No me sueltes por favor

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Ambar:
Solo habia pasado un mes desde que regresé a la Facultad y ya me habia resignado a saber que era ese tan dichoso secreto que cambio mi vida, lo único que sé es que tiene que ver mucho con Matteo.

La curiosidad me mata y pueden llamarme loca porque yo misma empiezo a creer que lo soy. Estoy esperando a Matteo, me sé de memoria el camino de su casa hasta la Universidad. Lo veo doblar por la esquina de siempre y lo jalo del brazo.

- pero que..?!!- se calmó al ver mi rostro - Ambar, que pasa?

- que me pasa? Me estoy volviendo loca. Matteo yo te quiero con todo mi corazón y vos solo te empeñas en alejarme. Es que no te das cuenta que los ultimo recuerdos que tengo son contigo. Me duele, me duele cada vez que me esquivas, cada vez que me ves pero pasas de frente como si yo fuese tan poca cosa como para siquiera recibir un salido.... Que te pasa a vos?!- grite desesperada

- Ambar, por favor ...- estaba empezando a llorar
- no Matteo, decime ahora que fue ese error tuyo o...terminamos porque yo te engañe con otro chico?- casi no tenia voz para decirlo, recuerdo que toda mi vida estuve enamora de Matteo y resulta que el año pasado lo engaño? No lo creo.

- Que?!! No, para nada- dijo inmediatamente despues de mi comentario.

- entonces?
- me odiarias- dijo cabizbajo y sin mirarme- terminamos por mi culpa.
- si seguis esquivandome te juro que si voy a llegar a odiarte. Decime que fue tan malo como para que yo me volviese la rebelde del año.

- no- el negaba con su cabeza- basta Ambar, por favor.
- decimelo ya, venga Matteo, no creo que hayas llegado al punto de engañarme, sincera...- vi como bajaba su mirada de nuevo. Al instante me artepenti de haberlo dicho. Puede que hagamos estado tres años pero llevo toda mi vida enamorada de él. Ademas desde niños fuimos los mejores amigos - vos no...- mi voz se me cortaba - Matteo, mirame al menos- levantó su mirada y sus ojos estaban rojos... No puede ser.

- por favor Ambar creeme que fue un error...estaba demasiado borracho y ni siquiera lo recuerdo, por favor- prácticamente me estaba suplicando comprensión.

- quien fue? La conozco?- digo de manera dura a lo que él asiente. Se trata de acercar para tocarme el hombre pero lo empujo- alejate de mi...no te quiero volver a ver nunca mas.

Me fui corriendo de alli y no me importó que tuviese clases. No importa casi nada ahora. Yo solo queria...solo me diriji al Roller para patinar, creo que es lo unico que me relajaria. Como estaba yendo apurada crucé la pista sin mirar pero en eso suena una bocina. Me detengo, estaba paralizada pero la moto que iba hacia mi se desvía rapidamente al parque y se detiene, por suerte no le paso nada al conductor.

Lo veo salir de su moto, quitarse el casco y...ay no, Simon. Se dirije a pasos largos y rapidos hacia mi.

- se puede saber que te pasa?! Como se te ocurre cruzar la pista sin mirara y asi?!!- se que hice mal pero quién se cree este para tratarme asi. Estaba enojadisima y simplemente en vez de llorara empecé a gritar como loca.

- y a vos que te importa lo que haga?! Lo único que sabes hacer es tratar mal a la gente- y era cierto, cada vez que nos topabamos él era la persona mas ruin de todas.  Lo estaba enfrentando. El se pasó las manos por el rostro y cuello.

- tu me importas?! Acaso no vale nada tu vida como para que te avientes así a la calle, te imaginas sini te hubiese esquivado- no gritó pero se le notaba furioso...era...extraño.

Ante las palabras que dijo me quedé sin comentarios. Estuvimos en silencio por poco tiempo tratando de regular nuestras respiraciones. Estábamos uno en frente del otro pero nadie decua nada hasta que el por fin rompio el hielo.

- por que estas asi? - pregunto mas calmado y... dulce?

No respondo y me alejo de él. Queria llorar a SOLAS, no necesitaba la compañía ni la lastima de nadie.

- espera!!- escuche su voz a lo lejos.
- dejame sola, Simon- dije sin voltear y con la voz alta y fuerte para que me escuche.

Mas todo lo que dije no funcionó, al rato senti su mano sobre mi brazo para luego haciendome girar para quedar cara a cara con él. Me miró a los ojos y me perdí en su mirada, a lo mejor no queria estar sola, solo necesitaba que alguien me diga que todo estará bien y que me proteja entre sus brazos.

Miro hacia otro lado tratando de no ver mas sus ojos. No me sentia incómoda pero me asustaba, se suponia que lo detesto por ser tan poca cosa y tratarme de la peor manera cuando le va mal en su dia pero hoy...hoy estaba DISTINTO, se sentia distinto. Una mano suya toca mi menton y hace que de nuevo lo mire, me sentí fragil. Luego actue sin pensar, no me importaban las consecuencias.

Me tire entre sua brazos abrazandolo, lo acerque y lo apreté fuerte contra mí. Tardó un rato en reaccionar pero al final me envolvió entre sus brazos.

- no me sueltes, Simon, te pido por favor que no me sueltes- me aferre mas .
- Ambar, yo no se lo que está pasando pero te prometo que todo va a estar bien- dijo en el abrazo.

Nos separamos un poco. El abrazo que nos dimos se sentia familiar, algo muy cálido. Sus dos manos se posaron en mi rostro y me miró detenidamente de manera dulce.

- no estas sola...la verdad- senti que me acercaba a él para quedarnos en otro abrazo. No queria ni quiero separarme, es algo raro. Solo me siento protegida, me quedé asi con Simon.

Holaaaa. Queria saber que lea parece la historia, si les gusta y eso...

Enamorarse otra vez - SIMBARDonde viven las historias. Descúbrelo ahora