Destinos Prohibidos

11. Amargas mentiras

Recuerdame - Pablo Alboran

Hasret observo como su suegra se tensó ante la actitud de su marido, antes de que alguno de allí protestara algo en especial la señora Déniz, Mohamed, el padre de ellos intervino tratando de que las cosas se calmasen.

- Mi hijo está en lo correcto, no tenías ningún derecho en golpearla – dijo furioso.

- Mohamed..

- Acepta la realidad de las cosas y respeta su matrimonio.

Erkam ya no soportaba las actitudes de su madre, había aceptado seguir en la casa solo porque Hasret se lo había pedido, y porque su hermano vendría a visitarlos, pero eso iba a cambiar estaba dispuesto a irse lo más pronto de allí.

Se encamino hacia el despacho de su padre ignorando la cena.

- ¿No piensas cenar con nosotros? – cuestiono su madre.

- Se me ha quitado el apetitito – respondió él mientras su padre lo seguía al despacho.

Hasret quedo en medio de la escena. Casi podía ver los pensamientos de su suegra reflejarse en su mente, pero a la larga no le importaba, no estaba dispuesta a guardar más secretos.

- Toma asiento cuñada – dijo Khalib mientras hacia una de las sillas a un lado.

- Tal vez debería hablar con Erkam.

- ¿Para qué? ¿Para que arruines más las cosas? – dijo en tono de molestia la señora Déniz.

- Le voy a pedir que se mantenga alejada de mi matrimonio – respondió ella levantando la quijada-. Usted es sólo la madre de Erkam, no puede disponer de su vida como quiera solo por llevar ese título.

Aisha bajo la cabeza sonriendo. Sabía que Hasret había soportado ya mucho a la bruja de su suegra y le alegraba que alguien aparte de ella la irritara con sus actitudes.

- En eso estas en lo correcto – dijo mientras le sonreía-. ¿Cierto cariño? – miro a su marido y él le devolvió una sonrisa.

- Cierto mí amada Aisha.

- Claro, ahora todos se colocan en mi contra, no me sorprendería que alejaras a mi nieto de mí.

Aisha rodo los ojos, siempre era la misma discusión.

- Nuestro hijo nacerá acá, usted puede verlo cuantas veces quiera.

Erkam estaba destapando una botella de licor cuando su padre atravesó la puerta del despacho.

- Debemos hablar de todo esto – dijo el señor Mohamed tomando asiento en una de las sillas.

- Si vienes a cuestionar lo que le he dicho a mi madre, no pienso cambiar mi postura padre – dijo su hijo mientras tomaba una copa.

- No te culpo, conozco a tu madre, Deniz es una mujer muy aferrada a lo que cree ella es lo correcto. No acepto la forma en la que ha actuado delante de tu esposa.

- Voy a mudarme con ella y me mantendré lo más alejado mientras mamá siga con lo mismo. Ya no soy un adolescente.

- Sobre eso quería hablarte, quise ayudarte con ello. Por eso te daré una parte de las propiedades para que vivas con ella allí.

- No es necesario padre, puedo comprar una para nosotros sin tener que molestarte.

- Erkam, no es molestia hijo, ya estoy anciano y solo quiero ver a mis nietos reunidos. Sólo trata de ser feliz, hablaré seriamente con tu madre de sus actitudes.

- No sé realmente lo que le sucede a mamá - dio un soplo mientras se desabrochaba el nudo de su corbata-. Cuando estaba con Jade cuestionaba nuestra relación porque ella no era de familia adinerada y ahora con Hasret actúa igual,hasta podría jurar que peor.