucia molesta.
- El servicio de agua no funciona en mi apartamento - gruño la morena.
- Por Allah se suponía que debían haberla colocado esta mañana.
- Pues no lo han hecho - respondió furiosa.
- Deberías mejor entrar antes de que hayan problemas con los demás inquilinos o que puedas contagiar la gripe - dijo la mujer haciéndola pasar á su apartamento.
Nina observó el lugar en el que vivía la mujer, todo era reluciente parecía una casita de porcelana.
- Puedes ducharte en mi baño y puedo prestarte un poco de ropa de mi hija, hasta que mañana coloquen el servicio del agua. ¿Te parece?
- No quiero incomodarla- dijo apenada-. Sus inquilinos me miran extraño - dijo la latina cuando se acercaba al baño-. Es como si fuera un bicho raro.
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Destinos Prohibidos
RomanceSus ojos eran tan verdes como una piedra de opalo, sus labios rojos como la mismísima sangre, sus cabellos negros como la oscura noche, una belleza indescriptible que atraeria la atención de cualquier hombre. Cuando las vidas de Nina y Orhan se cruc...